Un hombre golpeó brutalmente a una mujer para robarle el celular en Berisso y fue detenido

La Policía de la Provincia de Buenos Aires detuvo a un hombre que golpeó brutalmente a una mujer para robarle el celular y otras pertenencias. El delincuente cayó en La Plata, pero el robo sucedió en Berisso.

Según pudo saber Infobae, se trata de un hombre de 32 años que estaba prófugo desde el 28 de febrero, cuando V.F., de 40 años y de profesión docente, radicó una denuncia por haber sido asaltada.

La víctima relató que Rivero la siguió y luego la golpeó en la cara para sustraerle el celular. Además, tomó sus tarjetas de crédito y débito. Todo sucedió en horas de la medianoche en la intersección de las calles 169 y 22.

De acuerdo con la información del medio local La Buena Info, Rivero abandonó el bolso de la mujer luego de haber sustraído los elementos de valor.

Días después, el personal de Comando de Patrullas de La Plata fue alertado por la presencia de un hombre con actitud sospechosa en la Terminal de Ómnibus, plataforma 7. Llevaba una musculosa gris y un pantalón negro.

Así, un móvil se hizo presente en el lugar y, al momento de su identificación, confirmaron que se trataba de Rivero. En consecuencia, los oficiales procedieron con su detención ante el riesgo de fuga. La Policía confirmó luego que el hombre se encuentra desocupado y vive en situación de calle.

En los últimos días, el crimen de Kim Gómez, la nena de 7 años que murió tras ser arrastrada durante 15 cuadras por dos delincuentes, ambos menores de edad, generó el hartazgo en La Plata. Los ladrones le habían robado el vehículo a su madre, pero la niña se encontraba dentro con el cinturón de seguridad. Huyeron a rápida velocidad y algunos testigos contaron haber visto cómo intentaban arrojarla por la ventanilla del auto.

Los detenidos tienen 17 y 14 años. El mayor había sido liberado a principios de febrero por haber estado involucrado en un robo automotor y tratarse de un menor de edad. El caso generó conmoción en la comunidad y los vecinos marcharon en reiteradas oportunidades para exigir seguridad.

El crimen de Kim es el peor capítulo de la ola de delitos que se registran diariamente en la zona. De hecho, a finales de febrero, cayó una banda dedicada a las entraderas. Sus integrantes fueron detenidos luego de cometer una violenta serie de hechos delictivos.

La alerta comenzó con un llamado al 911 por un robo cometido en la calle 409. El denunciante, un hombre de 62 años, aseguró que los hampones entraron a la casa para amenazar a su hija, que se encontraba allí. Tras romper una ventana, ingresaron al domicilio y escaparon con dinero en efectivo. En simultáneo, otro llamado entró al 911 que informaba sobre un robo en la calle 404. Otra vez, tres hombres irrumpían en la casa de un jubilado para robarle dinero.

Un testigo dio un dato clave: los delincuentes se movían en una camioneta Chevrolet Tracker. Así, comenzó la búsqueda del vehículo, con un operativo cerrojo.

La Tracker fue cruzada por patrulleros en la esquina de 409 y 29. Entonces, comenzó una persecución que duró seis cuadras, hasta la calle 23. Los sospechosos abandonaron el vehículo. Uno de ellos, de 15 años, fue detenido. Pero restaban los otros dos, que fueron arrestados tiempo después. Todos tenían naiconalidad chilena.

Al mismo tiempo, ocurrió una coincidencia. Un hombre de 26 años, oriundo de San Martín, Conurbano bonaerense, se acercó a la Policía en un puesto vial en la zona de Alpargatas: aseguró trabajar para una aplicación de autos y contó que subió a dos pasajeros en la calle 413, con claro acento chileno, que pidieron ser llevados a CABA.

Por temor a ser asaltado él mismo, el chofer alertó a la Bonaerense, con ambos sospechosos en el auto, uno de 19 años y el otro, de 15. Personal del GTO llegó al lugar: las descripciones de los pasajeros se ajustaban a las de los ladrones de ambos robos. Los arrestaron en el acto. Tenían una mochila que le habían robado a una de las víctimas, así como barretas y dos celulares.