Las bolsas intravenosas podrían inundar el torrente sanguíneo con microplásticos

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MARTES, 18 de marzo de 2025 (HealthDay News) -- Los microplásticos que invaden y se adentran en las profundidades del cuerpo humano se están convirtiendo en una preocupación cada vez mayor entre los médicos y los expertos en salud.

Ahora, un nuevo estudio muestra que incluso la atención médica está causando una mayor exposición a las diminutas partículas de plástico.

Los microplásticos se pueden encontrar en las soluciones administradas a través de bolsas intravenosas de plástico, informaron los investigadores recientemente en la revista Environment & Health.

De hecho, miles de partículas de plástico podrían administrarse directamente al torrente sanguíneo de una persona desde una sola bolsa estándar de 8.4 onzas de líquido intravenoso, dijeron los investigadores.

"Nuestros hallazgos resaltan un aspecto de la contaminación plástica que afecta a los humanos de manera más directa, ya que los microplásticos se inyectan en el torrente sanguíneo", concluyó el equipo de investigación dirigido por el investigador principal Liwu Zhang, profesor del Departamento de Ciencias e Ingeniería Ambiental de la Universidad de Fudan en Shanghai, China.

Los estudios han relacionado los microplásticos con una serie de problemas de salud, según un artículo reciente de Forbes . Estos incluyen demencia y salud cerebral, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, problemas reproductivos y enfermedades infantiles.

Se han encontrado microplásticos en la sangre humana, y tienden a acumularse en órganos como los pulmones, el hígado, los riñones y el bazo, señalaron los investigadores en las notas de respaldo.

Un estudio publicado a principios de este año en Nature encontró que la cantidad de microplásticos que se encuentran en el cerebro humano ha aumentado en aproximadamente un 50%, el equivalente a una cuchara de plástico en peso.

Para el nuevo estudio, los investigadores compraron dos marcas diferentes de solución salina intravenosa en bolsas y gotearon el contenido de las bolsas en recipientes de vidrio.

Luego, los líquidos se filtraron para atrapar partículas microscópicas de plástico, dijeron los investigadores.

Ambas marcas de solución salina contenían microplásticos hechos de polipropileno, el mismo material que las bolsas, según muestran los resultados. Esto sugiere que las bolsas desprenden microplásticos en soluciones intravenosas.

Los investigadores estimaron que cada bolsa de líquido intravenoso podría entregar alrededor de 7,500 microplásticos directamente al torrente sanguíneo. Eso aumentaría a unas 25,000 partículas para tratar la deshidratación o 52,500 para la cirugía abdominal, ya que ambas afecciones requieren múltiples bolsas intravenosas.

Mantener las bolsas intravenosas alejadas de la luz ultravioleta y el calor podría ayudar a prevenir que los microplásticos se desprendan en las soluciones, apuntaron los investigadores.

Los hospitales y clínicas también podrían considerar sistemas de filtración que podrían eliminar las partículas mientras un paciente recibe una infusión intravenosa.

"Las investigaciones futuras deberían centrarse en estudios toxicológicos más directos para evaluar de manera integral la toxicidad potencial de los microplásticos y sus riesgos asociados para la salud", escribieron los investigadores. "Estos hallazgos proporcionarán una base científica para formular políticas y medidas adecuadas para mitigar las amenazas potenciales que plantean los microplásticos para la salud humana".

Más información

La Universidad de California-San Francisco ofrece más información sobre los microplásticos.

FUENTE: American Chemical Society, comunicado de prensa, 11 de marzo de 2025