Una joven fue estrangulada con una bufanda en Monte Grande y detuvieron a su novio

Una joven de 18 años fue encontrada el pasado sábado sin vida con signos de estrangulamiento en su casa de la localidad bonaerense de Monte Grande. Los investigadores detuvieron al novio de la mujer luego de encontrar contradicciones en el relato. Además, los vecinos denunciaron que escucharon gritos antes de llamar a la Policía.

La víctima, identificada como Vanesa Estefanía Ledesma, fue encontrada sobre una cama, con una bufanda amarrada al cuello, en lo que fue catalogado preliminarmente como un femicidio. La escena del crimen se ubicó en una vivienda cercana a la intersección de la calle Alfonso Amat y la ruta provincial 16, tras una llamada de alerta al número de emergencias 911.

El principal sospechoso del crimen es el novio de la víctima, un hombre de 28 años, quien fue detenido poco después. De acuerdo con la versión inicial del detenido, la pareja había tenido una discusión en un bar durante la madrugada del sábado. Según su relato, tras el altercado, Vanesa habría abandonado el lugar para dirigirse a su casa. Sin embargo, los vecinos encontraron contradicciones, ya que testigos del barrio afirmaron haber escuchado gritos y ruidos de pelea provenientes del domicilio momentos antes de que se encontrara el cuerpo.

Los peritos de la Policía Científica determinaron que la joven murió por estrangulamiento. La bufanda hallada en su cuello presentaba varios nudos, indicando que fue utilizada como arma para cometer el crimen, según informó Diario Conurbano.

Los agentes de la Comisaría de Monte Grande avanzaron con entrevistas a los vecinos y realizaron una inspección exhaustiva en el lugar, en busca de evidencias que puedan esclarecer los hechos. Mientras tanto, el caso quedó en manos de la Unidad Funcional Descentralizada N° 1 de Esteban Echeverría, que lo caratuló como “Femicidio”.

En principio, todos los indicios que reunieron los investigadores hasta el momento indican que el móvil del crimen habría sido una pelea doméstica, aunque no descartan otras hipótesis.

En la zona sur del Conurbano, un hecho estremeció a los vecinos de la zona en una mañana tranquila del domingo 13 de octubre. El pastor evangélico Roberto Arakelien, de 73 años, regresó a su hogar y encontró el cuerpo sin vida de su pareja, Isabel Salazar, de 52 años. El hombre había salido temprano hacia su iglesia, ubicada a pocas cuadras de su vivienda, mientras Salazar decidió quedarse en casa. Al volver, descubrió la puerta abierta y el suministro eléctrico cortado, con 50 mil pesos faltantes en el hogar.

La investigación, a cargo de efectivos de la DDI de Lomas de Zamora, se centró en el análisis de cámaras de seguridad y otros indicios que señalaron como principal sospechoso a A.M., de 60 años, yerno de la víctima. En los registros, una Renault Kangoo blanca vinculada al sospechoso fue vista cerca de la iglesia, aparentemente para verificar que Arakelien estuviera fuera de su casa. Minutos después, el vehículo fue captado en las inmediaciones de la vivienda, donde se observó a un hombre cortando la electricidad antes de retirarse rápidamente.

La investigación llevó a los oficiales hasta la residencia de una de las hijas de Arakelien, quien está casada con el ahora detenido. En el lugar, los investigadores encontraron la camioneta utilizada en el crimen, ropa recién lavada que coincidía con la del sospechoso, 50 mil pesos en efectivo y dos armas de fuego: una pistola Bersa calibre .380 y un revólver Smith & Wesson .38, ambos acompañados de cajas de municiones. El celular del acusado también presentaba manchas de sangre.

Con estas pruebas, el fiscal Martín Devoto, de la UFI N°1 de Esteban Echeverría, dispuso la detención de A.M. bajo la imputación de “homicidio en ocasión de robo”. Además, ordenó realizar una autopsia al cuerpo de Salazar y avanzar en la investigación para determinar el móvil del crimen.