En la segunda mitad del siglo pasado, cerca de 10 mil árabes llegaron al Perú provenientes de tres lugares: Líbano, Siria y, en una mayor proporción, Palestina. La mayoría de estos inmigrantes encontraron en el país una oportunidad para empezar de nuevo y dejar atrás la violencia en su región de origen. De uno de los barcos que anclaron en las costas peruanas, desembarcó la abuela de Emilio Saba, Susan Ode.
La familia Saba se instaló en Lima y Emilio se decantó por jugar fútbol desde muy joven. Su padre lo llevaba a los recintos capitalinos y se inició en el Esther Grande de Bentín. Su paso por esta institución influyó luego para unirse a las filas de Melgar, donde coincidió con Marco Valencia. Sus buenas actuaciones lo llevaron a integrar el plantel sub-23 de la selección peruana en el Preolímpico rumbo a París 2024. Portó con hidalguía la cinta de capitán.
Fue, incluso, considerado por Juan Reynoso en el combinado nacional mayor. Luego, perdió rodaje hasta asentarse como defensor en Sport Boys en el segundo semestre del 2025. Recientemente, ha tomado una decisión que cambia su vida drásticamente. Representará a la nación de sus abuelos. El 15 de noviembre, en el estadio de San Mamés en Bilbao, posiblemente se estrene con el seleccionado de Palestina.
El encuentro marcará un duelo en que lo futbolístico pasará a un plano secundario. Bilbao, junto a otras ciudades europeas, es un bastión del rechazo y muestras de apoyo al pueblo palestino. Distintas organizaciones califican como genocidio la ofensiva israelí en Gaza, producto de los ataques terroristas de Hamás el 7 de octubre del 2023. Saba es consciente y está al tanto. Espera que sus padres puedan asistir a las graderías de San Mamés.
-¿Cómo han sido estos días? ¿Cómo te has sentido a raíz de la convocatoria?
Muy contento. Es un orgullo poder representar a Palestina, país donde tengo ascendencia gracias a mi padre. Y bueno, es, es un orgullo para mí poder representar al pueblo palestino.
-Tu padre se llama igual que tú, Emilio Saba
Correcto.
-¿Sabes cómo llegaron tus abuelos a Perú? ¿Conoces la historia?
Llegaron a raíz de la situación complicada de la guerra. Llegaron en barco. En bote creo que son treinta días. Mi papá nació acá en Perú. Sus dos papás son cien por ciento palestinos. Igual siempre digo que mi papá y yo somos peruanos, yo nací acá, mi papá nació acá, somos peruanos, amamos el Perú. Pero también Palestina, es parte de mi identidad, como lo es Perú.
- Con tu abuela Susana empieza esta aventura.
Sí, Susan Ode. Todos los árabes que viven en Perú y los apellidos son Ode, Saba, Fara, Abusada, Sansur, Majluf, por una razón nos decimos primos porque vivíamos en un pueblo que se llama Beit-Jala [en la Cisjordania ocupada, donde Israel construye asentamientos ilegales desde 1967]. No es que seamos primos de sangre [entre risas], pero como que nos decimos así en la comunidad palestina peruana que hay acá. Y hay un montón de palestinos en Chile, en Argentina.
-En Chile la comunidad es muy fuerte.
La comunidad es muy grande, sí. Creo que hay cerca de tres millones de personas.
-En Argentina, entiendo que la comunidad de Palestina es fuerte, pero la comunidad de judíos es mayor.
Sí, hay bastantes judíos. En Chile tenemos hasta un equipo de fútbol [Club Deportivo Palestino, que milita en la Primera División].
-¿Conoces algo del idioma árabe?
No, no conozco el idioma. Mi abuela lo habla perfectamente, mi papá algo. Y entiende. Yo nada, cero.
-¿Y qué has podido conocer tú acerca de toda la historia de Palestina? ¿Qué tan al tanto estás?
Muy al tanto. Siempre me informo, siempre leo. Bueno, no solamente yo, sino mi familia. Todos están muy comprometidos con el tema. El tema de ahora es lo que está pasando en Gaza con Israel. Es un tema que afecta bastante a la familia, sobre todo a mi abuela. Es su país. Yo creo que a todo el mundo también, porque que esté muriendo gente así le afecta a cualquiera. Cualquier ser humano que ve esas imágenes y escucha todo, la verdad es que se está muriendo gente todos los días y es horrible. Pero bueno, esperemos que se acabe, que encuentren una vuelta a la situación. Que se arregle esta situación horrible. Y en el tema del fútbol, poder, Dios quiera, darle una mínima alegría al pueblo. Ya sea una distracción o algo que dudo que pueda reparar por completo, pero por lo menos darle una alegría que se sientan por lo menos un poquito contentos de lo que es Palestina y poder representar ese país, ese pueblo tan herido.
-Al tener la ascendencia palestina, ¿qué tan complicado es? Porque es como que yo como peruano estuviera en otro país y Perú no fuera reconocido como un país en realidad. Porque no es que podamos ver que tenga un gobierno definido, más allá de que haya apoyo de muchos países y que vea peruanos morir. Literalmente es así la analogía.
Es así. Palestina sí tiene un gobierno [la Autoridad Nacional Palestina, miembro observador en las Naciones Unidas]. Estados Unidos no lo reconoce como país.
-Me refiero a una institución como tal definida [la Franja de Gaza es controlada por Hamás, agrupación terrorista que ganó las unas elecciones por primera vez en 2006]
Hay bastantes países que sí lo reconocen como país [147 de los 193 Estados de las Naciones Unidas]. Hay muchas cosas detrás. Hay muchos conflictos de intereses detrás de parte de Israel. Se cometen cosas inhumanas. Matan niños, matan gente inocente tirando bombas y bombas. Gaza está 85 % destruido. Sí, es como el ejemplo que tú hiciste. Es como: que tú te vayas de acá porque hay una guerra horrible y están destrozando el país y de acá a setenta años tengas nietos y tu nieto representa hoy al Perú. Y solamente se ve a Perú por las fotos y eso, pero no se sabe si es así, es, es, es básicamente así. Es la misma situación en la que yo me encuentro.

-¿Y cómo es una reunión familiar en este contexto? Me imagino que muy sentida
No tratamos de no hablar mucho del tema. Mi abuela y mi bisabuela, que están vivas, siguen hablando del tema. Tienen familia en Gaza. Tienen primos. Mi abuela tiene primos hermanos, mi bisabuela también. Entonces, les afecta mucho porque mi abuela se vino cuando tenía, si no me equivoco, quince años. Y mi bisabuela, bueno, ahora habrá tenido más de treinta. Es un tema que se trata de no tocar en la mesa. Pero sí tenemos todas las costumbres de las comidas.
-Como el maklube
Como el maklube, como el ajo de parra, como shishbarak, como todas las comidas que hay.
-Eso con respecto a la gastronomía, ¿qué otras costumbres tienes árabes?
-Bueno, yo creo que los árabes son bien familiares. Yo creo que la familia. La familia es sagrada. Todos los domingos son familiares, un poco como acá. En Navidad hacen una tradición que es la guerra de huevos. Es una tradición bonita. Más que todo, la tradición son las comidas. Que son buenas, la verdad.
-¿Y la familia, en este caso, qué papel cumplió para que tú te termines decantando por esta decisión de representar a la selección de Palestina?
Muchísimo. Mi papá, orgulloso de que yo represente a Palestina. Mi abuela también. Toda la comunidad de Palestina peruana creo que está pendiente de mi desempeño y todos deseándome que me vaya bien. Creo que soy el primer peruano que va a representar a Palestina profesionalmente en fútbol y causa ilusión porque todos nos conocemos, todos somos amigos, todos somos parte de esto.
-Cuéntame cómo fueron los contactos
Ellos me comenzaron a contactar en 2023. Y a raíz de eso yo comienzo a tener un diálogo con Palestina, pero en el 2023, yo estaba de capitán con la sub-23 de Perú. Entonces era una decisión complicada en general. Yo soy peruano, pero también soy palestino, también es parte de mi identidad. Entonces fue una decisión difícil. Amo a Perú, amo Palestina y no fue fácil, pero terminé optando por Palestina, también está la parte del corazón. Creo que era más una realidad en ese momento y terminé tomando la decisión y la verdad es un honor para mí representar a Palestina.
-¿Te sedujo también el proyecto de jugar Copa Asia y de clasificar a un Mundial también?
Claro. O sea, todo lo que implica el Medio Oriente hoy en día y la Copa Asia, la Copa Árabe, el mundial. Todo eso, obviamente, tiene su parte en la decisión. Pero más que todo era el honor de poder representar a Palestina. Más que todo, más que cualquier cosa que pueda obtener, es el honor de representar al país.

-¿Y veías los partidos de las Eliminatorias? Quedaron muy cerquita
Sí, estuve al tanto. No encontré cómo verlos, pero estuve al tanto. Contra Omán y Kuwait. Los últimos partidos estuve al tanto, pero no logré verlos en vivo.
-En ese momento ¿ya estaba la decisión tomada o no?
En ese momento no estaba la decisión tomada. Me llamaron para jugar esos partidos, pero todavía no había tomado mi decisión.
-No lo digo como dueño de la verdad, sino me remito a los hechos que también conoces, ¿eres consciente de la decisión de representar a un pueblo tan golpeado? ¿eres consciente de la decisión, de, de la responsabilidad que conlleva?
Sí, claro. El pueblo palestino ha sufrido muchísimo. Está sufriendo muchísimo. Esperemos que representar al país en el fútbol, que sea lo mínimo, porque el fútbol es lo más importante de lo menos importante. Nada me haría más feliz que sacarle una sonrisa a esos niños que lamentablemente perdieron sus papás o toda la gente que ha perdido familiares. Soy consciente de lo que lleva y esperemos que pueda ser así, que podamos hacer buenas campañas para darles alegría a ese pueblo que tanto se merece.
-¿Y del equipo has tenido contacto con alguno de los integrantes?
Sí he tenido contacto con dos personas que hablan castellano.
-Uno es Yaser Hamed
Sí, y el otro es Agustín Mansur, que también jugó en Guaraní. Y me explicaron un poco, de cómo es la cosa allá, cómo es el fútbol allá, cómo es todo.
-¿Qué te pudieron decir?
Cosas más, más profesionales en el sentido más futbolístico. De que si implicaba representar a una selección, se abren muchas puertas. Es algo que quería saber tal vez un poco más detalladamente qué puertas se me venían a abrir y por eso los llamé.
-¿Y apuntas a eso, a otros mercados?
Quiero dejar en claro igual que yo voy a Palestina para representar a la selección. Pero quieras o no, igual vivo de esto. Creo que también es algo que se pone sobre la mesa el tema económico y todos saben que Medio Oriente es un mercado que está creciendo mucho. Entonces son puertas que se me pueden abrir.
-El 15 de noviembre está pactado el amistoso en Bilbao, es la fecha de un potencial debut. Y Bilbao es una ciudad especial porque es un bastión del rechazo a lo que está considerado como un genocidio en Gaza, ¿cómo prevés esa llegada a Bilbao y todo lo que va a conllevar el partido? El partido ahí va a pasar a un segundo plano por todo lo que va a representar.
Hay videos de Bilbao, de Pamplona, la zona de Navarra, que apoyan muchísimo a Palestina. Y no solamente en Bilbao, también me lo dicen en Italia, en Francia. En general toda España apoya bastante a Palestina. Va a ser algo histórico. Creo que si el mundo se levanta ante este genocidio, creo que todo el mundo puede acabar con esta horrible situación. Creo que es un paso importante. Lo que está haciendo España y la Selección Vasca y la Selección de Cataluña, porque el 18 jugamos contra ellos en Barcelona.
-Va a ser bastante emotivo
Sí, recontra. De hecho, mis papás están viendo para ir y quiero que me acompañen ahí porque va a ser histórico
-En los últimos nueve partidos con Sport Boys ha sumado minutos, ¿qué tanto también influyó esta regularidad en el equipo que has conseguido ahora con Boys para el llamado?
Muchísimo. Siempre buscan jugadores que estén activos y estén jugando en cualquier selección, entonces que pueda tener continuidad y más en un equipo grande es lindo. Esa continuidad influyó bastante para que me puedan convocar.
-Boys también es un club con problemas financieros que indudablemente afectan la estabilidad, ¿eso qué tanto influye en el plantel?
Boys es un equipo con mucha tradición, mucha historia. Ese tema sí se habla. Sin embargo, los jugadores saben que la camiseta está por delante de todo. Boys es un equipo grande, para mí el tercer grande. Es un equipo con mucha historia, mucha tradición y pase lo que pase dentro de la institución, nosotros la vamos a salir a defender a muerte todos los fines de semana a muerte. Vamos a salir a matar por la camiseta.


