“¡Clack, clack, clack!”, ¿el renacer de las máquinas de escribir?
A pesar de la era digital, las clásicas máquinas de escribir siguen teniendo fieles que prefieren sus ruidos y su textura mecánica antes que la frialdad veloz e intangible de lo digital. USA TODAY repara en un negocio de Filadelfia que es mucho más que eso, y que le gusta especialmente a Tom Hanks