Juicio por la muerte de Maradona y una audiencia que promete roces: “Usan la técnica del bebé llorón”, dijo Burlando sobre la defensa

La estrategia de la Fiscalía en el juicio por la muerte de Maradona de no adelantar los nombres de todos los testigos de cada jornada, algo avalado por el tribunal, generó cuestionamientos y rispideces de los abogados de los siete imputados desde el primer día, incluso con un tenso cruce que tuvo su coletazo en las últimas horas. Fernando Burlando habló precisamente de las quejas de los defensores: "Usan la técnica del bebé llorón, que llora hasta que lo alzan para que le concedan un capricho. En este caso, es un capricho. El Fair Play es cumplir la ley".

Las palabras de Burlando, abogado de la querella que representa a Dalma y Gianinna, dichas a Infobae le ponen el marco a una nueva jornada de testigos citados por los fiscales Patricio Ferrari y Cosme Iribarren desde las 9.30 de este martes, en la quinta audiencia del debate ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro.

¿Cuántos son los testigos citados este martes? Oficialmente, dos: el dueño de la casa donde murió Maradona el 25 de noviembre de 2020 y la mujer de la inmobiliaria que fue el nexo para cerrar el alquiler de esa propiedad.

Si hay más personas citadas sólo lo sabe la acusación, que alegó que le cuesta encontrar a la gente que declaró allá por 2020. Los fiscales se defienden con el aval de los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach, que se encargaron de remarcar que no es una obligación de las partes adelantar a qué testigos llamarán en cada audiencia.

Lo cierto es que este martes se escuchará el testimonio de Santiago Giorello, dueño de la residencia del barrio San Andrés de Tigre en la que murió Diego, y Andrea Flavia Jordán, la agente inmobiliaria.

Hay que recordar que en la testimonial que dio en 2021, Jordan sostuvo ante los fiscales que Diego y Gianinna eligieron la vivienda luego de que el ex técnico de la Selección argentina para que fuera externado de la clínica de Olivos, al tiempo que señaló que el contrato fue firmado por Jana.

La mujer relató que ellas les insistió con que abajo no había un baño completo y también aclaró que como parte del precio estaban pactados el pago de los servicios, menos la luz y el cable, porque Diego usaban muchos aires acondicionados y miraba mucho deporte. Ella ya lo había ayudado en otras ocasiones a conseguir renta.

Por su parte, Giorello manifestó en 2020 que faltaba una ducha en el baño de abajo porque era un toilette. Se preocupó porque no servía para que Maradona se higienice correctamente, ya sabiendo que iba a ocupar el playroom de la planta baja; y por eso le manifestó a la gente de la inmobiliaria sus dudas sobre si iba a servirles la propiedad.

También dijo que el contrato de alquiler lo firmó Jana y que era para uso de ella o de Diego. El precio que se pagó por la renta de noviembre, diciembre y enero fue de 16 mil dólares, USD 5.500 más caro por la urgencia que tenían para tomar posesión: la operación se cerró en menos de 48 horas.

Según pudo saber este medio, con estos dos testigos se cierra la etapa de la acusación vinculada a cómo estaba la propiedad donde falleció el astro del fútbol ese 25 de noviembre fatal, donde se buscó mostrar si había instrumental, medicamentos, y si estaba todo acorde, o no, a la internación domiciliaria.

La semana pasada declararon los médicos que vieron a Maradona el día de su muerte. Uno fue Colin Campbell Irigoyen, vecino del country San Andrés, fue el primer facultativo en arribar a la vivienda.

“Llegué, le estaban haciendo maniobras de reanimación y me sumé con un tensiómetro y un estetoscopio. Ya estaba muerto desde hacía un par de horas”, sostuvo Campbell, a la vez que afirmó: “Lo vi frío y no reaccionaba a nada”.

En tanto, Juan Carlos Pinto, médico de la empresa especializada en emergencias médicas +Vida, resaltó que en la casa “no había la aparatología suficiente para atender al paciente”.

Pinto firmó el certificado de defunción a las 13:15, al tiempo que le comunicó a la familia la triste noticia: “No querían aceptar que había muerto”. En este sentido, agregó que Maradona ya tenía signos de fallecimiento y que utilizó un desfibrilador para reanimarlo, pero no tuvo éxito.

“Hacía rato que estaba muerto. Más de dos horas aproximadamente. Lo digo por varias razones: por los signos de rigidez que tenía, su postura cadavérica, que se hace más manifiesta a partir de las dos horas, y porque tenía manchas cadavéricas en la espalda”, sentenció.

Por la muerte de Maradona están imputados por el delito de homicidio simple con dolo eventual en este primer debate, la psiquiatra Agustina Cosachov, el neurocirujano Leopoldo Luque, el psicólogo Carlos Díaz, el enfermero Ricardo Omar Almirón, su jefe Mariano Perroni, la médica coordinadora de Swiss Medical Nancy Forlini y el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna.

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