Macabro hallazgo en Avellaneda: le ataron las manos con una corbata y lo mataron

Los vecinos de la avenida Centenario Uruguayo al 1300, en Villa Corina del partido de Avellaneda, llamaron al 911 porque un olor nauseabundo invadía la cuadra. A eso se sumaba que hacía días que no veían a uno de sus vecinos. Lo que encontró la Policía Bonaerense cuando ingresó a la propiedad fue macabro: el cuerpo de un hombre de 62 años atado de pies y manos yacía sobre el piso al lado de su cama.

Por las temperaturas extremas de la semana pasada, el cadáver estaba en un avanzado estado de descomposición.

Fuentes del caso dijeron a Infobae que la autopsia será clave en el caso por “homicidio” que lleva adelante la UFI N°4 del departamento judicial Avellaneda - Lanús, a cargo Mariano Francisco Zitto, y que no descartan nada, pero la línea de investigación vinculada a un ataque de viudas negras es una de las pistas a analizar.

Fuentes policiales informaron que la víctima fue identificada como Miguel Oscar Di Gioia y que todo sucedió el pasado sábado, cuando personal del Comando Patrulla recibió una denuncia de los vecinos de Centenario Uruguayo al 1300.

Los vecinos no sólo les contaron a los policías del feo olor que había en la zona, sino también les dijeron que venía desde una propiedad de la que hacía días que no veían al dueño de casa.

Ante esto, los policías que respondieron al llamado, junto a uno de los vecinos, treparon por los techos de la vivienda señalada y llegaron hasta el patio trasero de la propiedad. La puerta trasera de la casa no tenía llave, por lo que entraron.

Fue en una de las habitaciones que se encontraron con el horror: sobre el suelo, a un lado de la cama, estaba el cuerpo desnudo y se encontraba atado de piernas y manos. Las muñecas las tenía anudada con una corbata.

En el lugar, los policías notaron gran desorden, aunque del testimonio de empleada doméstica, quien iba una vez por semana a la propiedad de la víctima a limpiar, se estimó que era natural que estuviera todo así, por “la forma de vivir de la víctima”.

Además, se alcanzó a establecer que los accesos al domicilio no habían sido violentados y que, presuntamente, los agresores no habrían robado objetos de valor. Por lo que estimaron los investigadores que Di Giogia conocía a los victimarios.

Y, en ese punto, y por todas las características del hallazgo, es que la línea de una viuda negra no se descarta. Por lo pronto, esperan el resultado de la autopsia y de los rastros que levantaron los peritos de la Policía Científica de la Bonaerense en el lugar.

En paralelo, policías de la Comisaría 7ª de Avellaneda realizan diferentes procedimientos en el barrio y buscaban cámaras de seguridad municipales y privadas que pudieran haber detectado algo la semana pasada.

En la casa de la víctima, en la parte trasera de la vivienda, hay un quincho que fue revisado por los policías: “Lo utilizaba como invernadero de marihuana. Había gran cantidad de plantas”, agregaron las fuentes consultadas por este medio.