Los insólitos robos de la Copa del Mundo: un perro, un reducidor de joyas argentino y el misterio que perdura
El trofeo Jules Rimet, que se entregaba a las selecciones ganadoras de los mundiales de fútbol entre 1930 y 1970, fue robado dos veces. La primera en Londres, en 1966, y fue encontrada dos meses después por un perro con más olfato que la Scotland Yard. El segundo robo fue en Rio de Janeiro, por un grupo capitaneado por un joyero. Nunca más apareció. Las versiones sobre su destino