Durante su discurso en el Foro Económico Mundial de Davos el jueves pasado, el presidente Javier Milei cuestionó la ideología de género y el feminismo radical. En ese sentido, el ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, acompañó los dichos del mandatario y aseguró: “Se acabó la joda del género, viste. Acá somos todos iguales, somos todos iguales ante la ley.”
En una entrevista con Daniel Parisini, alias “Gordo Dan”, el funcionario de Gobierno cuestionó el rol de la Justicia y deslizó: “¿A quién hay que proteger?, en la concepción de Javier, que yo comparto, hay que proteger a los vulnerables, a los niños, a las personas mayores y el centro de la familia.”
“Cuando hablo del Código Penal, de la realidad, que se acabó el delirio, se acabó la puerta giratoria. La gente quiere justicia”, añadió.
Días atrás, Cúneo Libarona había anticipado, a través de un posteo en X, que iban a eliminar la figura de femicidio del Código Penal, y utilizó los dichos de Milei para acompañar la iniciativa: “El feminismo es una distorsión del concepto de igualdad que únicamente busca privilegios poniendo a una mitad de la población en contra de la otra”.
Durante su conversación en el programa “El Despacho”, se refirió a los fallos sobre violencia de género como “disparates” en donde dan “batalla dura de la mujer y después resulta que son todas denuncias falsas”. “Eso me indigna”, apuntó.
“Las denuncias falsas en materia de género producen un daño tremendo. El pobre imputado de una denuncia falsa pierde el trabajo, la sociedad lo condena. No nos saludan ni los amigos. Es terrible. Y después se descubre que es mentira. Al hijo no lo pudo ver más, y después se descubre que es mentira”, fustigó el titular de la cartera. En cambio, sostuvo que la pena máxima debe ser aplicada en casos que sean “violaciones aberrantes o estén probadas.”
A mediados del 2024, el Gobierno anunciaba el cierre definitivo del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades, que funcionó durante la gestión de Alberto Fernández. El Comunicado oficial señalaba en ese entonces que había sido “creado y utilizado por la administración anterior con fines político-partidarios para propagar e imponer una agenda ideológica, contratar militantes y organizar charlar y eventos”, adelantando de esta manera una postura clara sobre las decisiones futuras.
Al respecto, el jefe de la cartera de Justicia consideró la creación del organismo como un “negocio impresionante”. “Planes de género, más de 30 y pico de planes, fortuna gastada en género, fortuna que tendría que haber sido destinada a fines realmente útiles. No en ‘blef’ de género” acusó.
Además, el funcionario relató las condiciones en la que recibió el Ministerio de la Mujer, cuando asumió el cargo. “Tenía mil personas, voy al lugar ... 70 trabajaban”, señaló y prosiguió: “¿Y los otros dónde están? ¿Ustedes tienen contacto? ¿Están haciendo planes? ¿Qué están haciendo?“, preguntó el magistrado. A lo que respondió: “Se habían designado hace tres meses a la gran mayoría. Me duró dos meses el Ministerio de la Mujer. Y encontré, no un elefante, una manada de elefantes”, metaforizó.
Sobre lo expuesto, el funcionario se refirió a un episodio anecdótico que ocurrió en una de las áreas del organismo. “No la sabe nadie”, reveló.
“Una noche, en Derechos Humanos, de repente baja el subsecretario y ve un varón y una mujer que van corriendo con una toallita saliendo de un baño y se metían en un cuarto, y los sigue”, describió. Ante la pregunta del empleado, las dos personas indicaron que se estaban quedando allí porque vivían lejos, motivo por el cual les recriminó: “Pero ustedes están con colchones, con bolsas de basura. Ustedes viven acá”. “Y sí. Vivían ahí. Estaba usurpado”, recordó el funcionario.