A una semana de la desaparición de Lian: los detalles de la búsqueda del nene de 3 años en Córdoba

Hace siete que días que nada se sabe del paradero de Lian Gael Flores Soraide, el nene de 3 años que desapareció en Córdoba el sábado 22 de febrero en los alrededores de su casa ubicada en Ballesteros Sud. A lo largo de la semana se realizaron múltiples rastrillajes y allanamientos, pero aun la Justicia no habría llegado a una pista concreta sobre qué pasó y dónde podría encontrarse el menor. Cuáles son las hipótesis que barajarían los investigadores en las últimas horas.

En un principio, el caso había sido tratado como una simple búsqueda, luego de que la familia denunciara ese mismo día que el niño había desaparecido a la hora de la siesta. Según declararon, la familia se acostó a dormir cerca de las 15 horas y, para cuando se despertaron, el pequeño no se encontraba en ningún sitio. No obstante, con el paso de los días el espectro de posibilidades se amplió.

Después de que el menor de edad no fuera visto por los alrededores del cortadero de ladrillos, en donde vivía junto a sus padres y hermanos, las autoridades se enfocaron en buscar testigos del hecho. Entre ellos, Marcelino, un vecino de la comunidad, relató haber visto circular por la zona a una camioneta color blanco antes de que el nene se esfumara del lugar.

“Cuando estábamos descansando, pasó una chata blanca, pero no puedo decir qué modelo era ni su patente“, contó el hombre ante los medios de comunicación, al indicar que tampoco podía precisar el horario, pero que estipulaba que habría sido entre las 13:50 y las 14:10 horas.

Desde ese momento, los fiscales provinciales, Isabel Reyna y Nicolás Gambini, plantearon la posibilidad de que Lian hubiera sido trasladado en un vehículo. No obstante, la idea de que pudiera tratarse de un caso de trata de personas había sido descartado hasta el viernes, cuando se solicitó la intervención de los fiscales federales.

La decisión fue adoptada por el Procurador General de la Nación, Eduardo Casal, luego de que lo solicitara la fiscal federal de Bell Ville, María Virginia Miguel Carmona. Por este motivo, se definió que los investigadores provinciales comenzarán a trabajar en con junto con Miguel Carmona y los representantes de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX), Alejandra Mángano y Marcelo Colombo.

Pese a que los fiscales provinciales habían descartado la posibilidad por la falta de pruebas que apuntarán en esa dirección, el Ministerio Público Fiscal (MPF) explicó que la conformación del Equipo Conjunto de Investigación (ECI) tendrá como misión “fortalecer las investigaciones sobre los hechos de relevancia” y permitirá “optimizar recursos, unificar criterios de actuación y garantizar un proceso más eficiente y riguroso en la obtención de pruebas”.

Si bien la Justicia confirmó que se considerará la idea de que el menor hubiera sido captado por una red de trata de personas, no informaron los motivos detrás de la decisión. Al igual que tampoco comunicaron que el resto de las líneas investigativas hubieran sido descartadas.

Anteriormente, los investigadores pusieron sobre la mesa la hipótesis de que el niño hubiera sido llevado con fines de ser abusado sexualmente. Sobre todo, desde que se conociera que una persona del entorno del menor contaba con antecedentes relacionados con delitos contra la integridad sexual.

Frente a esto, la abogada de la familia, Florencia Guizo, comentó en una entrevista con El Doce que la persona acusada no se encontraría en la zona, debido a que continuaría detenida por la misma causa. Sin embargo, afirmó que los familiares del mismo sí residirían en la misma comunidad.

Al mismo tiempo, la investigación siguió los pasos de una supuesta familiar del nene, que había viajado de Córdoba a Jujuy el mismo día de la desaparición. La mujer había sido captada sola en la terminal de micros por la tarde y se constató que había comprado el pasaje poco antes de viajar. A pesar de esto, no hubo indicios de que el menor se encontrara con ella.

No obstante, los fiscales insistieron en identificarla bajo la pista de que se había dirigido hacia la localidad jujeña de Perico. Fue así como determinaron que se trataría de una mujer de 74 años, de nacionalidad boliviana, y que viajaría seguido hacia Ballesteros Sud para brindar sus presuntos servicios como curandera a la comunidad que trabaja en el cortadero de ladrillos.

Luego de que fuera identificada, se ordenó un allanamiento en su vivienda, en donde también se le tomó declaración a otras cuatro personas. Los interrogados no fueron detenidos, aunque se secuestraron varios teléfonos celulares, una agenda, el pasaje del micro que tomó y un bolso con ropa.

En paralelo, el viernes se amplió el radar de búsqueda, por lo que los efectivos comenzarán a buscar rastros del niño a más de 4.000 metros del punto cero, es decir, de la vivienda de la que desapareció hace una semana. Asimismo, confirmaron que el operativo seguirá compuesto por los 189 agentes de las diferentes fuerzas que fueron convocadas.

Otra de las medidas adoptadas por parte de las autoridades nacionales y provinciales fue anunciar una recompensa de 20 millones de pesos para quienes aporten datos sobre el paradero de Lian. Por lo general, los montos suelen ser menores pero, en esta ocasión, se llegó a un acuerdo de 10 millones de pesos repartido entre Nación y el Gobierno de Córdoba.

Por el momento, el caso continuará bajo secreto de sumario, luego de que la fiscal general adjunta de Córdoba, Bettina Croppi, explicara en una conferencia de prensa que era necesario “ser cautos”. “No podemos perjudicar las líneas investigativas”, sostuvo al confirmar que, hasta el miércoles, se habían allanado 15 domicilios, se incautaron 6 vehículos, 25 teléfonos y 31 participaron en calidad de testigos.