Gastón Edul: su cercanía con los jugadores, los romances que le atribuyen y la anécdota detrás del “andá pa’ allá, bobo”

En Random, el ciclo de entrevistas de Infobae, el periodista compartió cómo el Mundial de Qatar marcó un punto de inflexión en su carrera, tanto a nivel profesional como personal, y recordó la icónica entrevista a Messi tras el partido contra Países Bajos. “No le miento jamás a mi mamá”, confesó al referirse a sus vínculos amorosos

Guardar
Random con Gastón Edul

Gastón Edul es un periodista deportivo argentino que ha ganado notoriedad en los últimos años por su cobertura especializada de la Selección Argentina de fútbol. Actualmente trabaja en TyC Sports, donde se ha consolidado como una figura clave en la narración de los eventos más importantes del equipo nacional, incluyendo la Copa América 2021 en Brasil, el Mundial de Qatar 2022 y la Copa América 2024 en Estados Unidos. Su estilo se caracteriza por el compromiso con los datos y la estadística, aportando información clave durante las transmisiones.

Desde muy chico, tuvo claro cuál sería su profesión, influenciado por su hermano mayor, Esteban Edul, también periodista deportivo. Comenzó su carrera a los 17 años en una radio local y dio su gran salto profesional en TyC Sports.

Además de su trabajo en televisión, Edul ha incursionado en plataformas digitales. Participa en el canal de streaming Olga, transmite contenido en la plataforma Kick y ha protagonizado entretenidas charlas en vivo junto al streamer Davoo Xeneize. Su presencia en redes sociales es notable, especialmente en Instagram y Twitter, donde comparte contenido relacionado con el fútbol y la selección nacional. También es coautor del libro La Tercera, que narra la conquista de la tercera Copa del Mundo por parte de la Selección.

Gastón Edul: "A mí me
Gastón Edul: "A mí me cambió rotundamente la vida ese Mundial de Qatar 2022". (Candela Teicheira)

Leo: — ¿Sentís que los jugadores de la Selección confían en vos porque saben que no los vas a defraudar si te dan una información?

Gastón: — En realidad, está claro cómo me manejo. Ellos saben que si hay una información que para mí es importante, yo la doy igual. No me fijo mucho a quién beneficio o a quién perjudico, porque a la larga te da respeto, te respetan igual y hay que hacerlo. Después hay cosas que sí y cosas que no: una charla en privado, en off, no es lo mismo que algo que se puede contar. Ellos saben cómo me manejo y que no busco trascender desde ese lado sino con la constancia. Si se lesionó un jugador, por ejemplo, y yo sé que perjudico a alguien diciéndolo, yo no puedo no decirlo porque cubro la Selección. Al final es mi laburo y la gente me cree por eso.

Leo: — ¿Y cómo lo manejás? ¿Te has guardado algunas cosas?

Gastón: — Sí. Pero si yo considero que es imprescindible como algo informativo, lo digo igual. Me han pasado cosas que uno sabe que quizás hubiesen tenido algo de repercusión, pero ganás por otro lado también en una relación se construye. Pero siempre sin falta la verdad. Porque para mí es más importante conservar credibilidad con la gente que conservar relaciones. Es difícil, ¿eh?

Leo: — ¿Tenés relación casi de amistad con alguno de los jugadores de la Selección?

Gastón: — No lo llamaría amistad porque yo tengo amigos de toda la vida…

Leo: — ¿Mucha relación? ¿Se pueden decir nombres?

Gastón: — Se sabe. Tengo relación por viajes y tengo la edad de ellos. Cuando yo empecé a cubrir la Selección tenía 24 o 25 y muchos de ellos tenían 22, 23 o 24.

Leo: — Son contemporáneos...

Gastón: — Claro. Es que está bueno también contar lo importante del camino. No es que caí con un paracaídas y por eso gracias a Dios me fue bien. Yo cubrí muchos clubes: Argentinos Juniors, Chacarita, Defensa y Justicia. Cuando llegué a la Selección en 2021, me encontré con que a Nahuel Molina, a Guido Rodríguez y a Lisandro Martínez, por ejemplo, yo le hacía notas en el predio de Defensa y Justicia, era el único periodista que iba. Alexis McAllister y Nico González les hacían notas cuando Argentinos estaba en la B. Entonces, no es lo mismo. Estábamos los dos ahí y hoy estamos los dos acá.

Leo: — Crecieron juntos.

Gastón: — Sí. Eso genera otra cosa...

Leo: — ¿Sos consciente que además de ese camino juntos, plagado de títulos, es la etapa más exitosa de la Selección? Son cuatro títulos al hilo, dos Copa América, Finalísima, Mundial, Eliminatoria invictos, el baile en Brasil... Estás en un prime con ellos desde lo periodístico.

Gastón: — Más allá de lo que me toca a mí profesionalmente, yo agradezco poder seguir tan de cerca algo que ya se ve en el presente sin tener que ir al futuro o a perspectiva del tiempo, que es totalmente histórico. Cuando pasen 10 o 20 años va a tener más valor todavía porque no va a volver a costar mucho ganar cosas. Pero hoy ya nos damos cuenta todos que lo que está pasando es histórico. Lo dijo Ruggeri hace poco como campeón del mundo de México ‘86, que es la mejor Selección de la historia. Yo hace tiempo lo siento eso, pero evitaba decirlo porque me dicen: “Vos sos pendejo, las otras no las viste y no lo viviste”. Y es verdad. De hecho, lo discutía por eso con mi viejo. Pero a mí lo que me hacía ruido es que, todos los campeones del mundo fueron importantes, ni hablar del primer campeón del mundo, que rompió el hielo en el ‘78. Pero la mentalidad que tiene este equipo para mí es diferente: es ganar después de ganar. O más difícil aún. Es jugar bien o mejor después de haber jugado tan bien. Es casi un milagro ganar un Mundial porque aparte de jugar bien tenés que tener suerte y demás. Ahora estamos a un año del próximo Mundial y Argentina va a ir a competir firme.

Leo: — ¿Crees que si no hubieras sido campeón con Argentina en Qatar, tu carrera hubiera tomado un rumbo diferente?

Gastón: — Claramente no hubiera sido lo mismo. Sí, pero ni tengo dudas. Si bien ya en el fútbol argentino, en el periodismo deportivo, era un poco más relevante, a mí me cambió rotundamente la vida ese Mundial porque lo laboral atravesó lo personal. Obviamente que no deja de ser mi trabajo, pero cuando es algo tan grande, te atraviesa personalmente.

Leo: — Se unen momentos personales de buen laburo y se va dando todo.

Gastón: — Acompaña eso, te hacés más conocido, tenés más oportunidades laborales. No sé si otras responsabilidades, pero cambia la dinámica de tu vida.

Gastón tiene una comunidad de
Gastón tiene una comunidad de casi 2 millones de seguidores en Instagram. (Candela Teicheira)

Leo: — Un buen quiebre periodístico es: “andá pa’ allá, bobo”. En ese momento, supiste manejar la situación. No sé cuánto respeto te generó entre los jugadores porque podrías haber fogoneado para sacar más de Messi y sin embargo lo tranquilizaste.

Gastón: — A mí lo que me pasó es que ellos no lo decían públicamente, pero internamente el mensaje antes del Mundial era: somos campeones de la Copa América y hay mucha expectativa acá. “Nuestro objetivo es jugar para no defraudar y jugar los siete partidos”, creo que era el mensaje. Yo creo que con el paso del Mundial se dieron cuenta que podían ser campeones mundiales, pero no pisaron Qatar pensando que lo que iban a ser. Eso se forma en el camino. Y cuando Argentina le gana a Países Bajos, que casi nos quedamos afuera por penales, yo digo: “Bueno, listo. Messi vuelve a jugar siete partidos del Mundial”. Para sincerarme totalmente. Yo no me di cuenta de la trascendencia de lo que estaba sucediendo en ese momento. Yo estaba haciendo un post partido, muy contento, eufórico, pero pasa todo muy rápido. No era una nota sola la de Messi. Hice cuatro notas, pero la de Leo quedó para siempre. Había ruido porque venían hablando los holandeses con los argentinos. Yo estaba ahí en la puerta del vestuario y era un quilombo.

Leo: — En ese momento, vos tenés toda la situación de frente. ¿Ves a quien está puteando Leo?

Gastón: — Sí, estaba claro era a (Wout) Weghorst, el número 19 que jugó bárbaro. Yo siempre digo que para mí fue un gran malentendido porque Weghorst había entrado a picantear bastante al partido. Jugó bárbaro, pero lo había picanteado. Y cuando termina el encuentro, que es la zona que se llama Flash Interview, que son las notas que hacemos nosotros, había tres medios argentinos, uno éramos nosotros. Cuando Messi me ve y está viniendo a darme la nota que me daba después de cada partido, Weghorst quiso pedirle la camiseta. Pero en vez de hablarlo medio que le tironeó la camiseta de atrás. Leo, que venía caliente, como todo el equipo argentino, veo que lo corrió y ni lo miró porque pensó que quería seguirla. Eso es lo que pasó. Entonces, se puso a parar la nota. Yo digo que es la nota en la que menos mérito tuve en mi vida, porque nunca me escuchó ninguna pregunta que le hice. No hice nada (risas).

Leo: — Estaba re caliente (risas).

Gastón: — De hecho, lo increíble es que desde ese día de diciembre de 2022 hasta hoy que estoy dando esta nota, te juro que me pasó también viniendo para acá, no hubo un solo día en el que alguien no me no me lo haya recordado.

Leo: — Es verdad que es un hito dentro de un Mundial. Aparte verlo a Messi con esa reacción, que no es habitual de él, me parece que el público lo vio como algo diferente y dijo: “¡Ah! Mirá, se calienta”.

Gastón: — Es que terminó siendo una arenga para la gente. Cuando me lo recuerdan yo veo que se ponen contentos y claramente no es por mí. Es porque para mí los traslada a ese momento, con quien lo vio en ese momento, se acuerda qué le generó y se ponen contentos. Cuando termina la entrevista y me entero que salió esto al aire, imaginate lo que era el celular...

Leo: — Mensajes desde todo el mundo…

Gastón: — Tenía miles de llamadas perdidas de alguien muy cercano a Leo y digo: “¡Uy! Listo. Ya está, ¿cómo le explico que yo no tuve nada que ver?”. Porque como periodista a veces te paso eso.

Leo: — Sí, no sabes cómo reaccionar cuando te llaman todos.

Gastón: — Y yo digo: “Bueno, listo. Lo llamo ahora y le explico”. Y cuando atiende me dice: “¡Fue espectacular! El mejor momento del Mundial. ¿A quién se lo dejo?”. Y ahí me quedé tranquilo.

Leo: — ¿Era un familiar?

Gastón: — Era alguien muy cercano a Leo (risas).

"La mentalidad que tiene este
"La mentalidad que tiene este equipo es diferente: es ganar después de ganar", expresó Gastón sobre la Selección en diálogo con Leo Montero. (Candela Teicheira)

Familia y amor

Leo: — Hablemos de Gastón Edul en el ámbito personal. Con 29 años, siendo un tipo que nació con las redes sociales, ¿cómo gestionás las críticas? ¿Cómo lidias con la fama después de esa exposición tan grande?

Gastón: — No es fácil para mí. Yo no dejo que me llegue tan cerca. Es decir, me enojo y me duele. No me resbala para nada, pero no me pongo en duda por eso. Lo digo así, suelto de cuerpo y no es fácil de manejar tampoco. Pero n dejo que llegue.

Leo: — “Todos queremos que nos quieran”, dice el refrán.

Gastón: — Lógico. ¿A quién no le gusta sentirse querido?. Obvio que te pega. Por lo menos a mí me afecta. Yo creo que la conclusión a la que llegué es que no me tengo que tomar demasiado en serio nada: ni lo bueno ni lo malo. Todo lo relativizo en redes. Obviamente, uno lo lee y aparte vivís de eso y ves la sinergia con la gente. Lo otro también que tengo en cuenta es que nunca me va a querer todo el mundo.

Leo: — Aprendés a estar equilibrado para que no te impacte demasiado porque después del mundial vino también la fama de MasterChef y los romances...

Gastón: — Sí, pero eso me divierte, lo disfruto y no lo sufro para nada. A mí lo que me pasó con todo eso Bake Off, Telefe, Olga y Nati Jota es que hasta antes de eso el producto era lo que yo hablaba o decía, después me di cuenta con el stream que vos pasas a ser el producto. Antes la nota era lo que vos decías de otra cosa, ahora la nota sos vos: Gastón Edul tal o cual cosa. Cambió la dinámica. Yo lo disfruto, pero ¿sabés por qué lo disfruto? Porque estoy muy feliz en general con mi laburo, con mi vida y con cómo llevo todo. Entonces, quiero al tener 40 o 45 años recordar cuando tenía 28 o 29 y que me saque una sonrisa decir: “Che, la pasé bien. La verdad que fui sano y me divertí”.

Leo: — ¿Hacia dónde vas ahora? ¿Qué te gustaría que pase?

Gastón: — Para mí lo mejor, mi ideal, es mantener vigencia, que creo que es lo más difícil. Soy consciente de que esto tiene vaivenes y que ahora estoy muy bien y quizás en dos años no esté tan bien. Y que en cinco años vuelva a estar mejor que ahora. Por lo menos, me siento preparado.

Leo: — ¿Esto que estás viviendo es lo que vos querías de chico?

Gastón: — Es más de lo que yo quería. Soñaba con cubrir la Selección, con hacer periodismo, pero que sea tan masivo lo llevo bien porque de verdad soy feliz. Obviamente que no todos los días son buenos o no todos los laburos me gustan, pero no tengo algo que me pese. Estoy tranquilo, estoy solo también. No tengo familia, cuando vos tenés familia es un poco más complicado.

Leo: — ¿Querés tener novia, hijos?

Gastón: — Sí, quiero. Soy muy clásico. No me quiero perder la experiencia de vida de ser padre y empezar esa nueva vida también. Si lo pienso ahora, me da un poco de claustrofobia. Para mí es también por el laburo que tengo y el momento que estoy viviendo, pero yo creo que eso en algún momento va a llegar. Igual uno no decide cuando encontrás a la mamá de tus hijos...

"Aprendí a relativizar las críticas
"Aprendí a relativizar las críticas en las redes sociales y a no dejarme afectar para bien o para mal", señaló Edul. (Candela Teicheira)

Leo: — ¿Qué dice tu familia de esta carrera que estás desarrollando?

Gastón: — Se acostumbraron. No fue novedoso que yo salga en televisión porque había antes alguien que salía: mi hermano Esteban. Lo que sí fue muy novedoso para mi vieja y mi viejo, y creo que en el caso de mi vieja lo disfruta más que el fútbol, es Backoff. La enloquecía, cuando entraba a Infobae y había una nota me decía: “Yanina Latorre dijo no sé qué”. Eso es lo que le gusta a ella.

Leo: — ¿Y te pregunta si es verdad lo de tus novias? Te dicen: “¿Es verdad lo de Nati Jota y lo de Cande?”

Gastón: — Me pregunta sí, pero medio que le da vergüenza y pregunta de manera solapada. Yo le digo: “Vieja, dale. Pregúntame”.

Leo: — ¿Cuándo están solos o adelante de todos?

Gastón: — Solos. Ponele que me llama y me dice: “Vení a cenar”. Mientras está cocinando me tira: “Che, ¿qué onda? Hay una nueva integrante en la familia. ¿Qué onda Nati?”. Y yo le digo: “No, mamá. Es el streaming, estamos jodiendo”. “Pero a mí me cae bien”, me responde. “Está perfecto mamá”, le contesto.

Leo: — ¿Vos le mentís a tu mamá?

Gastón: — No, jamás. No le miento a mi vieja.

Leo: — Mamá sabe la verdad.

Gastón: — Siempre sabe la verdad, al 100 por ciento. Y se da cuenta y opina.

Leo: — ¿Y los otros integrantes de la familia también opinan?

Gastón: — Esteban es muy cerrado. Nunca jamás preguntó nada. Pero Mariana, su esposa, sí y me pregunta delante de él. Para mí el medio que se hace el boludo y escucha, le interesa, pero no acota. Mi viejo es de otra escuela, de ese pensamiento de no te pongas de novio, aprovechá. Esa es muy clásica, también.

Leo: — De todo lo que se dijo, ¿hay alguna que sea verdad?

Gastón: — Que hubo verdades sí, claro.

Leo: — ¿Y humo?

Gastón: — Exageraciones.

Leo: — ¿Cuál es el mejor Gastón Edul para la gente y para vos? ¿El que cubre la Selección, el que conduce en Olga, el que está en TyC Sport, el de Bake Off o el que está en Kick solo o con Davo Xeneize?

Gastón: — Yo siento que la gente lo que espera de mí es que llegue a los partidos de la Selección. Ahí me buscan más que en el resto del año. Pero fijate cómo cambia el público hoy dependiendo del rango etario por la plataforma. Por ejemplo, con Davoo, los nenes quieren eso. No me quieren ver al aire al mediodía en TyC Sports. En Olga el público es ése, quizás más mujeres que hombres. Son todos diferentes los públicos. Pero en general, si me decís elegí una, la gente me espera cuando juega la Selección. No tengo dudas. Lo siento.

Leo: — ¿De vos mismo ves eso? ¿O vos decís qué bien que estoy en otra faceta y no se me reconoce tanto?

Gastón: — ¿Qué espero yo? Lo de la Selección me acostumbré, pero no me deja de sorprender. Ya estoy ansioso por el mundial que viene.