
La puerta de la oficia de Asuntos Penitenciarios de Santa Fe fue baleada esta tarde en Rosario, a una hora y en una zona de muchísimo movimiento. Tras el ataque, los agresores dejaron un mensaje en un papel dirigido al Servicio Penitenciario provincial. “Deja de verdugiar a los alto perfil” (sic), decía la nota escrita con letra con birome azul en imprenta mayúscula y sobre un papel blanco a la que accedió Infobae y que hacía referencia a los presos. La firmaba “La Mafia”.
Todo sucedió este martes, alrededor de las 15, en el cruce de Alsina y Pellegrini, en el barrio Echesortu, es el macrocentro de Rosario, donde abundan vecinos de clase media. Según pudo constatar este medio, la puerta de vidrio y rejas de Asuntos Penitenciarios había recibido al menos cinco impactos de bala.
En la calle, frente a la puerta baleada, había cinco vainas servidas, además del cartel con el mensaje dirigido al Servicio Penitenciario, según fuentes oficiales. Todo sucedió en Alsina 1698, sede de la Delegación Sur Unidad N° 8 de Asuntos Internos del Servicio Penitenciario.
Un empleado de guardia de la oficina provincial de 39 años fue quien recibió a los policías tras el alerta al 911, les contó lo sucedido y les entregó el cartel que habían dejado en el lugar los agresores tras efectuar las detonaciones.

Interviene la fiscalía de Flagrancia mientras en el lugar del ataque trabajaron agentes de la Unidad Regional II de la policía provincial.
Lo cierto es que no es la primera vez que ataquen esa dependencia del Servicio Penitenciario de Santa Fe, sino la quinta. El primero fue el 10 de enero de 2020. El segundo, el 12 de octubre de ese mismo año, luego de que se pidieron 24 años de cárcel para Guille Cantero por las balaceras a edificios del Poder Judicial.
El tercero fue en septiembre de 2021. En esa ocasión dejaron un cartel que decía: “Dejen tranquilos a los pibes de alto perfil o plomo”. Y la anterior a la de esta martes había sido el enero de este año, cuando dejaron un cartón con una amenaza: “Si siguen verdugueando a la familia de los altos perfiles la próxima vamos contra la familia de los empleados de servicios. El que avisa no traiciona”.

Esa amenaza tiene un tono muy similar a la de la nota que se recibió este martes tras el ataque a tiros.
Lo cierto es que la balacera y el texto que dejaron los agresores en la oficina de Asuntos Penitenciarios recuerda lo que sucedió la semana pasada en la audiencia imputativa contra Ariel Máximo “El Viejo” Cantero y otros 21 acusados más por delitos van desde “cobrar permisos” para la venta de droga en la zona Oeste y Sudoeste, balaceras a dos estaciones de servicio y dos escuelas, reventa de entradas para partidos de Rosario Central, hasta peleas de gallos y cinchadas.
Ese día, uno de los detenidos se quejó de las condiciones de detención. El imputado, entonces, pidió la palabra para quejarse de que el Servicio Penitenciario que a los presos de alto perfil, como ellos, no les daban ni tiempo para bañarse, que todo el tiempo lo hacían con un arma que les apuntaba y no los dejaban prácticamente respirar.
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