A los 40 renunció a su cargo en una multinacional para hacer esculturas de hierro: “Mi cerdita es la musa inspiradora”
Mauro Ketlun tenía una vida estable y exitosa. Pero algo lo angustiaba. Buscó reinventarse y lo hizo a través de su hobby, el arte, junto a su mascota Josefina, un mini pig. En pandemia se consolidó. Su historia de vida inspira a seguir los sueños