VIERNES, 24 de enero de 2025 (HealthDay News) -- Las personas que usan marihuana con fines medicinales tienen las mismas probabilidades (o más) de volverse adictas al cannabis que los fumadores recreativos, según un estudio reciente.
Las personas que consumían marihuana medicinal eran más propensas a tener un trastorno por consumo de cannabis que las que se drogaban de forma recreativa, reportaron los investigadores en un estudio publicado el 22 de enero en la revista JAMA Psychiatry.
Los pacientes de marihuana medicinal también tenían más días de consumo de marihuana que los usuarios recreativos, encontraron los investigadores.
"Estos hallazgos sugieren que el cannabis recomendado médicamente no se asocia con un menor riesgo de adicción en comparación con el uso no médico", concluyó el equipo de investigación dirigido por la Dra. Nora Volkow, directora del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas.
"Los médicos deben considerar el riesgo de adicción antes de recomendar el cannabis medicinal y, si lo hacen, deben monitorizar la aparición del CUD [trastorno por consumo de cannabis]", añadieron los investigadores.
Alrededor de 3 de cada 10 personas que consumen marihuana desarrollan un trastorno por consumo de cannabis, en el que no pueden dejar de fumar a pesar de que les está causando problemas sociales y de salud en sus vidas, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Para ver si los usuarios medicinales corren el mismo riesgo de adicción que los usuarios recreativos, los investigadores analizaron datos de una encuesta federal sobre el uso de drogas y la salud realizada en 2021-2022.
Entre los casi 73,000 adultos que reportaron un consumo reciente de cannabis, alrededor del 84 por ciento dijeron que se drogaron únicamente con fines recreativos. Otro 9 por ciento reportó el uso solo con fines médicos, y casi el 6 por ciento dijeron que lo usaban tanto con fines medicinales como recreativos.
En general, alrededor de un 35 por ciento de todo el grupo tenía un trastorno por consumo de cannabis, según los síntomas que reportaron en la encuesta, apuntaron los investigadores.
Aquellos que usaban marihuana medicinal eran más propensos a tener un uso problemático, los resultados muestran:
Alrededor de un 14 por ciento de los usuarios medicinales y un 13 por ciento de los usuarios medicinales/recreativos entre los hombres de 18 a 34 años tenían un trastorno grave por consumo de cannabis, en comparación con más del 8 por ciento de los usuarios recreativos.
Alrededor del 7 por ciento de los usuarios medicinales y el 12 por ciento de los usuarios medicinales/recreativos entre las mujeres de 18 a 34 años tenían un trastorno grave por consumo de cannabis, en comparación con el 6 por ciento de los usuarios recreativos.
Entre los hombres de 35 a 49 años, el 5 por ciento de los usuarios medicinales, casi el 7 por ciento de los usuarios medicinales/recreativos y el 4 por ciento de los usuarios recreativos tenían un trastorno grave por consumo de cannabis. Entre las mujeres del mismo grupo de edad, el 2 por ciento de las usuarias médicas y no médicas y el 4 por ciento de las que tenían un uso médico y recreativo tenían un trastorno grave por consumo de cannabis.
Los pacientes de marihuana medicinal también tendieron a consumir marihuana más días en promedio durante el año pasado.
Los usuarios medicinales y medicinales/recreativos fumaban un promedio de 40 a 70 por ciento más de días al año que los fumadores recreativos, encontraron los investigadores.
Por ejemplo, los hombres de 18 a 24 años consumieron marihuana medicinal 217 días en promedio, en comparación con 212 días para los usuarios medicinales/recreativos y 154 para los usuarios puramente recreativos.
"Una mayor prevalencia de trastornos por consumo de cannabis entre los adultos con uso médico podría reflejar un consumo más frecuente de cannabis", concluyeron los investigadores en su artículo.
Más información
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. ofrecen más información sobre el trastorno por consumo de cannabis.
FUENTE: JAMA Psychiatry, 22 de enero de 2025