Una denuncia por abuso sexual de menores se conoció el pasado fin de semana cuando una adolescente de 13 años ingresó a un hospital en Santiago del Estero embarazada y a punto de parir. Tras dar a luz, la propia menor denunció que la pareja de su tía abusaba de ella y que su familia era cómplice de lo que ocurría.

El caso se conoció el pasado sábado. Según fuentes policiales, ese día una menor de edad ingresó al Hospital de Colonia Dora y, tras ser examinada por un médico, fue derivada al Hospital Zonal de Añatuya, en donde se descubrió que estaba en trabajo de parto. Dio a luz momentos después: el bebé, de 2,900 kilos, nació a término y en buen estado de salud.

Fuentes policiales indicaron a Infobae que, luego del parto, las autoridades entrevistaron a la tía de la menor, quien vive con ella desde que tiene 2 años. Según su relato, desconocía que su sobrina estuviera embarazada.

En tanto, la niña dio mayores detalles: su tía la obligaba a encerrarse con su pareja -un hombre identificado como R.C.-, quien la abusaba. Dijo que todo se repetía tres veces por semana.

La fiscal a cargo del caso, Alejandra Sobreso, ordenó investigar el caso como “abuso sexual con acceso carnal reiterados”. También dispuso un informe policial, entrevistas a la obstetra y a la tía de la niña, un informe médico y una pre-entrevista psicológica.

Según informó El Liberal, los acusados son un empleado municipal de 62 años y su pareja de 26, quienes -al enterarse de las imputaciones- enviaron un mensaje a un familiar y negaron los hechos. La Policía acudió a su domicilio, en el barrio Las Trincheras, y ambos fueron trasladados a la comisaría de la localidad de Icaño.

Un episodio similar ocurrió en enero pasado en la ciudad de Saladillo, cuando trascendió que una nena de 13 años dio a luz a un bebé en el hospital zonal Alejandro Posadas. Por el episodio, la fiscalía investigaba a la madre y a su pareja.

Los médicos que atendieron a la menor confirmaron que ingresó al nosocomio con un fuerte dolor abdominal. En principio creyeron que se trataba de un malestar estomacal, pero al realizarle los estudios correspondientes descubrieron que estaba cursando la semana 35 de un embarazo. Inmediatamente, los profesionales dieron aviso al organismo de la Niñez y Adolescencia de Saladillo para que intervinieran.

Varios medios locales señalaron que, tras conocerse la noticia, los vecinos se movilizaron hasta la vivienda familiar, ubicada en la calle Pereyra entre Almafuerte y Sarmiento, para pedir justicia, pero todo terminó en un violento enfrentamiento con la Policía.

Aunque sostienen que se habían realizado varias denuncias por abuso que incriminaban a la madre y su pareja, las autoridades desmintieron esta versión. “Es importante destacar que previo a este hecho no se habían registrado denuncias formales de vecinos ni del sistema educativo, ni del sistema de salud que hubieran alertado sobre esta situación, lo cual impidió la intervención previa de los organismos correspondientes”, describió el Municipio a través de un comunicado.

En diálogo con TN, Alejandro Armendáriz, intendente interino de la ciudad bonaerense, calificó la situación familiar como “muy delicada”. “La mamá de F. (la niña que tuvo al bebé, cuya identidad es resguardada) está conviviendo con un muchacho que sería el padrastro, en ese ámbito ha sucedido lo que se sospecha”, reveló.

La causa está a cargo del fiscal Roberto Javier Berlingeri, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de Saladillo, que tiene como principales investigados por presunto abuso sexual, a la madre de la menor y el padrastro.