Cuál es la relación entre el sol y los terremotos: de qué manera podría mejorar la predicción sísmica

Científicos de la Universidad de Tsukuba, en Japón, encontraron una conexión entre la actividad solar y los movimientos sísmicos en la Tierra. Los detalles

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Las manchas solares y la
Las manchas solares y la irradiación solar pueden provocar un aumento de hasta 0,2°C en la temperatura terrestre (Imagen Ilustrativa Infobae)

En el incesante dinamismo de la Tierra, donde las placas tectónicas se desplazan y la energía se acumula en el subsuelo hasta liberarse en devastadores terremotos, la búsqueda de señales que permitan anticipar estos eventos fue un desafío para la ciencia.

Ahora, una nueva investigación liderada por el científico informático Matheus Henrique Junqueira Saldanha y el matemático Yoshito Hirata, de la Universidad de Tsukuba, en Japón, descubrió una conexión sorprendente: la actividad solar podría influir en los movimientos sísmicos de nuestro planeta.

El impacto del Sol en la actividad sísmica

Los científicos descubrieron que la
Los científicos descubrieron que la actividad solar podría influir en la actividad sísmica de la Tierra (Imagen Ilustrativa Infobae)

El estudio, publicado recientemente, señala que los cambios en la actividad de las manchas solares tienen efectos en la temperatura terrestre, lo que a su vez puede incidir en la actividad sísmica. Cuando el Sol atraviesa un período de máximo solar, su irradiación aumenta y provoca una ligera elevación en la temperatura de la Tierra, de entre 0,1 y 0,2 grados Celsius.

Aunque esta variación térmica es mínima, su impacto en la corteza terrestre es significativo. El calor afecta la composición y resistencia de las rocas, haciéndolas más frágiles y propensas a fracturarse. Además, influye en el movimiento del agua subterránea, modificando la presión en las fallas tectónicas y, potencialmente, favoreciendo la ocurrencia de sismos.

“El calor solar impulsa cambios de temperatura atmosférica, que a su vez pueden afectar aspectos como las propiedades de las rocas y el movimiento del agua subterránea”, explicó Junqueira Saldanha, y amplió: “Estas fluctuaciones pueden hacer que las rocas sean más frágiles y propensas a fracturarse, por ejemplo, y los cambios en las precipitaciones y el deshielo pueden alterar la presión sobre los límites de las placas tectónicas”.

Un modelo matemático para comprender la relación

El aumento de temperatura debido
El aumento de temperatura debido al Sol afecta la fragilidad de las rocas y la presión en las fallas tectónicas (foto: Muy Interesante)

Este hallazgo no fue producto del azar. En 2022, Junqueira Saldanha y Hirata identificaron una correlación entre la actividad de las manchas solares y la actividad sísmica. Sin embargo, aún quedaba la incógnita de cómo se producía esta relación.

Para abordar la pregunta, los científicos diseñaron un modelo matemático que incluyó datos de actividad solar, temperatura superficial terrestre y registros sísmicos. Al integrar la variable de temperatura, notaron que la precisión en la predicción de terremotos mejoró notablemente, especialmente en aquellos terremotos superficiales originados en la corteza superior del planeta. “Eso tiene sentido, ya que el calor y el agua afectan principalmente a las capas superiores de la corteza terrestre”, señaló Junqueira Saldanha.

Los terremotos que se originan en el manto terrestre, en cambio, no mostraron una relación tan clara con la temperatura, lo que sugiere que la influencia solar es más determinante en eventos sísmicos poco profundos.

Factores que influyen en la actividad sísmica

Otras investigaciones han explorado la
Otras investigaciones han explorado la relación entre la Luna y la actividad sísmica a través de las fuerzas de marea (Imagen Ilustrativa Infobae)

La sismología identificó múltiples factores que intervienen en la generación de terremotos. El principal de ellos es el movimiento de las placas tectónicas, que acumulan tensión hasta que ésta se libera bruscamente en forma de un sismo.

Sin embargo, investigaciones recientes exploraron otros posibles desencadenantes, como la influencia de la Luna, las fuerzas de marea y los efectos electromagnéticos sobre el núcleo terrestre.

El estudio de la Universidad de Tsukuba añadió una nueva variable a la ecuación: la radiación solar y su impacto en la temperatura terrestre. Aunque los científicos enfatizan que este no es un factor dominante, su incorporación en los modelos predictivos podría ayudar a mejorar las estimaciones de riesgo sísmico.

El reto de predecir terremotos

Investigaciones futuras podrían integrar predicciones
Investigaciones futuras podrían integrar predicciones solares en modelos de alerta temprana para terremotos (Imagen Ilustrativa Infobae)

Anticipar un terremoto sigue siendo uno de los mayores desafíos de la ciencia. Existen demasiadas variables en juego, y los procesos que conducen a un temblor son largos y complejos. Hasta ahora, los modelos se basan en datos históricos de actividad sísmica, en la identificación de fallas activas y en la monitorización de señales como ondas sísmicas previas o cambios en el nivel de agua subterránea.

Sin embargo, ningún modelo logró prever con precisión cuándo ocurrirá un sismo de gran magnitud. El terremoto de Tōhoku en 2011, de magnitud 9,0, es un recordatorio de la devastación que pueden causar estos eventos. Aquel sismo, que generó un tsunami y derivó en el desastre nuclear de Fukushima, cobró más de 18.000 vidas y dejó a Japón en estado de emergencia.

Si la actividad solar puede aportar una pista más en la predicción de terremotos, su estudio se vuelve crucial. Integrar predicciones de actividad solar en modelos de temperatura terrestre podría ser una nueva herramienta en la sismología moderna.

Un paso adelante en la investigación sísmica

Predecir un sismo con antelación
Predecir un sismo con antelación suficiente sigue siendo el gran desafío de la sismología moderna (Efe)

Aunque aún queda mucho por investigar, el trabajo de Junqueira Saldanha y Hirata abre una vía prometedora en la comprensión de los terremotos. No se trata de afirmar que el Sol cause sismos, sino de reconocer que su calor puede influir en las condiciones que los favorecen.

“Es una dirección apasionante, y esperamos que nuestro estudio arroje algo de luz sobre el panorama más amplio de lo que desencadena los terremotos”, concluyó Junqueira Saldanha,

Si esta línea de investigación continúa desarrollándose, la sismología podría dar un paso más hacia su objetivo más ambicioso: predecir los terremotos con suficiente antelación para salvar vidas.