Al femicida de Magalí Vera le rechazaron la domiciliaria y luego denunció a la familia de la víctima

Javier Cerfoglio está preso en el penal de Batán por el femicidio de su pareja Magalí Vera. Para la Justicia, el pasado 1 de diciembre la golpeó en la calle hasta dejarla inconsciente. Luego, la subió al auto y terminaron hundidos en el río Quequén, donde la Prefectura Naval encontró a la víctima sin vida: ahogada. En el último tiempo, el acusado recibió un nuevo rechazo a su pedido de arresto domiciliario. Y, ahora, denunció a los padres de la víctima por amenazas en una carta escrita a mano.

Para el detenido, los padres de Magalí estarían conspirando para asesinarlo en prisión. La denuncia fue realizada por escrito y allí Cerfoglio afirmó haber recibido un llamado telefónico en el que le advirtieron que un ex compañero de trabajo y los dos hermanos varones de la víctima planeaban “eliminarlo”.

También señaló que los padres de Magalí, Felipe Vera (74) y Stella Maris Castro (65), estarían ofreciendo dinero a cambio de su asesinato.

Según su testimonio, los supuestos hostigamientos en su contra comenzaron poco tiempo después de ser trasladado al penal. En esa misma misiva, el acusado advirtió: “Si me pasa algo, hago responsable específicamente a la familia Vera”.

La presentación fue realizada a través de su defensor oficial, quien adjuntó la nota enviada por Cerfoglio. Por tratarse de hechos supuestamente ocurridos dentro del penal de Batán, que está bajo jurisdicción de Mar del Plata, la documentación fue derivada a la Fiscalía General de esa ciudad para su evaluación.

A pesar de ello, fuentes judiciales consultadas por Infobae aclararon que este nuevo planteo “no modifica absolutamente nada de la causa principal”, en la que se investiga el femicidio de Magalí Vera y por la que Cerfoglio seguirá preso.

Es que la Justicia ya le rechazó dos veces su pedido de prisión domiciliaria. Primero, el planteo realizado por la defensa del acusado fue denegado inicialmente por la jueza de garantías de la causa y, luego, por la Cámara de Apelaciones, tras la oposición formulada por el fiscal de Necochea Marcos Bendersky.

Mientras tanto, el expediente aún no fue elevado a juicio, ya que resta completar una última pericia, denominada “secuencia fáctica”, que implica una reconstrucción técnica y cronológica de los hechos.

Cuando la investigación penal preparatoria esté completa, el fiscal Bendersky pedirá la elevación a juicio contra Cerfoglio por homicidio cuádruplemente agravado por el vínculo, por mediar violencia de género, por ensañamiento y alevosía.

La fiscalía espera que el juicio se concrete durante el segundo semestre del año.

Cerfoglio, de 39 años, fue imputado por el femicidio de Magalí luego de que la autopsia confirmara que la causa de la muerte de la joven fue asfixia por sumersión y que el cuerpo presentaba politraumatismos perimortem.

El hecho que derivó en la muerte de Magalí Vera ocurrió tras una fiesta de casamiento en las afueras de la ciudad bonaerense de Necochea. La pareja discutió en el evento y abandonó el lugar alrededor de las 4.

Cámaras de seguridad privadas y municipales registraron la agresión física de Cerfoglio a Vera y la posterior maniobra en la que dirigió el automóvil hacia el río.

En las grabaciones, según reconstruyó Infobae, se observa cómo Cerfoglio golpeó a Vera durante aproximadamente un minuto y medio en la intersección de las calles 50 y 53. Luego, la subió al auto y condujo hacia un terraplén donde arrojó el vehículo al agua. Cuando la Prefectura Naval rescató el cuerpo, la mujer ya estaba sin vida.

La víctima, de 34 años, trabajaba en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) y desarrollaba un emprendimiento de pastelería. Según sus allegados, había logrado independencia económica poco antes de su muerte, hecho que habría generado conflictos en la pareja.