El curioso crecimiento de la marea que desde el jueves da que hablar en Mar del Plata, se terminó convirtiendo en la diversión menos pensada del viernes. Familias, amigos, parejas, se dedicaron a posar de espaldas a las rocas, para captar fotos en el momento exacto en que las olas rompían a sus espaldas. Un juego espontáneo que revolucionó el día de playa.
Mientras una familia espera en pose a que llegue una nueva ola a romperle cerca, una pareja se debate entre si es mejor subir a Instagram una sola de las imágenes que acaban de sacarse o toda la secuencia: la espera, el rompimiento y el inevitable final en medio de risas. Se deciden por compartir la foto y dejar el paso a paso para las historias de la red social.
A lo largo de los 100 metros donde las olas están ganando el Boulevard Peralta Ramos por la crecida en La Perla, grupitos se van amontonando para hacerse fotos. Algunos ya mojados siguen insistiendo, pero todos saben que la gracia, el desafío, es lograr que en la primera toma, todavía secos, los puedan captar con ola sobre sus cabezas justo antes de empaparlos.
La dificultad de la foto se termina convirtiendo en un juego. Algunos intentan correr apenas ven que la persona que tiene la cámara gatilla y no mojarse. Pocos lo logran. Los que más conocen las opciones de sus teléfonos usan la “ráfaga”, que saca automáticamente una secuencia de imágenes, o graban un video para luego seleccionar los mejores cuadros.
La Capital de Mar del Plata daba cuenta del fenómeno desde temprano en su edición papel y en las radios locales los locutores lo comentaban con incredulidad. La mayoría hablaban preocupados de la situación de los balnearios del sur, ya que el mar había avanzado mucho sobre la costa, hasta la línea de carpas y sombrillas.
En Playa Grande y Punta Mogotes, también se pudo apreciar el fenómeno. La crecida en el nivel del mar se registra desde el jueves en el litoral marítimo, luego que el Servicio de Hidrografía Naval (SHN) emitiera una alerta y pusiera sobre aviso de la situación, que no dejó de sorprender a muchos en La Feliz.
El Centro de Prevención de Crecidas del SHN, dependiente del Ministerio de Defensa de la Nación, se había referido en su informe a “una tendencia ascendente” en la marea durante la mañana y la tarde, “entre Mar del Plata y San Clemente del Tuyú”. Afortunadamente, más allá del avance sobre la playa, en un día soleado el fenómeno divirtió a muchos.
Las reacciones, que fueron mayormente de risas y curiosidad, no distinguió de edades. Chicos, adolescentes, personas mayores, quisieron estar cerca de la escena. Y es que era igual de divertido que de impactante ver la furia con la que rompían las olas por ejemplo contra el cordón de rocas en la zona de playa Alfonsina, en La Perla.
En algún momento la marea sí preocupó a los encargados de algunos de los balnearios del sur, como Mute. Y es que la crecida llegó hasta los escenarios del complejo, que tiene shows programados para este fin de semana, y se temió que la crecida pudiera traer algún problema a las estructuras.
En Mar del Plata la creatividad para pasar un buen rato y en tiempos de redes sociales obtener una buena foto para subir, no conoce de límites. Con marea alta o baja, más o menos playa, no se divierte el que no quiere.
Fotos y drone: Christian Heit
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