La muerte de Micaela Rascovsky: se conoció por qué absolvieron al novio de la víctima

El Tribunal Oral en lo Criminal N°10 de Capital Federal ha dado a conocer los fundamentos de la sentencia que absolvió a Guido Pascuccio, abogado y pareja de Micaela Raskovsky, en el caso de la muerte de la joven ocurrida el 13 de abril de 2021 en el barrio porteño de Villa Urquiza.

Según informó el tribunal, la decisión se basó en la falta de pruebas que acreditaran un delito de abandono de persona o violencia de género por parte del acusado, así como en los resultados de los peritajes técnicos y la reconstrucción de los hechos.

De acuerdo con los jueces Alejandro Noceti Achával, Jorge Romeo e Inés Cantisani, quienes integraron el tribunal, la resolución fue unánime y se fundamentó en la evidencia recopilada durante el proceso judicial.

Entre los elementos clave que llevaron a la absolución se encuentran los análisis técnicos y las comunicaciones extraídas del teléfono de Pascuccio, que permitieron reconstruir la secuencia de los hechos previos al fallecimiento de Raskovsky.

En los fundamentos de la sentencia, el tribunal cuestionó el accionar de la querella, que representaba a la familia de la víctima, y del Ministerio Público Fiscal. Según detalló el tribunal, ambas partes no lograron acreditar la hipótesis de un crimen y, además, utilizaron de manera parcial pruebas cuya credibilidad fue puesta en duda. Esta falta de sustento probatorio fue determinante para la decisión de absolver al acusado.

El tribunal también señaló inconsistencias en las declaraciones de un policía que fue el primero en ingresar al departamento donde ocurrió el hecho. Según los jueces, este agente modificó su testimonio, pero dicha alteración no quedó reflejada en el informe oficial, en el que se reportaba la asistencia a una persona con signos vitales débiles.

A lo largo del expediente judicial, se recopiló una gran cantidad de pruebas que apuntaron a un contexto de consumo problemático de drogas y alcohol por parte de Micaela Raskovsky.

Según los fundamentos del fallo, este comportamiento habría puesto en riesgo su vida y se remontaba, al menos, al año 2020.

El tribunal destacó que, desde los primeros meses de su relación con Pascuccio, Raskovsky ya consumía sustancias estupefacientes. Esta información fue corroborada por diálogos extraídos de su teléfono, en los que se comunicaba con un antiguo empleador, identificado como Diego.

Además, se detectaron múltiples interacciones con proveedores de drogas, lo que llevó al Fiscal General a solicitar una investigación adicional.

Otro de los puntos analizados por el tribunal fue el testimonio de tres personas a quienes Raskovsky habría relatado episodios de violencia por parte de Pascuccio. Sin embargo, los jueces concluyeron que estos relatos no podían ser considerados pruebas directas, ya que los testigos no presenciaron personalmente ningún episodio de violencia ni observaron lesiones en la joven.

En este sentido, el tribunal subrayó que su rol era dictar una sentencia basada en pruebas concretas y no en satisfacer las demandas de una de las partes. Según los jueces, condenar a un inocente sería contrario a los principios de justicia.

Además, en los días previos a su fallecimiento, Micaela Raskovsky habría manifestado a Pascuccio su intención de dejarlo o incluso de quitarse la vida, según las pruebas presentadas en el juicio.

Además, el sábado anterior a su muerte, la joven se ausentó de su trabajo y pidió a dos compañeros, identificados como Marco Argüello y Erika Quiroga, que la cubrieran en sus responsabilidades laborales.

El tribunal consideró que estos elementos, junto con el contexto de consumo de sustancias y la falta de pruebas directas de violencia, reforzaron la conclusión de que no existía evidencia suficiente para condenar a Pascuccio.

Para la Fiscalía N°8, encabezada por Guillermo Morosi, se trataba de un caso de “abandono de persona seguido de muerte y lesiones doblemente agravadas”. Pidió 11 años de prisión.

Por su parte, la querella insistió en el juicio que se trató de un femicidio y exigió que sea condenado a prisión perpetua por “homicidio doblemente agravado”: primero, por tratarse de un crimen cometido contra una persona con quien mantenía una relación de pareja; y segundo, por haberse dado en un contexto de violencia de género.

La defensa del imputado, a cargo de los letrados Fabián Lertora y Juan Pablo de Feo, solicitaron la absolución. “Hay googleos de ese día a la tarde donde ella busca cuánto duran los órganos después de la muerte y cuál es la dosis mortal de cocaína. Va a comprar la dosis de acuerdo a lo que dicen Google y los médicos”, explicó Lertora en relación a la versión de que Rascovsky habría intentado suicidarse.

Micaela fue hallada sin signos vitales en el departamento que compartía con su pareja, Guido Pascuccio (34), en el barrio porteño de Villa Ortúzar, la madrugada del 13 de abril de 2021, el hombre alertó a las autoridades diciendo que la novia estaba convulsionando y no reaccionaba.

Los oficiales llegaron al departamento cinco minutos después del llamado al 911 de Pascuccio, pero ya era tarde. Yacía “sentada” en el suelo, con la espalda apoyada contra el sillón y cubierta con una sábana.

Sobre la mesa del comedor había algunos envoltorios abiertos con restos de cocaína. De acuerdo con la autopsia, falleció por “congestión y edema pulmonar con cardiopatía dilatada”, consistentes con el consumo de esa sustancia. Pero también tenía lesiones, golpes y marcas recientes en el cuerpo: las pericias constataron que “sus muñecas y brazos evidenciaron que estuvo atada y en su cuerpo había por lo menos marcas de 13 golpes”.

/*Con información de la agencia Noticias Argentinas