El intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela (La Libertad Avanza), cuestionó la gestión del gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, por su enfoque ideológico en materia de lucha contra la inseguridad y también por su política social, a la que denominó “cultura planera”. Además, advirtió que la fuerza política del presidente Javier Milei tiene posibilidades de imponerse en la provincia en las próximas elecciones sin necesidad de una alianza con el PRO. Y deslizó que Mauricio Macri y la “elite tradicional” de ese partido deberían hacer autocrítica por el alejamiento de líderes como Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.
“El ciudadano de a pie quiere que ande bien este proceso de cambio que está liderando Milei. Desde ese lugar, los dirigentes nos tenemos que amoldar a la necesidad de la gente de que este cambio funcione”, sostuvo Valenzuela. En este sentido, remarcó la importancia de consolidar un rumbo político claro y criticó los obstáculos para alcanzar un acuerdo electoral en Buenos Aires.

“Confieso que, para mí, parte del inconveniente para tener un acuerdo como el que deberíamos tener de ir juntos en la provincia es lo que está pasando en la Ciudad”, explicó el intendente, aunque destacó que dentro del PRO existen voces que promueven una alianza con los libertarios. A pesar de esto, consideró que el oficialismo nacional es competitivo en la provincia de Buenos Aires: “Hoy La Libertad Avanza está muy firme, aun sin el PRO, y puede ganar”.
Valenzuela también cuestionó la gestión de Kicillof y señaló que el gobernador está enfocado en una disputa interna dentro del kirchnerismo de cara a las próximas elecciones, sobre todo por el choque con la presidenta del PJ, Cristina Kirchner: “Hoy él está tratando de emerger ya de la elección del 2025 como el candidato para el 2027. Y esto no es bueno, porque los bonaerenses necesitan un gobernador resolviendo los problemas, no dando internas partidarias”.
Además, criticó la incorporación de dirigentes piqueteros a la estructura del gobierno provincial. “La cultura planera está con Kicillof en la provincia. Se llevó a los piqueteros que ya no pueden intermediar en las políticas sociales nacionales. Los tiene contratados en la provincia, a Emilio Pérsico, Daniel Menéndez y varios más”, afirmó, y sostuvo que el oficialismo bonaerense utiliza el gasto público con fines políticos en lugar de reducir impuestos e incentivar la inversión.
En materia de seguridad, el intendente de Tres de Febrero afirmó que no se han registrado avances significativos en la provincia: “En ninguno de los temas sustanciales la provincia ha mejorado. No mejoró la educación, la salud, las rutas, la seguridad. Siempre están buscando una excusa nueva”.
Valenzuela también destacó el impacto de la presión fiscal en los municipios y destacó que la política de rebajar tasas y presión tributaria está funcionando. Puso como ejemplo el traslado que dispuso el Banco Nación de una sucursal del partido de La Matanza a Tres de Febrero, debido a que la intendencia del peronista Fernando Espinoza cobraba una alícuota de 7,5%, mientras que su distrito de 0,4%. “Me llamó la gente de la Asociación de Bancos (Adeba). Los bancos privados nacionales quieren traer una propuesta de créditos diferenciales más beneficiosos para familias y empresas del municipio, producto de que tienen una mejor condición para ofrecer sus servicios. Y hay un banco que va a dar préstamos a empresas del AMBA desde Tres de Febrero, porque registrándolos ahí, se paga la tasa más baja”.
La entrevista a Diego Valenzuela
– Hay mucho para hablar, pero quiero empezar con el cruce entre Milei y Kicillof por el tema seguridad. ¿Qué opinión tiene? ¿Qué piens sobre el pedido del presidente al gobernador para que se corra?
- Los intendentes, en los municipios de todos los colores políticos, nos vimos forzados a actuar en la seguridad, por más que no somos los responsables. Está el Ministerio de Seguridad, la Provincia, la Policía, pero los intendentes tenemos la presión social, la demanda natural y genuina de nuestros vecinos. Va mucho más allá de una cámara o una luz LED. Intervenimos directamente en el sistema de seguridad con móviles, pagando combustible, poniendo personal, que obviamente no es policial porque no pueden portar armas.
Lo que estamos necesitando es una actitud mucho más proactiva y firme de parte del gobernador. No nos alcanza con coordinar con la policía, porque esa policía requiere de respaldo, equipamiento, recursos. Nuestro planteo al gobernador es que hay que abandonar el zaffaronismo, hacerse cargo, ponerse al lado de las víctimas, interpretar lo que le está pasando a la sociedad, que realmente tiene miedo, que vive con mucho temor la diaria en un barrio del Conurbano.
¿Va a apoyar el gobernador la Ley de Reiterancia para frenar la puerta giratoria? ¿Va a apoyar una idea de reforma del régimen penal juvenil, para llevar a una edad y a un sistema como el que tiene la región? Eso no lo vemos. Más bien el gobernador está en la tesitura de que el problema no le llegue para no pagar un costo político, diluir la responsabilidad, cuando en realidad es naturalmente de la provincia.
Esto pasa, pese a que tenemos hoy una novedad muy positiva, porque antes no coordinaba Nación y Provincia y ahora sí. En el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner estaban peleados Sabina Frederic, Aníbal Fernández con Sergio Berni y hoy, la ministra Bullrich coordina con Javier Alonso.
Lo que falta acá es una actitud como la que hubo en Santa Fe: un gobernador, como Maximiliano Pullaro, que lidera el tema seguridad y que coordina con la Nación y con la Intendencia. Así Rosario se calmó. Falta eso y no sé si lo quiere o lo puede hacer, porque me parece que el gobernador con este tema tiene una traba ideológica.
– ¿Una traba ideológica que le impide atender el problema o por esa traba ideológica no se resuelve?
- Para ser capaz primero tenés que hacerte cargo y decir, “soy el responsable político de este tema”. A él es un tema que le resulta incómodo por situaciones ideológicas, la Policía la siente como algo ajeno o represivo. Las familias bonaerenses le están pidiendo “gobernador, cuídenos, ponga más recursos”.
Lo más fácil es lo que viene haciendo: tirar la pelota afuera, echar culpas y buscar excusas por la falta de recursos. La provincia está recibiendo toda la coparticipación que necesita por ley. Antes tenía fondos discrecionales que les mandaban por ser del mismo partido político Alberto y Cristina. Y aun así, la seguridad no estaba mucho mejor, porque es un tema de mirada.
– Ahora, déjeme hacer ahí un punto: presupuesto falta, más presupuesto necesita la provincia.
- En gestión siempre falta presupuesto, pero también hay que administrar lo que hay. Si decís tengo 100 y la seguridad es importante, la ponés primero. Uno podría decir ¿necesito un Ministerio de la Mujer o pagar para que la Ministra de la Mujer hable en una radio X a la tribuna ideológica propia, o lo pongo en más personal policial?
La provincia, los barrios del Conurbano, que es donde está concentrada la densidad y el delito. Tenemos un patrullaje que es escaso y hasta se perdió el caminante, que es el que circula por el centro comercial, las zonas de escuelas, los lugares de circulación de las personas.
El sistema de seguridad se retiró, se achicó y esto requiere de una decisión política proactiva, de invertir en este tema. Obviamente que si tenés recursos infinitos es mucho más fácil, pero antes que eso, para mí, está la mirada. Y encima Kicillof tiene la ventaja de que hoy la ministra está colaborando con la Provincia, a diferencia de lo que ocurría antes.
– ¿Está de acuerdo con lo que dijo el Presidente de pedirle a Kicillof que se corra y de la idea de la intervención?
- Hay un respeto al voto popular. Al gobernador lo han elegido los bonaerenses en la última elección, también a mí, y también a Milei. Entonces, cada uno tiene derecho a opinar en función de sus convicciones. Lo que me parece que dice el presidente, es “gobernador, reaccione, si usted sigue con esa fórmula, echando culpas y diciendo me faltan recursos, no vamos a solucionar este problema”.
El gobernador Pullaro no es del partido político de Milei y se pusieron a trabajar juntos y tranquilizaron la ciudad. Pablo Javkin, el intendente de Rosario, me contaba que él estuvo una semana sin dormir en Rosario porque estaba bloqueada la ciudad por los asesinatos. Entonces ahí coordinaron y tiraron el carro para el mismo lado. ¿Pero qué hace el gobernador Kicillof? Y por eso es correcto el planteo del presidente cuando le dice “reaccione o corrase”. Me parece que lo que le está diciendo es “póngase a trabajar y trabajemos juntos, pero pida ayuda con humildad y cambie la mirada hacia el control que están reclamando los vecinos”.
– ¿Hay que endurecer las penas para frenar esta ola de delitos?
- En algunos casos sí, en otros no. Hay que hacerlas cumplir. Lo de la puerta giratoria es complicado. A mí me pasa como intendente: se detiene a una persona que ya entró dos o tres veces antes, mucho delito juvenil. Lo otro que le pedimos al gobernador es convóquenos, vamos con predisposición con el mapa del delito, porque los intendentes sabemos dónde aprieta el zapato, tenemos que trabajar todos juntos en una dirección concreta.
La otra vez en el barrio Esperanza tuvimos un allanamiento con la Policía Federal y con la Justicia provincial. Se desbarató una banda que robaba autos de aplicaciones. Robaban uno tras otro, muchos autos por mes. Hasta que un día dijimos basta. Llevamos la denuncia donde correspondía y una banda con un montón de pibes jóvenes -algo doloroso- pero claramente delincuentes, con armas largas, con una actitud totalmente violenta. ¿Ante eso, qué? ¿Nos quedamos con la justificación de “pobre pibe”? ¿Por qué habrá caído en esto? ¿O nos ponemos del lado de la ley y del lado de las personas honestas que necesitan vivir tranquilas y actuamos en consecuencia?
– El intendente está pegadito al problema, al drama, ¿qué se está viendo en el territorio vinculado a la inseguridad y al tema de la minoridad? Hay chicos atraídos por bandas narco, transas, que están casi fuera de control.
- Sí, lo primero es el miedo. El miedo al motochorro, el miedo a abrir el portón, a meter el auto. Eso es lo que se vive todos los días en el Conurbano. La gente se compra un perro, ponen una alarma, toman todos los recaudos, pero aun así, sucede.
Los municipios tratamos de elevar la vara y ahora nosotros en Tres de Febrero estamos comprando armas no letales, incorporando 70 personas más al sistema de seguridad municipal, comprando diez autos blindados, 20 motos. Ayudamos con personal sin ser responsables de la Policía. Ahora nuestro límite es que no podemos reemplazar a la provincia de Buenos Aires. Los vecinos demandan, con mucha razón, que este es el tema número uno.
Y los menores, producto de una situación social, de una falta de cultura del trabajo, sin dudas hay que ir por la formación, por la educación, por la empleabilidad. Pero esto no quita -que es un poco lo que dice el presidente, “el que las hace las paga”- que hay que amoldar un nuevo régimen penal juvenil, para ayudar a estos chicos para que no sigan delinquiendo y que como única salida de su vida esté laburar para el narco o para el chorro del barrio.
Pero a eso hay que ponerle límite. No hay que ubicarse en una situación laxa de justificar al delincuente y al delincuente juvenil, sino poner un límite y también acompañar en lo que es social, educación, etcétera.
– Milei dice “delito de adulto, pena de adulto”. Hay un proyecto para bajar a 13 años la edad de imputabilidad. ¿Qué opina?
- Sí, hay que adecuar las penas a la gravedad del delito y bajar la edad de imputabilidad. En la región algunos están en 12, quizá no es tanto, pero 13 o 14, respecto de los 16 que tenemos hoy, porque claramente el chico que sale con 15 años a afanar con un arma sabe lo que está haciendo y por eso tiene que haber un régimen penal juvenil que lo contenga, pero que también prevea penas que permitan que ese chico no esté a los diez minutos afuera de nuevo.
El padre del chico acusado del horror de Kim Gómez dijo “no lo dejen salir de nuevo, no me vuelvan a llamar para decirme que me haga cargo porque no puedo”. Entonces ahí tienen que actuar las instituciones.

– Y no actúan hoy.
-Y hoy no actúan. Mira, a mí me ha pasado muchas veces que...
– No actúan cuando se proclama el Estado presente...
- Es que la idea del Estado presente lo que hace es justificar muchas veces al delito. “Como estamos ocupándonos de estos temas profundos, sociales, no nos ocupamos del presente y de la urgencia que tienen las personas hoy”. En realidad es ideológico. A mí me ha pasado tener que llamar muchas veces a fiscales o a jueces porque un joven delinque y va in crescendo en la violencia y lo sueltan. Los mismos vecinos me llaman y me dicen “Fulano está de nuevo haciendo las maldades que hacía siempre”. Y un día mata a alguien.
Entonces tenés que involucrarte como intendente, hacerle ver a la Justicia esa realidad que cuentan los vecinos para que se tomen recaudos, porque en ese in crescendo de violencia, un día hay un asesinato.
Tasas municipales y competencia tributaria
– Fue uno de los precursores de la idea de bajar tasas municipales frente al consenso de la política de que había que aumentarlas para tener más ingresos, hacer obras y dar servicios. ¿Cómo resultó esa experiencia?
- Viene muy bien. Soy de los que creen que menos impuestos es más trabajo y que funciona la curva de Laffer, ese famoso economista que vino una vez, hace poquito y estuve con él.
Funciona porque en la medida que tenés bajas tasas, no cobrás por habilitar, no tenés “tasitas” varias en los servicios públicos, que la gente no sabe lo que paga cuando paga luz o gas o la tasa en el combustible. Que cuando alguien abre un negocio, en lugar de matarlo de entrada, dejarlo laburar y habilitarlo sin costo económico. Todo eso hace que crezca la base imponible, la capacidad laboral del distrito y después sube la recaudación.
– Lo pregunto porque es una experiencia que lleva desde que asumió la Intendencia y me interesa de esta experiencia qué resultados tuvo.
- Funciona. 2400 habilitaciones sin costo. Muchas empresas que se han mudado o se quieren mudar y si no lo hacen es porque no encuentran el depósito del tamaño que necesitan. Empresas de los distritos vecinos que se mudan, porque al comparar, si vos pagás 0,7 de tasa en Tres de Febrero y 1,5 en el distrito de al lado y tenés que abrir un depósito ¿qué haces? Vas al distrito más barato, donde además hay una gestión que compaña, que facilita las cosas, que no pide coimas. Esto ha hecho que mucha gente habilite. Tenemos empresas que se están mudando y se trasladó la cartera comercial del Banco Nación de la sucursal.

– A ver.
- Y sí, porque esto no es partidario, no es porque hoy estoy trabajando con Patricia Bullrich y con Javier Milei. Esto es porque en Tres de Febrero pagan una tasa de 0,4% y en La Matanza pagaban 7,5%. Y eso lo tienen que trasladar a los créditos.
– Quiero hacer un punto ahí, porque el Banco Nación es una institución que depende del Estado y tiene también dentro de su menú para definir, la cuestión política.
-No. Obviamente se da que nosotros…
– El Banco Nación depende del Gobierno.
- Claro, pero no se hubiera mudado de Ramos Mejía a Ciudadela si hubiera tenido una tasa del 7,5% también. Si yo fuera un degenerado fiscal, la sucursal de Ramos Mejía no se venía a Ciudadela, vienen porque les conviene. Además de eso, soy una persona que está políticamente trabajando en conjunto con esta idea. Pero el meollo de la cuestión es dar una señal de que los bancos, las empresas, tienen que estar donde los tratan mejor, no donde los matan con las tasas. Porque al final del día no es una tasa a los bancos, es una tasa al crédito, que se traslada justamente al costo de los créditos.
Y no es solo el Banco Nación. Te voy a dar una novedad. Me llamó la gente de Adeba y quiere hacer lo mismo con Tres de Febrero. Los bancos privados nacionales quieren traer a Tres de Febrero una propuesta de créditos diferenciales más beneficiosos para familias y empresas del municipio, producto de que tienen una mejor condición para ofrecer sus servicios.
Y hay un banco -todavía no puedo decir cuál es- que me dijo “voy a armar un centro de préstamos empresariales en Tres de Febrero”. Van a dar préstamos a empresas del AMBA desde Tres de Febrero, porque registrándolos ahí, se paga la tasa más baja. A mí me conviene porque va a venir una cartera de créditos muy importante, a una tasa baja. Voy a recaudar mucho más y ellos van a poder dar créditos mucho más convenientes. La competencia tributaria y de gestión funciona. Está funcionando.
– Pongamos ahí un asterisco. ¿Qué significa la competencia tributaria?
- Hay una teoría de un economista norteamericano que se llama Charles Tiebout, que explicaba el concepto de “votar con los pies”. Cada uno vota con la mano en la urna, pero también con la elección de dónde vivís y dónde trabajás. Cada uno elige un lugar por sobre otro. Y esa elección tiene que ver con los bienes públicos que reciben y tiene que ver con las tasas o los impuestos que se cobran para dar estos bienes públicos. Esa combinación hace que uno elija vivir en un lugar o trabajar en un lugar.
La competencia hace que esas inversiones y ese trabajo vayan a buscar los lugares más atractivos para poder dar un mejor servicio, pagando menos tasas, porque al final del día, esto también baja la inflación. Y acá hago un punto: los intendentes no somos solamente el ABL, es decir las luces, la basura, la calle. También podemos influir en la economía, en el trabajo y en los precios. Si tenés menos tasas, hay menos inflación y hay más trabajo. Y por eso hago una invocación a los intendentes, porque podemos participar de la macro, de la economía más grande, con una política fiscal razonable.
– Además de los bancos, los supermercados también se quejaron de las tasas municipales y, de hecho, los responsabilizaron por los precios más caros.
- Los bancos, los supermercados, el combustible. En todo está pasando lo mismo. Ahora, cuando se decide cargar combustible, el consumidor averigua dónde cobran tasa vial y dónde no. Me pasó a mí en Esteban Echeverría, para no citar el caso de Tres de Febrero: hay una estación de servicio que tiene enfrente Lomas de Zamora y Almirante Brown. ¿Qué hizo el Estacionero? Muy vivo, una política comercial muy audaz sobre el precio de la nafta súper, porque está sobre el Camino de Cintura y hay muchos camiones, mucho laburo. Duplicó la venta de nafta Súper y él pudo poner un precio agresivo porque no paga tasa vial en ese municipio.
Ahí hubo una competencia tributaria con los municipios de al lado. Lo que digo: tengo una estación de servicio sobre la Avenida Márquez, el que pasa que va a San Isidro, San Martín o a los distritos del Sur, para en Tres de Febrero porque sabe y hay un cartelito en los surtidores. “Acá no pagás tasa vial”. Lo mismo hizo Ramón Lanús, que dijo “bueno, yo la voy a sacar”, y la sacó. No la tiene. Tampoco San Miguel, pero somos poquitos.
– ¿Pero eso no afecta la recaudación?
- Sube la recaudación, porque termina habiendo más trabajo, más actividad económica, más ventas, justamente por las tasas más bajas.
– ¿Los municipios que tienen tasas más altas son los municipios del kirchnerismo?
- Es así, pero no es concluyente, porque también hay tasas altas en algunos municipios del PRO -debo decirlo con total responsabilidad- también porque este es un tema que trasciende los partidos. Pero especialmente está en los municipios kirchneristas, donde hay una cultura política estatal, una idea de la caja, una idea del gasto público: “necesito más gasto para hacer más cosas, para darle más felicidad a la gente y para eso hay que cobrar más impuestos”. Sí, hay un patrón que tiene que ver, llamémosle así con el populismo o con el kirchnerismo, donde se da más recurrentemente.
Y los supermercados, cobran 6% de tasa de seguridad e higiene a los supermercados en Lanús, mientras que en Tres de Febrero es 0,8%. ¿Qué hicieron las cadenas? Hicieron juicio, porque en una tasa tan alta no hay una contraprestación justificada. Y además pusieron carteles diciéndole al que compra en ese municipio “acá los precios son más altos porque me veo obligado a trasladarlo”. Ahí también está funcionando la competencia tributaria, porque cuando tenés que ir a hacer la compra del mes y vas a invertir buena plata, vas a elegir un lugar. Quizá te vas a mover de municipio al de al lado para comprar más barato.
Los tironeos entre LLA y el PRO

– Hizo una mención al PRO. Estamos ahora entrando ya a la etapa electoral, a la etapa de definición de candidaturas, de alianzas. ¿Cómo está la relación de La Libertad Avanza y el PRO?
- Yo parto primero de la buena relación que me consta del presidente Milei con Mauricio Macri.
– Lo pregunto, porque ya tomó la decisión de irse del PRO y sumarse a La Libertad Avanza.
- Sí, y esa decisión fue muy razonada. Uno, porque creo que el votante del PRO y de Juntos por el Cambio apoya al Gobierno, porque hay un montón de gente del PRO colaborando en el gobierno, empezando por Patricia Bullrich, Federico Sturzenegger, Luis Caputo y muchos otros. Los votantes ya se unieron: la mayoría de los votantes de Juntos por el Cambio banca al Gobierno. Además, a lo largo del año, con la baja de la inflación y otros logros que hubo, eso se consolidó y hasta se amplió.
Me parece que los dirigentes no podemos estar ajenos a lo que quiere y a lo que hace la gente. El ciudadano de a pie quiere que ande bien este proceso de cambio que está liderando Milei. Desde ese lugar, los dirigentes nos tenemos que amoldar a la necesidad de la gente de que este cambio funcione. El cambio tiene que estar por delante de las personas y de los partidos.
Me consta la muy buena opinión que tiene el presidente Milei del ex presidente Macri. Lo he hablado con él y es público también. Lo que a veces cuesta es llevar eso a la práctica, a la realidad, donde confieso que, para mí, parte del inconveniente para tener un acuerdo como el que deberíamos tener de ir juntos en la provincia es lo que está pasando en la Ciudad. No voy a opinar de otra jurisdicción, pero me consta que muchos colegas del PRO quieren el acuerdo en la provincia de Buenos Aires. Lo buscan, lo pregonan, aparte lo dicen públicamente y es lo que deberíamos hacer para no tropezar con la misma piedra, porque separados ganó Kicillof.
Igual, hoy creo que La Libertad Avanza. Está muy firme, aun sin el PRO, hoy La Libertad Avanza en provincia es competitiva y puede ganar la elección.
– ¿Y puede ganar la elección? Después vamos a abundar sobre eso, porque es una opinión, puede estar fundamentada, pero…
- Mirando números.
– La opinión que tiene Milei sobre Macri no parece por las últimas declaraciones, equivalente a la de Macri sobre Milei. Trascendió hace pocos días que Mauricio Macri está diciendo que el Gobierno está, que en el Gobierno hay un triángulo de plomo, que hay un ancla de plomo.
- No sé, no me consta. Son trascendidos de reuniones. Sí entiendo que hay una incomodidad. Lo que digo es que Mauricio fue el presidente del cambio del 15 al 19 y Milei lo es de esta etapa. El que gana, conduce, el que pierde, acompaña. Y ahí tenemos que ver el ejemplo de lo que pasó en el Congreso.
El PRO, genuinamente y representando a su electorado, acompañó las políticas del gobierno nacional. Para mí, eso mismo -y hay que buscarle la manera- deberíamos hacer, por lo pronto, en la provincia de Buenos Aires, donde hay un montón de dirigentes y de intendentes muy valiosos del PRO, que creo que aportaría mucho dentro del esquema de cambio que hoy conduce Milei y que para mí es clave, porque se legitimó en internas la presencia de Patricia Bullrich en este esquema político.
– Pero respecto a Patricia Bullrich, lo que hay y lo que se ve públicamente son choques verbales.
- Chispazos.
– Chispazos terribles de Patricia Bullrich con Macri Mauricio, y con Macri Jorge, y con toda la dirigencia del PRO que le responde. El tema de los presos es uno de la fuga de presos de la ciudad fue apenas un tema, pero hay una diferenciación y críticas muy duras contra Patricia Bullrich.
- Yo a veces pienso esto ¿qué pasa en el PRO que las dos personas que compitieron en elecciones por la candidatura presidencial, Horacio y Patricia, hoy están en una situación discordante con Mauricio y con la élite tradicional del PRO? Tenemos que hacer esa autocrítica. ¿Algo pasó, no? Que los dos candidatos -y Patricia prevaleció con su postura en la interna- los que representaron al PRO de esa época hoy están por caminos divergentes con el partido. Y esos caminos, para mí, son los caminos, por lo menos en el caso de Patricia, el camino de la gente, lo que la gente votó, lo que la gente sostiene. Parte del problema es quizá no haber sopesado que Patricia es una dirigente de mucho nivel, de volumen político, con una legitimidad electoral de haber ganado una interna. Ella no puede ser dependiente de otras personas. Ella tiene la autonomía que se ganó con las elecciones, porque la política es resultado de la legitimidad electoral.
– Patricia Bullrich va por el camino de la gente. ¿Mauricio Macri está yendo por otro camino?
- Yo creo que él tiene su mirada, su interpretación de lo que quiere la gente y de lo que necesita el PRO. Y ahí es que digo: primero el rumbo, el cambio, consolidar este momento de baja inflación, de reactivación, que finalmente con su heterogeneidad fue reactivación en V. El país está mejor. Hay que consolidar eso en elecciones y no podemos poner una intención personal o partidaria por delante de este rumbo, que puede ser una bisagra histórica en el país. Simplemente eso.
– ¿A ver?
- Me parece que hay que apostar, más allá de los partidos políticos, a que los partidos se adapten a lo que necesita la gente. Hoy la gente quiere que esta experiencia política salga bien.
– Lo que plantea Mauricio Macri y su grupo cercano es que si no tienen esta posición defensiva, el PRO desaparece, pierde su identidad, deja de ser un partido y termina absorbido por La Libertad Avanza.
- Pero los partidos son “medios para”. No son un fin en sí mismo. Obviamente, el PRO se integró en Juntos por el Cambio y el radicalismo también y no se agotaron como identidad política.

– La Libertad Avanza está planteando una posición distinta. No es la posición que tenía el PRO de integrar.
- Es que también pasaron cosas a lo largo del tiempo, cosas que generaron divergencias. Quizá muchos pensaron que al Gobierno le iba a ir mal, que iba a necesitar ayuda, que alguien iba a entrar y los iba a intervenir porque no tenían capacidad de gestión, porque no iba a funcionar el plan económico. Pero funcionó y se fortaleció. Y el presidente tiene la lapicera y es el que toma las decisiones y él quiere un acuerdo y después está en todos los dirigentes que pueden ayudar -y yo me anoto en esa lista- a que ese acuerdo se dé. En algunos casos puede ser acuerdos por provincia. En otros casos puede ser una integración a La Libertad Avanza. Hay muchas maneras de hacerlo, pero lo importante es apoyar el cambio.
– ¿Entonces la idea es que Mauricio Macri debería alinearse y seguir el liderazgo de Javier Milei?
- Voy a poner un ejemplo. ¿Alfredo Cornejo va a dejar de ser un referente radical y un muy buen gobernador de Mendoza porque está trabajando en coordinación con el Gobierno? El otro día estuvo con Caputo, trabajando juntos por el desarrollo de la minería en la Vendimia. Ahí seguramente se trabajará en un acuerdo entre La Libertad Avanza, Cornejo y Petri. Para mí ese debería ser el camino, buscar la manera de trabajar juntos los que pensamos muy parecido.
– No me respondió. ¿Tendría que alinearse Mauricio Macri al liderazgo de Milei?
- Creo que tendríamos que buscar todos, incluido Mauricio, la fórmula para trabajar juntos. También respetando al que votaron los argentinos, que es el presidente Milei.
La pelea del peronismo

– Decía recién el riesgo de ir separados y la posibilidad de que termine ganando el kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires. ¿Qué mirada tiene sobre lo que pasa en el kirchnerismo y la pelea que hay entre Cristina, Kicillof y La Cámpora?
- Primero hay que decir que no hay que subestimar al kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires, desde ya. Hoy tienen una interna feroz entre ellos y vamos a ver cómo se acomoda. El gobernador tiene una obsesión con Milei y otra con Cristina. Para mí anticipó mucho la discusión del 2027 con Cristina.
– Explíqueme esa idea un poco más.
- Claro, hoy (Kicillof) está tratando de emerger de la elección del 2025 como el candidato para el 2027. Y esto no es bueno, porque los bonaerenses necesitan un gobernador resolviendo los problemas, no dando internas partidarias. También están los intendentes peleados entre ellos y no se sabe cuándo votamos, si se desdoblan las elecciones. Está muy compleja la situación en la provincia... No hubo presupuesto.
Así que ahí lo primero es... que se ordenen, porque tienen la responsabilidad de gobernar. Y lo segundo es que nosotros tratemos de unir todo lo que tenga una idea de cambio, pero sin amontonar.
Lo importante acá es el rumbo. Si vos me decís que se arrima un intendente X y es un degenerado fiscal, te va a decir Karina Milei y Sebastián Pareja que No. No, porque acá tiene que haber un rumbo claro y no podemos estar en esto de amontonar y que venga alguien y ponga condiciones y diga “quiero tantos diputados para poder estar”, porque eso vulnera el rumbo.
Hoy el rumbo es más importante que una ampliación que sea un amontonamiento, porque además los legisladores emergentes de esta elección -tanto nacionales como provinciales- tienen que tener claro el apoyo al rumbo, no que después hay que levantar el teléfono a ver si van a acompañar o no tal reforma que quiere hacer el Gobierno.
Creo que La Libertad Avanza, que es un liberalismo popular, pudo penetrar en muchos sectores sociales de laburo. No es el proyecto político de los unicornios, sino también de los repartidores de pizza y de los laburantes y los comerciantes de barrio que quieren esto: que el Estado le saque la pata de encima al que labura: menos impuestos, más simplicidad, menos casta, menos privilegios. Y esto hace que el proyecto de La Libertad Avanza para mí penetre en muchos sectores donde nunca penetró un proyecto tradicional de centroderecha estilo la UCeDé y hasta te diría el PRO. Y este es un potencial para discutir competitivamente.
–¿Del PRO? ¿Por qué?
- Porque en general el PRO tenía más una tipología de voto vinculada a las personas de mayor edad y de mayor nivel socioeconómico. Me parece que el fenómeno Milei trasciende esas fronteras y hoy, ya con una economía que está mejor, lo lleva a una competitividad electoral en la provincia de Buenos Aires, que es un terreno desde ya difícil. De los más difíciles de todos.
– En las elecciones anteriores, en las tres, ganó el peronismo. Ganó en las PASO, ganó en la general y también ganó en el balotaje.
- Recordá que en el balotaje ganó Massa por un punto y medio.
– Pero ganó.
- Pero ganó y pasaron cosas desde entonces hasta hoy: hay un gobierno consolidado, con una economía que está mejor, que se está reactivando, que bajó mucho la inflación. Después podemos discutir 200 temas pero si la economía se ordena, hay más laburo y sigue bajando la inflación, eso creo que va a dar. Va a tener un impacto en la política y en lo electoral muy importante, inclusive en los sectores más populares, que este es el fenómeno nuevo que trae Milei en sectores populares y en jóvenes.
– ¿Habla de sectores populares y sectores de clase de baja media?
- Clase media baja de laburo, pero con cultura del trabajo. No con cultura planera. Y eso me parece que es una novedad para un proyecto de este tipo.
– ¿La cultura planera donde está?
- Y con Kicillof en la provincia. Vos fijate que se llevó los piqueteros que ya no pueden intermediar en las políticas sociales nacionales. Los tiene contratados en la provincia a Emilio Pérsico, Daniel Menéndez y varios más. Ellos usan el gasto público para hacer un armado político, en lugar de hacer lo contrario, que es achicar el gasto público para bajar los impuestos y que haya más inversión y más trabajo.

– Entrando ya en el final del reportaje y volviendo al acuerdo electoral: ¿tiene que haber una sola lista entre LLA y el PRO, tener una sola marca o los dos partidos? ¿Cómo debería ser?
- Creo que tiene que ser una sola lista, desde ya, y sin PASO. Me parece que es muy probable que se saquen las PASO de la provincia de Buenos Aires, también.
–¿Hay que sacarlas? Ya la Nación sacó las PASO.
- Sí, sí, porque me parece que es una encuesta cara. Y las sacó Nación, las sacó la Ciudad y me parece que los partidos tienen que madurar. Tenemos que buscar cada uno en su espacio la forma de elegir candidatos y no tirarle el fardo a la gente en una elección adicional.
– ¿Entonces hablamos de una sola lista con La Libertad Avanza de nombre?
- Sí. La Libertad Avanza, donde puede haber incorporaciones, presencias de identidades que sean coincidentes con el rumbo. Más parecido a lo que fue la elección de 2013 de Sergio Massa. Además, hoy es la marca valorada por la gente, es la transformación disruptiva, es eliminar privilegios, desregular, cortar curros, bajar la inflación. Si nosotros queremos ganarle al kirchnerismo, tenemos que apostar fuerte por este momento político que representa muy bien La Libertad Avanza.
– En la Ciudad de Buenos Aires parece que la posibilidad de un acuerdo está casi terminada y que van a una pelea abierta entre La Libertad Avanza y el PRO. ¿Esto puede contagiar o puede terminar condicionando un acuerdo en la Provincia?
- Sí, puede condicionar. Espero que esa competencia no llegue a contagiar, porque yo no lo llamo pelea. Si bien son ásperas, a veces las competencias políticas y electorales…
– Hay que avisarles a los muchachos porque hoy se están peleando.
- Hay una diferencia sustancial para el PRO: en la ciudad gobierna y en la provincia no, entonces es más natural que podamos estar juntos, porque todos queremos reemplazar y ganarle al kirchnerismo en el 2027.
No hay una diferencia de fondo en ese sentido. Así que ojalá, si hay competencia en la ciudad, pueda haber una inteligencia, una humildad y una sabiduría para separar una cosa de la otra. Decir “esta es una elección local donde se compite”, y ojalá se puedan integrar personas valiosas si así lo deciden Sebastián Pareja y Karina Milei.
El otro día estuve presente con Sebastián Pareja cuando se incorporó Segundo Cernadas y todo el equipo -siete concejales que vienen del PRO y uno es radical, de Tigre- en un distrito donde hay un intendente que hizo un buen trabajo, pero con una crisis política con el massismo. Segundo y su equipo pueden ser una buena alternativa para el 2027 y hubo un equipo muy proactivo para que eso se dé, como pasó en Capitán Sarmiento o en otros lugares. Hay que buscar la fórmula con otras personas para poder trabajar juntos en la provincia de Buenos Aires. Independientemente de lo que suceda en la ciudad.
– ¿Si pudiera decirle a Macri Mauricio cómo encontrar un acuerdo para que el PRO y LLA, en la ciudad, la provincia y en Nación puedan confluir, cuál sería el argumento?
- Como pasa en muchas provincias, que mirar cada elección en función de los intereses provinciales. No hay una cosa general, es lo mismo que decía antes de Mendoza o puedo decirlo de Buenos Aires, donde en general estamos todos de acuerdo en ganarle al kirchnerismo y salir de esta etapa de populismo. Si se puede o no, es algo que a mí me excede, pero yo creo que hay que hacer el intento, pero sin condicionamientos, sin pedidos que estén por fuera de una lógica y de una razonabilidad, y sin vulnerar el rumbo.
No es una cuestión de amontono cosas diversas, porque así nos fue en la etapa de Mauricio. Se armó, por ejemplo, un sistema económico de gestión de la economía divergente, con Prat-Gay y Sturzenegger que no se hablaban y que no iban para el mismo lado. Ahora hay que ir para el rumbo que están planteado desde el Gobierno nacional enchufando la provincia a eso. Y ese tiene que ser el vector que ordene lo electoral.
– Las últimas dos. ¿Diego Valenzuela cómo se ve para el futuro? ¿Como candidato a gobernador, como un dirigente que va a colaborar en el ámbito nacional? ¿Qué planes tiene?
- Primero, mi futuro inmediato es casi tres años por delante de intendente de Tres de Febrero, donde tengo un montón de cosas.
– No me tira la pelota afuera.
- No la tiro, desde ya, pero tengo muchas cosas para hacer en Tres de Febrero y ahora siento que, alineado con el gobierno nacional, las voy a poder hacer, como planes de vivienda, como parque industrial.
– Planes de vivienda… es un sacrilegio para el Gobierno Nacional.
- Planes de vivienda con financiamiento privado. Movilizando tierras fiscales municipales con la Administración de Bienes del Estado (ABE), con la iniciativa privada, que es el paradigma de la época.
– No sería dar créditos.
- La vivienda con obra pública presupuestaria, cuando no hay plata, termina en inflación. Y en general son poquitas viviendas, que no resuelven el déficit habitacional y que muchas veces se terminan dando con discrecionalidad política. ¿Vos sabés dónde están la mayoría de los planes de vivienda y de vivienda social que hizo el gobierno anterior? En Avellaneda y en Lomas de Zamora. Ese no es un buen camino.
La discrecionalidad política, la inflación, recursos del Estado que no hay. Así que hay que ponerse creativos y yo creo que lo podemos hacer. Lo otro es ser parte del equipo que recupere la provincia para el cambio. En el lugar en el que esté lo dirá el tiempo. Sí, estoy muy proactivamente trabajando, con el presidente, con Patricia Bullrich, con Karina Milei, con Sebastián Pareja, mirando el territorio, aportando.
Acá no hay una competencia, hay un equipo donde hay roles claros y el armado de la provincia de Sebastián Pareja, y yo trabajo para que esto salga bien. Obviamente, tengo la vocación de ser protagonista de ese equipo que recupere la provincia en el 27 y me siento con ganas, con experiencia, con capacidad de estar en un lugar relevante, pero no quiero poner el carro delante del caballo.

– ¿Cómo está viendo la actualidad? En estos días pasó lo de los jueces de la Corte, el tema $Libra, el incidente en la apertura de sesiones, ahora el FMI.
- Primero que en muchos cambios y reformas que el Gobierno quiere hacer o designaciones como la de la Corte, el límite que a veces tiene el Gobierno es su limitación legislativa. Ha hecho bastante con tan pocos diputados y senadores. Bastante, en términos de leyes, de enfrentar un sistema de bloqueo que se planteó desde el kirchnerismo con aliados de Juntos por el Cambio: caso de jubilaciones y universidades. Bastante bien le fue al Gobierno con ese 10% o 15% que tiene de senadores y de diputados.
En el caso de la Corte, no es un tema que conozca a fondo, pero está siguiendo el camino institucional que puede seguir con la condición legislativa que tiene y de acuerdos que tiene. Creo que va a aprender el presidente y lo dijo públicamente con esto de los filtros, de lo que pasó con el tema $Libra, del lugar que él tiene y de la importancia a veces de poder sopesar quién se acerca y con qué ideas, por más buenas intenciones que uno tenga.
Los que gobernamos siempre estamos difundiendo ideas que creemos que son buenas para el crecimiento, para la inversión y para el laburo. Estoy seguro de que el presidente obró de buena fe tratando de difundir una idea de la nueva economía, que es una economía todavía que no entendemos y que es muy volátil…
– Y que es también terreno fértil para bandidos.
- Sí, claro. Por eso hay que tener cuidado, prudencia y esos filtros. Me parece que de estas cosas se aprenden. Milei es un presidente outsider, que nunca se imaginó que iba a llegar a la presidencia en este tiempo y con las pocas o muchas herramientas: las de las ideas, las de las redes, las de su audacia. Lo que veo es que el Gobierno está muy bien enfocado en lo verdaderamente importante, que es la reforma económica que necesita la Argentina. Bajar la inflación, que haya actividad económica, achicar el gasto para bajar impuestos, poner a la Argentina en el mundo. En eso vamos muy bien y eso es lo sustancial.
– Y la del final, ¿qué balance o calificación puede dar de la gestión de Kicillof, sobre todo teniendo en cuenta que es intendente y lo vive o lo sufre todo el tiempo?
- Yo intenté tener la mejor relación posible con él. En la última elección, lo llamé para saludarlo. Yo me reelegí y él también. Le dije ¿tomamos un café? Pero nunca sucedió. Tiene una idea de la política de amigo-enemigo, de no escuchar al otro, de querer imponer. Primero era “ah, pero Macri” y ahora es “ah, pero Milei”.
Monologa, critica, es muy difícil construir un acuerdo sobre determinados temas con esta mirada que tiene, que es de un joven -no tan joven, porque tenemos la misma edad- de ideas marxistas en un centro de estudiantes de la UBA. Eso, convertido en gobernador de la provincia de Buenos Aires, hace difícil, en una provincia grande y compleja la búsqueda de acuerdos. Nunca pierdo las esperanzas, pero sí digo, con esta praxis política es difícil.
Además, en ninguno de los temas sustanciales la provincia ha mejorado y siempre está buscando una excusa nueva. No mejoró la educación, la salud, las rutas, la seguridad, que son los temas sustanciales. Y ha tenido oportunidad, porque su primer mandato fue con un gobierno de su espacio político, donde le daban de todo, por decisión de Cristina. Y así estamos penando para que no nos maten cuando abrimos el portón de nuestra casa en el Conurbano.