
El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas y también más peligrosas que existen, y de la que no deberíamos hablar si todas las personas estuvieran vacunadas ya que es prevenible 100% con dos vacunas.
Pero lamentablemente, en el mundo y también Argentina, es noticia debido a distintos brotes que encienden las alarmas sanitarias.
¿Qué es el sarampión y qué lo provoca?

Según describe el Ministerio de Salud de la Nación, el sarampión es una enfermedad viral eruptiva-febril, miembro de la familia Paramyxoviridae, de transmisión respiratoria y altamente contagiosa, que se disemina rápida y fácilmente de persona a persona.
“Las manifestaciones clínicas son: fiebre alta, manchas rojas en la piel, secreción nasal, conjuntivitis y tos. Puede presentar complicaciones como ser neumonía, convulsiones, meningoencefalitis y ceguera. No tiene tratamiento específico y es mortal en 1 a 2 casos cada 1000 personas no vacunadas”, completa.
Al ser una de las enfermedades virales más contagiosas, representa un riesgo significativo para la salud pública, especialmente en poblaciones con baja cobertura de vacunación.

¿Por qué el sarampión es tan contagioso?
Según describe la doctora Angela Gentile, jefa del Departamento de Epidemiología del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, “el sarampión es una de las infecciones virales más contagiosas conocidas. Su propagación es rápida y afecta principalmente a niños, aunque puede presentarse en personas de cualquier edad que no estén inmunizadas”.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), si una persona tiene sarampión, hasta el 90 % de las personas que no son inmunes y respiran el aire contaminado o tocan una superficie infectada se enfermarán. Y a diferencia de otras enfermedades respiratorias, no es estacional.
Y desde Unicef agregan que parte del problema es que el sarampión es mucho más contagioso que otros virus, como el COVID-19, la gripe y la varicela. “Por cada persona que tiene sarampión, entre 12 y 18 personas más se infectan. Esto hace que el sarampión sea alrededor de 12 veces más contagioso que la gripe, seis veces más contagioso que el ébola y el doble que el COVID-19 y la varicela”, describieron.

¿Cómo se propaga el sarampión?
“El virus del sarampión vive en las mucosidades de la nariz y la garganta de las personas infectadas. Cuando tosen, estornudan o respiran, las partículas virales se lanzan al aire, donde pueden permanecer hasta dos horas”, explicó el doctor Peter Hotez, decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical del Baylor College of Medicine en Houston, lidera la cruzada contra el sarampión en Estados Unidos, que ha visto un incremento alarmante de casos en 2024 y 2025.
“Ni siquiera es necesario tener contacto directo o cercano con una persona infectada para enfermarse. También es posible contraer la enfermedad al tocar superficies contaminadas con el virus y luego llevarse las manos a la boca, nariz u ojos. Por eso el sarampión es uno de los virus más contagiosos que conocemos”, agregó el especialista
El curso del sarampión puede durar entre siete y diez días, aunque el período de contagio es considerablemente largo. La persona infectada puede transmitir el virus desde cuatro días antes de la aparición de la erupción hasta cuatro días después de su aparición. Esto es problemático porque significa que se puede transmitir el virus sin saberlo. Este período extenso de transmisión es lo que hace al sarampión tan difícil de controlar, especialmente en lugares con baja cobertura de vacunación.

¿Cuáles son los síntomas y cómo sé que tengo sarampión?
Antes de propagarse por todo el cuerpo, el virus infecta las vías respiratorias. Entre los síntomas que se manifiestan, está la fiebre alta, tos, congestión nasal, conjuntivitis y una erupción cutánea que se extiende por todo el cuerpo.
Los expertos afirman que es posible que una persona no sepa que tienes sarampión de inmediato, porque los síntomas suelen aparecer una o dos semanas después de la exposición al virus. En la fase inicial, los afectados pueden presentar fiebre alta, tos seca, congestión nasal y conjuntivitis, lo que a menudo lleva a confundir la enfermedad con un resfriado común.
Posteriormente, surge una erupción cutánea distintiva que comienza en la cara y se extiende al resto del cuerpo. Otro signo característico es la aparición de pequeñas manchas blancas en la mucosa bucal, conocidas como manchas de Koplik, que pueden ayudar a confirmar el diagnóstico.

“De tres a cinco días después, es posible que aparezca el sarpullido clásico: manchas rojas en la cara que salpican la línea del cabello y luego se extienden al cuello, el tronco, los brazos, las piernas y los pies. Cuanto más oscura sea la piel, más probabilidades hay de que aparezcan pequeñas protuberancias elevadas en las mismas áreas sin decoloración. Aunque parece doloroso, el sarpullido del sarampión no suele causar picazón”, según informan los CDC.
“El sarpullido del sarampión puede durar hasta siete días y luego disminuye progresivamente; primero desaparece del rostro y, por último, de los muslos y los pies. Si bien otros síntomas de la enfermedad desaparecen, la tos y el oscurecimiento o la descamación de la piel donde estaba el sarpullido pueden durar hasta 10 días”, detalla Mayo Clinic.

¿Qué tan peligroso es el sarampión para los niños?
“Si bien el sarampión puede ser peligroso para cualquier persona, es especialmente peligroso para los niños, en particular los menores de cinco años que no están vacunados”, explican desde Unicef.
Y agregan: “Esto se debe a que el sistema inmunológico de los niños y sus sistemas orgánicos aún están en desarrollo, lo que los hace más vulnerables tanto a la infección como a las complicaciones de salud”.
Complicaciones y casos graves

Entre las complicaciones del sarampión, Mayo Clinic describe las siguientes:
· Diarrea y vómitos. La diarrea y los vómitos pueden provocar que el cuerpo pierda una cantidad excesiva de agua (deshidratación).
· Infección de oído. Una de las complicaciones más frecuentes del sarampión es la infección bacteriana del oído.
· Bronquitis, laringitis o crup. El sarampión puede provocar la irritación e hinchazón (inflamación) de las vías respiratorias (crup). También puede causar la inflamación de las paredes internas que alinean las principales vías de paso de aire de los pulmones (bronquitis). Además, el sarampión puede provocar la inflamación de la laringe (laringitis).
· Neumonía. Con frecuencia, el sarampión puede provocar una infección en los pulmones (neumonía). Las personas que tienen el sistema inmunitario debilitado pueden padecer una variedad especialmente peligrosa de neumonía que, a veces, puede ser mortal.
· Encefalitis. Aproximadamente, 1 de cada 1000 personas con sarampión puede presentar una complicación llamada “encefalitis”, que es la irritación e hinchazón (inflamación) del cerebro. Esta afección puede ser especialmente peligrosa para aquellas personas que tienen el sistema inmunitario debilitado. Puede manifestarse muy poco después de haber contraído sarampión o después de varios meses y puede causar daño cerebral permanente.
· Problemas durante el embarazo. Si se está embarazada, se debe tener mucho cuidado de no contagiarse sarampión porque esta enfermedad puede provocar un parto prematuro, bajo peso del bebé al nacer o la muerte del feto.
¿Cómo se previene el sarampión?

El Calendario Nacional de Vacunación contempla que todos los niños, a los 12 meses y a los 5 años, deben recibir la vacuna triple viral MMR, que protege contra esta afección, la rubéola y las paperas.
“La vacunación es la herramienta más eficaz para prevenir el sarampión”, señaló el Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires en un comunicado, mientras continúa fortaleciendo la estrategia de inmunización contra el sarampión. Con el objetivo de garantizar que todos los vecinos completen su esquema de vacunación, la Unidad Sanitaria Móvil se encuentra en Armenia y Paraguay (Palermo), de lunes a viernes de 8 a 14 horas aplicando la vacuna de manera gratuita y sin turno previo.
En tanto, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires anunció la aplicación de un refuerzo, “con una dosis extra de la vacuna, para las personas que tuvieron contacto” con los afectados porteños y está destinada a niños de entre 6 meses y 4 años.

La vacuna MMR contiene una versión debilitada del virus del sarampión, que causa una infección inofensiva que ayuda a las personas a desarrollar inmunidad. Por lo tanto, algunas personas no deberían recibir la vacuna, dice el CDC, incluidas aquellas que están embarazadas, tienen un sistema inmunológico debilitado debido a una enfermedad o tratamiento, o tienen un padre o hermano con antecedentes de problemas del sistema inmunológico.
La vacunación contra el sarampión evitó más de 60 millones de muertes entre 2000 y 2023, según la Organización Mundial de la Salud. Antes de la vacuna, la enfermedad causaba 2,6 millones de muertes cada año.
La OPS hizo un llamado urgente a los países y territorios de las Américas a intensificar sus esfuerzos de vacunación y vigilancia epidemiológica, así como a fortalecer su capacidad de respuesta rápida para contener y controlar brotes. Las recomendaciones incluyen intensificar las campañas de vacunación, especialmente en áreas de alto riesgo, y mejorar la vigilancia para detectar casos sospechosos de la enfermedad de manera oportuna.
Brote mundial de sarampión
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió un alerta epidemiológica debido al aumento de casos de sarampión en varios países de las Américas.
Hasta la semana epidemiológica 8 de 2025 (21 de febrero de 2025), se han confirmado más de 300 casos de sarampión sumados en Argentina, Canadá, Estados Unidos y México. Esto representa un aumento significativo en comparación con el mismo período de 2024, cuando se notificaron 60 casos durante las primeras ocho semanas del año. Además hay un muerto en EEUU.
Al día de ayer, sólo en EEUU se habían reportado 222 casos en lo que va de 2025. En Argentina suman 8 distribuidos en Ciudad de Buenos Aires (6) y Provincia de Buenos Aires (2).

“A partir de un caso importado de sarampión de gente que venía de Rusia, Vietnam y Río de Janeiro, se contagió gente alrededor de ellos. O sea que el sarampión es muy contagioso. Por eso es fundamental que se vacune todo aquel que nació después de 1965, porque los que nacieron antes se consideran inmunizados. Todos los demás tienen que tener dos dosis de sarampión. La primera dosis se da al año de vida. El refuerzo se da a los cinco años. A partir de esta edad todos tienen que tener dos dosis. Por eso es muy importante revisar los calendarios de vacunación, sobre todo al inicio escolar, donde es una muy buena oportunidad para hacer la revisión si le falta alguna vacuna, aplicársela”, explicó a Infobae el doctor Ricardo Teijeiro (MN 58065), infectólogo del Hospital Pirovano y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
Tal como lo recordó Teijeiro, la vacunación es la principal herramienta para prevenir el sarampión. Y un ejemplo de ello es que de los 11 casos que se reportaron en 2024 en Argentina, ninguno tenía la cobertura aconsejada. Si bien la circulación endémica había sido eliminada desde hace un cuarto de siglo el país, las últimas estadísticas confirman que la primera vacuna para prevenir la circulación del virus tiene una cobertura total del 81 por ciento, lejos del 90 por ciento sugerido.
En 2023, de los 322.714 casos de sarampión notificados oficialmente en todo el mundo, 60.941 se produjeron en Europa y Asia central. Esto pone de relieve el importante impacto del sarampión en estas regiones y subraya la importancia de la vacunación para prevenir la propagación de esta grave enfermedad.
Hoy Europa también es noticia respecto al sarampión. Con ocho brotes en activo y más de 100 casos desde enero, el sarampión ha vuelto a España tras años prácticamente desaparecida. Vizcaya es la provincia más afectada, con 51 personas infectadas por el virus desde noviembre —44 de ellas en este año—. Las cifras españolas multiplican las registradas por Sanidad en febrero de 2024, cuando los casos apenas llegaban a la quincena.

¿Quiénes deben recibir la dosis extra contra el sarampión?
- Niños de 13 meses a 4 años que hayan estado en contacto con un caso confirmado deben recibir una dosis extra de la vacuna.
- Bebés de 6 a 11 meses en contacto con un caso confirmado deben recibir una dosis “cero”, que no cuenta para el esquema de vacunación regular, pero refuerza su inmunidad.
Este refuerzo se debe a que, aunque la vacuna triple viral es altamente efectiva, un pequeño porcentaje de la población (entre el 5% y el 10%) no desarrolla una respuesta inmune adecuada tras la primera dosis. En bebés menores de un año, la respuesta puede ser aún menor debido a la inmadurez del sistema inmunológico.

Calendario Nacional de Vacunación para sarampión:
- Niños de 12 meses a 4 años: deben recibir una dosis de la vacuna triple viral.
- Mayores de 5 años, adolescentes y adultos: deben acreditar dos dosis de vacuna doble o triple viral, aplicadas después del primer año de vida.
- Personas nacidas antes de 1965: se consideran inmunes y no necesitan vacunarse.
El estrés crónico podría aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular en mujeres jóvenes
Un estudio examinó cómo la presión emocional sostenida afectaría la salud neurológica en personas adultas menores de 50 años y su posible relación con ciertos episodios vasculares

El mayor estudio genético sobre el trastorno bipolar redefine su base hereditaria
Lo realizó un equipo de más de 300 científicos. Analizaron datos de más de 158 mil personas con la enfermedad y publicaron los resultados en la revista Nature. Qué pistas aportaron para dar una mejor atención a los pacientes

Descubren proteínas esenciales para el equilibrio celular y su impacto en las enfermedades metabólicas
Un estudio del Instituto Weizmann de Ciencias identificó moléculas clave en la regulación interna de las células y su vínculo con trastornos que afectan los procesos bioquímicos del organismo

Tres frutas súper saludables y nutritivas para incorporar en la dieta de todos los días
Aportan nutrientes clave para el equilibrio del organismo, contribuyen a fortalecer las defensas y mejorar el bienestar general
