Sergei Eisenstein en sus propias palabras: “Constanza (Adonde va El acorazado Potemkin)”
Este texto del director ruso, así titulado por la ciudad rumana donde desembarcaron los marineros luego de la insurrección relatada en la película, discurre sobre el futuro del cine soviético e introduce el concepto de “pathos”, fundamental en su teoría cinematográfica