JUEVES, 16 de enero de 2025 (HealthDay News) -- Casi un tercio de los estadounidenses han estado expuestos a contaminantes no regulados en su agua potable que podrían afectar a su salud.
Además, las personas hispanas y negras son más propensas a tener niveles peligrosos de contaminantes en su agua potable, y a vivir cerca de fuentes de contaminación como instalaciones industriales, señalaron los investigadores en un nuevo estudio publicado el 15 de enero en la revista Environmental Health Perspectives.
"Nuestros hallazgos muestran que el porcentaje de residentes hispanos y negros en una comunidad es un predictor constante de una peor calidad del agua", señaló en un comunicado de prensa del grupo el investigador principal, Aaron Maruzzo, científico del Instituto Silent Spring, en Boston.
Actualmente, las instalaciones públicas de agua están obligadas a realizar pruebas de casi 100 contaminantes en el agua potable, apuntaron los investigadores.
"Aun así, sabemos que hay miles de otras sustancias químicas nocivas que no están reguladas y que llegan a las aguas subterráneas y superficiales, y algunas de estas sustancias pueden acabar en última instancia en los suministros de agua potable", señaló en un comunicado de prensa la investigadora principal , Laurel Schaider, científica sénior del Instituto Silent Spring.
Para este estudio, los investigadores observaron los datos que la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. recopiló entre 2013 y 2015 bajo un programa de seguimiento de contaminantes no regulados en el agua potable.
El equipo de investigación analizó datos de más de 4,800 sistemas públicos de agua y encontró que el 27 por ciento, que atiende a 97 millones de personas, tenía niveles detectables de al menos una de estas sustancias químicas:
1,4-dioxano, un disolvente que la EPA clasifica como probable carcinógeno humano
PFAS (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas), sustancias químicas antiadherentes ampliamente utilizadas en productos de consumo que se han asociado con la alteración hormonal, el cáncer y otros problemas de salud
Clorodifluorometano (freón 22), un gas que agota la capa de ozono utilizado en la producción de fluoropolímeros como el teflón
1,1-dicloroetano, un solvente utilizado en pinturas, plásticos y pesticidas que se ha asociado con el cáncer
Estas sustancias aparecen con más frecuencia en los vecindarios hispanos y negros, que probablemente estén situados cerca de los sitios que descargan los contaminantes, apuntaron los investigadores.
Los sitios de descarga incluyen plantas de tratamiento de aguas residuales, aeropuertos, sitios industriales e instalaciones de entrenamiento militar.
Estos hallazgos se basan en investigaciones anteriores del Instituto Silent Spring, que encontraron que los residentes hispanos eran más propensos a estar expuestos a niveles más altos de nitrato en el agua potable, afirmaron los investigadores.
Los nitratos pueden provocar una afección mortal llamada "síndrome del bebé azul", en la que la sangre es menos capaz de transportar oxígeno por todo el cuerpo, apuntaron los investigadores. La exposición a los nitratos también podría aumentar el riesgo de cáncer de colon y vejiga.
El año pasado, la EPA anunció estándares de agua potable para seis sustancias químicas PFAS, anotaron los investigadores.
"En última instancia, necesitamos hacer un mejor trabajo en la protección de las aguas de origen y reducir las descargas de contaminantes en los cuerpos de agua que alimentan nuestros suministros de agua potable", concluyó Schaider.
Más información
El Grupo de Trabajo Ambiental ofrece más información sobre las sustancias químicas PFAS.
FUENTE: Silver Spring Institute, comunicado de prensa, 15 de enero de 2025