Más de medio año después de la dura lesión en el tobillo que la dejó fuera de las canchas, Alexandra Llaro volvió a vestir la camiseta de Regatas Lima y su regreso no pudo ser más auspicioso. La atacante de 25 años reapareció este domingo 23 de noviembre y se convirtió en una de las piezas clave de la remontada de su equipo ante la Universidad San Martín por la fecha 5 de la Liga Peruana de Vóley 2025/26.
En mayo, durante las semifinales ante Universitario de Deportes de la temporada pasada, la punta chorrillana sufrió un fuerte golpe que no solo la dejó fuera del tramo final del torneo, sino que también la obligó a presenciar la final contra Alianza Lima desde una silla de ruedas, acompañando a su equipo desde la banda. Ese momento, que partió el corazón de más de un hincha ‘celeste’, parecía haber detenido su ascenso.
Sin embargo, Llaro volvió oficialmente a las canchas el último fin de semana y lo hizo con una actuación que recordó por qué su nombre siempre fue sinónimo de impacto inmediato en Regatas. Su reaparición no pudo llegar en un escenario más intenso: el clásico ante San Martín, un partido que comenzó cuesta arriba para sus compañeras, pero que terminó convirtiéndose en una de las remontadas más emocionantes de la campaña.
Alexandra aportó 12 puntos, ingresando en un momento crítico del encuentro y cambiando por completo la energía del equipo chorrillano. Tras el triunfo, la atacante compartió sus sensaciones con la prensa local, consciente de que este regreso, luego de más de medio año alejada de la competición, representa un hito personal y deportivo.
“Estaba ansiosa por cómo iba a empezar, porque después de siete meses no jugaba un partido oficial. Entré bien, en medio de un momento complicado, pero me apoyaron un montón las compañeras y estoy feliz porque siento que lo hice bien. Todos me lo han dicho”, señaló la jugadora, reconociendo que su retorno no estuvo libre de nervios.
El impacto positivo de Alexandra Llaro
Alexandra Llaro también habló del proceso de readaptación al equipo en esta nueva temporada. “El campeonato es super largo, todavía queda mucho tiempo. Al inicio es un poco difícil compenetrarse con un nuevo equipo, pero poco a poco estamos uniéndonos un poquito más. El campo es diferente a la liga pasada y eso influye. Estoy muy feliz, porque estamos compenetrándonos en el juego; afuera nos llevamos todas muy bien”, expresó.
El partido contra San Martín arrancó cuesta arriba para Regatas, que cedió los dos primeros sets. Sobre ello, Llaro explicó lo que sintieron dentro de la cancha: “Nos faltó un poco de decisión porque entramos un poquito tibias, pero ya luego decidimos jugarlo, darlo todo y que el partido no acaba hasta que pita el árbitro”.
Sobre el impacto que su presencia pudo haber tenido en el desarrollo del partido, fue humilde, aunque reconoció que su ingreso coincidió con el cambio de rumbo. “No sé si fui la motivación del equipo, pero sí por ahí cambiaron un poquito las cosas. Igual esto es de seis, de siete con la líbero, y todas nos unimos y dijimos: ‘no hay más, hay que jugarlo ahora porque estamos perdiendo’. Entonces lo hicimos y ganamos”, afirmó.
El regreso de Alexandra Llaro no solo devolvió potencia ofensiva a Regatas, sino que también sumó liderazgo, carácter y un mensaje de resiliencia para un plantel que busca volver a pelear el título nacional. Su actuación, determinante en la remontada ante San Martín, reafirma que está lista para recuperar el protagonismo que la lesión le arrebató.
