Denunció que su novio se había suicidado, pero terminó presa y acusada de haberlo asesinado

Una mujer de 44 años fue imputada por el crimen de su pareja, de 39, en un departamento ubicado en el macrocentro de Rosario. Las pistas que orientaron el caso a pensar que la víctima no se había matado

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Quedó en prisión preventiva por
Quedó en prisión preventiva por el plazo de 90 días por el delito de homicidio calificado por el vínculo y por alevosía

La investigación por la muerte de Tomás Saravalli, de 39 años, quien fue hallado con un disparo en la frente el martes de la semana pasada en su departamento de la ciudad de Rosario; dio un giro brusco este miércoles, cuando la pareja de la víctima fue acusada de haberlo matado.

La mujer, identificada como Melisa Piano, de 44 años, fue llevada este miércoles a audiencia imputativa, donde le atribuyeron la presunta autoría material del crimen.

Según la acusación, llevada a cabo por el fiscal Alejandro Ferlazzo, Piano le disparó en la frente a Tomás y una hora después llamó para denunciar que su novio se había suicidado.

De acuerdo a lo expuesto por el fiscal ante la jueza Lorena Aronne en el Centro de Justicia Penal, en horas de la madrugada, luego de una discusión, Saravalli se fue a dormir al sillón del living.

Allí fue que Piano, aprovechando que su pareja descansaba con un antifaz negro –para evitar que la luz natural dé en su rostro– le dio un tiro en la frente con una pistola Bersa Thunder Ultra-Compact calibre .40 con numeración visible.

El cuerpo de la víctima fue hallado, además, con un almohadón blanco que había sido colocado encima de la cara, que también tenía un orificio de arma de fuego.

Lo curioso fue que una hora después del disparo, la mujer llamó a un familiar para indicarle que su novio se había suicidado. Sin embargo, cuando llegó el gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones bajo las directivas del fiscal Matías Edery –de Homicidios Culposos– al edificio de Alvear al 1500, llamó la atención de que la escena no encuadraba con la de un suicidio.

En primer término, por el lugar de la herida: en la frente. En segundo lugar, porque Melisa aseguró que él se había baleado con su mano izquierda, cuando no es su mano hábil. Tercero: la única vaina servida la arrojó al cesto de la basura.

Por ese motivo, Edery giró la causa a Homicidios Dolosos para que termine de realizar pericias para determinar si era un asesinato.

Melisa Piano, en tanto, este miércoles, en la audiencia imputativa, volvió a insistir en que se trató de un suicidio.

Otra situación que fue mencionada por el fiscal Ferlazzo, que interviene en el caso, ponderó las “inconsistencias” en el relato de la sospechosa. Por caso, haber alegado que había tirado la vaina porque no había considerado que su novio estaba muerto, siendo que dicho casquillo estaba al lado del cadáver, que tenía un orificio de arma de fuego en la frente y en el almohadón que tapaba su cara, manchado con sangre. Además, enfatizó que recién una hora después del tiro llamó para pedir auxilio por el supuesto suicidio.

La jueza Aronne resolvió que Piano quede en prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días por el delito de homicidio calificado por el vínculo y por alevosía, agravado por el uso de arma de fuego, y tenencia ilegal de arma de fuego de guerra, en concurso real entre sí.