Un sospechoso de 23 años fue detenido en las últimas horas acusado de golpear a otro con un vaso de vidrio en un boliche de Villa Gesell. De esta manera, le provocó a la víctima un corte en la cara, indicaron fuentes del caso a Infobae.
El hecho ocurrió el 18 de enero pasado, cerca de las 5.30, en el interior de la disco “Origen”, en esa ciudad balnearia del partido de La Costa bonaerense.
Rico Seyler, la víctima, de 21 años, dijo que, en ese momento, vio a dos desconocidos que se confrontaban a golpes con un tercero. Relató que, además, los jóvenes estaban molestando a una amiga suya.
En ese contexto, intervino para defenderla. Esquivó un primer golpe de puño, pero un segundo agresor le provocó una herida cortante en el lateral derecho del rostro, cerca del párpado inferior, al golpearlo con un vaso de vidrio.
Herido, se dirigió al hospital local, donde le realizaron curaciones. Fuera de peligro y con el alta prescripta, radicó la denuncia en la comisaría de Villa Gesell.
Tras la presentación, las fuentes indicaron que personal de la DDI de Villa Gesell, que interviene en el caso, recolectó testimonios y obtuvo videos de la secuencia.
En las imágenes, se puede ver bailar al sospechoso y luego salir del local nocturno acompañado por la seguridad del lugar. Detrás, sale el herido.
Con las cámaras, los investigadores pudieron establecer que los agresores se retiraron en un vehículo Audi Q5. Al mismo tiempo, identificaron la patente y a sus ocupantes. El fiscal del caso dispuso el reconocimiento fotográfico.
El 23 de enero pasado, los investigadores recibieron una declaración que resultó clave: el testigo respaldó lo que podía verse en las cámaras de seguridad. En ese momento, pudieron establecer la identidad del agresor que utilizó el vaso para lastimar la víctima. Se trataba de Grasso A..
El presunto atacante fue detenido tras un allanamiento en su casa de la Ciudad de Buenos Aires.
El caso sucedió el mismo día en el que se cumplieron cinco años del homicidio de Fernando Báez Sosa, el joven estudiante de Abogacía que fue asesinado a golpes por un grupo de ocho rugbiers en la puerta de un boliche de Villa Gesell, en el verano de 2020.
Cinco de los acusados del crimen de Báez Sosa recibieron prisión perpetua y los restantes, una condena de 15 años.
Antecedente
Un hecho de violencia se vivió una madrugada del pasado diciembre en un boliche de Mar del Plata, cuando una joven de 20 años golpeó a otra con una copa de vidrio rota en la cara. Tras la agresión, la víctima resultó herida en la mejilla y fue asistida por el personal médico en el lugar. En tanto, la agresora quedó imputada por lesiones leves.
La secuencia tuvo lugar en el conocido local bailable Bruto, que está situado sobre Paseo Victoria Ocampo, precisamente, en la concurrida zona de Playa Grande. Allí, se encontraron dos mujeres de 20 y 24 años que, según indicaron las fuentes policiales, mantienen problemas desde hace tiempo.
Tras una discusión, la menor de las jóvenes reaccionó de forma violenta e hirió a la otra. Precisamente, la golpeó en la cara con una copa de vidrio que estaba rota y le produjo un corte sobre la mejilla derecha.
A raíz del hecho, la Policía Bonaerense fue alertada y, de inmediato, se trasladó hasta el lugar para intervenir. Los agentes detuvieron a la agresora y la trasladaron hasta la Comisaría 9ª. Quedó imputada por lesiones leves en el marco de la causa que investiga el fiscal Facundo De la Canale, de la UFI Flagrancia.