
El lunes 22 de diciembre, Lima Metropolitana vivió una jornada significativa con la llegada de la tuneladora Delia a la estación de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), un hito que marca el avance de la Línea 2 del Metro, la cual ya registra un 74% de avance físico global.
Este acontecimiento representa una etapa crucial en la construcción de la primera línea subterránea de la capital peruana, destinada a unir el distrito de Ate con el puerto del Callao en solo 45 minutos.
La infraestructura está diseñada para beneficiar a unos 2.5 millones de personas, quienes podrán trasladarse entre ambos extremos de la ciudad con mayor rapidez y seguridad.
El evento, impulsado por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), fue celebrado en la icónica avenida Venezuela, donde autoridades, trabajadores y representantes de la comunidad universitaria presenciaron la llegada de la máquina.
Según declaraciones del ministro Aldo Prieto, la estación de San Marcos será la primera en una universidad peruana con acceso directo a una red de tren subterráneo urbano. Este avance facilitará la movilidad diaria de estudiantes, docentes y trabajadores del campus, incrementando la conectividad y la accesibilidad en la zona.
La Línea 2, que comenzó operaciones parciales en diciembre de 2023, conecta actualmente cinco estaciones entre Mercado Santa Anita y Vía de Evitamiento. Una vez terminada, la obra contará con 27 estaciones distribuidas en diez distritos de Lima y Callao y tendrá la capacidad de transportar aproximadamente 600 mil pasajeros al día a lo largo de 27 kilómetros.

Interconexión y mejoras en la movilidad urbana
El proyecto prevé la integración de la Línea 2 con la Línea 1 del Metro, a través de una estación en la intersección de la avenida 28 de Julio con Aviación, en el distrito de La Victoria.
La red se conectará también con el servicio del Metropolitano por la Estación Central y con el Ramal de la Línea 4 en Carmen de la Legua, en el Callao. Esta red intermodal facilitará que los ciudadanos se desplacen entre Ate, Callao, Villa El Salvador y San Juan de Lurigancho, optimizando la circulación y el acceso a diferentes zonas de la ciudad.
El avance de la obra subterránea ha sido posible gracias a la labor de las tuneladoras Delia y Micaela, dos máquinas de alta tecnología que simbolizan el esfuerzo y la capacidad técnica nacional para ejecutar proyectos de gran envergadura. Mientras Delia culminó su recorrido hasta San Marcos, Micaela sigue su trayecto hacia el Callao, quedando solo tres estaciones pendientes para finalizar el túnel.
El MTC detalló que, una vez concluido el túnel, las estaciones se implementarán de acuerdo a los cronogramas técnicos, permitiendo la expansión progresiva del servicio a lo largo de los 27 kilómetros.
El ingeniero David Celmi, coordinador del Proyecto Línea 2, subrayó que los beneficios de la obra ya se evidencian en los cinco kilómetros en funcionamiento: “El recorrido que se hace en 7 minutos, comparado con lo que se hace en hora punta en la superficie, que es 30 minutos”.
Por su parte, Walter de La Torre, jefe de Comunicaciones de la Línea 2, informó que la operación completa requerirá 35 trenes para la Línea 2 y siete para el Ramal de la Línea 4, sumando un total de 42 trenes.



