Jorge Galli, el cura que no tuvo “una valoración positiva” de la lucha armada y así salvó muchas vidas
En 1973, pocos días después del asesinato de José Ignacio Rucci, Perón convocó a este sacerdote para pedirle que intentara disuadir a los jóvenes peronistas de seguir en el camino de la violencia. Su imperdible testamento