La audiencia para expulsar al ciudadano ruso buscado por Interpol se postergó hasta mañana por falta de traductor
Valentin Kazantsev, de 38 años, esbozó “razones sanitarias” para que le permitan ingresar a la Argentina, ya que “no quiere ir a la guerra”, precisaron a Infobae fuentes judiciales. Su situación se da en el marco de las recientes investigaciones por organizaciones ilegales que les cobran USD 35 mil a las embarazadas rusas para parir en el país y tramitarles la residencia