El pasado viernes, el pequeño Felipe Rafael Almada viajaba junto a su familia en un auto, cuando impactó de frente con un camión. El accidente ocurrió cerca de la localidad São Sepé, al sur de Brasil, y como consecuencia del choque, el menor falleció en el lugar. El resto de los ocupantes fue derivado a un centro hospitalario donde permanecen internados.
El choque dejó a los otros tres ocupantes del automóvil con heridas graves. Se trata de María Antonella Bona, de 31 años; María Nelly Nazareth Martinoli, también de 31 años; y Giuliano Di Camillo, de 28 años. Tras el accidente, los tres fueron trasladados de urgencia al Hospital Santo Antônio, ubicado en São Sepé. Sin embargo, debido a la gravedad de sus lesiones, posteriormente fueron derivados al Hospital Universitario de la ciudad de Santa María, donde continúan recibiendo atención médica especializada.
De acuerdo a lo informado por el medio El Once, el siniestro tuvo lugar el pasado viernes alrededor de las 19:00 horas en la carretera BR-290, en las cercanías del puente Bossoroca, entre las localidades de São Sepé y Vila Nova do Sul, en el estado de Río Grande del Sur. Según los reportes, el vehículo en el que viajaban las víctimas, un Chevrolet Corsa Classic con matrícula argentina, colisionó de manera frontal contra un camión. El impacto resultó fatal para el pequeño Felipe, quien perdió la vida en el lugar del accidente.
Testigos el hecho indicaron que el camión fue el que realizó una maniobra para evitar un choque con los autos que estaban frenados sobre la calzada. Y fue en ese momento cuando se produjo el impacto con el auto donde viajaba la familia oriunda de Entre Ríos.
Si bien el menor de edad murió en el lugar, los tres integrantes del Chevrolet Corsa Classic, sufrieron distintas heridas y debieron ser hospitalizados. De acuerdo con la información proporcionada por El Once, el padre de María Nelly Nazareth Martinoli aseguró que, aunque los tres jóvenes que sobrevivieron al accidente presentan lesiones, su estado de salud es estable. “Están todos fuera de peligro. Con lesiones, pero bien. Deben quedar en observación un par de días más”.
El pequeño Felipe, quien falleció en el accidente, era el único hijo de María Nelly Nazareth Martinoli, una docente de nivel primario. Por su parte, Giuliano Di Camillo, pareja de María Nelly, se dedica al diseño y construcción de piletas, además de trabajar en la venta de maquinaria agrícola. La tragedia ha dejado una profunda conmoción entre los allegados de las víctimas, quienes ahora enfrentan el difícil proceso de recuperación física y emocional tras el accidente.
Respecto al conductor del camión, medios locales informaron que se trata de un hombre de 70 años que se dirigía hacia Porto Alegre-São. Mientras conducía, un auto se habría intentado adelantar por el carril contrario y eso provocó que el camionero decidiera frenar de manera rápida, por lo que perdió el control y terminó formando una L en medio de la ruta. Al producirse ese inesperado movimiento, se produjo el choque con el auto Corsa Classic.
Como parte de los controles, se efectuó la prueba de alcoholemia al conductor pero dieron negativo. De manera que el caso se encuentra en plena investigación para comprobar cómo se produjeron los hechos y definir las causas del accidente.
En medio del dramático momento, Ezequiel Martinoli tío del bebé fallecido, expresó su agradecimiento con la comunidad al remarcar: “Queremos agradecer el apoyo espiritual y material de los miles de personas que se han hecho presente en estos momentos difíciles”.
Y remarcó: “En cuanto al apoyo espiritual, pedimos seguir pidiendo a Dios la fortaleza para luchar y superar tan grande pérdida”. De hecho, en medio de su dolor sostuvo que ahora “tenemos un angelito en el Cielo que nos abraza y está con cada uno de nosotros.