
Cuidar la salud del endometrio es fundamental para el bienestar ginecológico de las mujeres. El endometrio es el tejido que recubre el interior del útero y cumple un rol clave en el ciclo menstrual y la reproducción. En el Perú, el Ministerio de Salud (Minsa) y el Seguro Social de Salud (EsSalud) advierten que las enfermedades ginecológicas representan una causa frecuente de consulta médica y hospitalización. Entre ellas, el cáncer de endometrio es uno de los más comunes en mujeres, especialmente a partir de la menopausia. Detectarlo de manera temprana puede marcar una gran diferencia en el tratamiento y el pronóstico, por lo que conocer sus síntomas es esencial.
Estos son los 5 principales síntomas del cáncer de endometrio

- Sangrado vaginal anormal: el síntoma más frecuente y alarmante del cáncer de endometrio es el sangrado vaginal fuera de lo normal. En mujeres posmenopáusicas, cualquier sangrado debe considerarse una señal de alerta. En mujeres que aún menstruan, puede manifestarse como reglas muy abundantes, sangrados entre periodos o ciclos menstruales irregulares que no eran habituales.
- Flujo vaginal inusual: la presencia de un flujo vaginal acuoso, espeso o con mal olor, que no está relacionado con infecciones comunes, puede ser un signo temprano de cáncer de endometrio. Este flujo puede presentarse con o sin sangre y suele persistir en el tiempo.
- Dolor pélvico o abdominal bajo: el dolor en la zona pélvica o en la parte baja del abdomen puede aparecer a medida que la enfermedad avanza. Puede ser constante o intermitente y, en algunos casos, intensificarse durante las relaciones sexuales o al orinar.
- Dolor durante las relaciones sexuales: el dolor o la molestia durante las relaciones sexuales, conocido como dispareunia, puede ser un síntoma asociado al cáncer de endometrio. Aunque este signo también se presenta en otras afecciones ginecológicas, su persistencia amerita una evaluación médica.
- Pérdida de peso y cansancio sin causa aparente: la pérdida de peso involuntaria, la fatiga constante o la sensación de debilidad pueden indicar que el organismo está enfrentando una enfermedad sistémica. En el cáncer de endometrio, estos síntomas suelen aparecer en etapas más avanzadas, pero no deben pasarse por alto.
Factores de riesgo del cáncer de endometrio
Existen diversos factores que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de endometrio. Uno de los principales es la edad, ya que se presenta con mayor frecuencia en mujeres mayores de 50 años. El sobrepeso y la obesidad también son factores importantes, debido al aumento de estrógenos en el organismo.

Otros factores de riesgo incluyen la menopausia tardía, no haber tenido embarazos, el síndrome de ovario poliquístico, la diabetes y la hipertensión. El uso prolongado de estrógenos sin progesterona, así como antecedentes familiares de cáncer ginecológico, también incrementan el riesgo. Según Minsa y EsSalud, llevar un control ginecológico regular es clave para identificar estos factores y reducir la posibilidad de desarrollar la enfermedad.
Cómo prevenir el cáncer de endometrio
La prevención del cáncer de endometrio se basa en la adopción de hábitos saludables y en la vigilancia médica oportuna. Mantener un peso adecuado mediante una alimentación equilibrada y actividad física regular ayuda a reducir los niveles de estrógenos y, con ello, el riesgo de cáncer.
El control de enfermedades como la diabetes y la hipertensión también es fundamental. Asimismo, es importante acudir a controles ginecológicos periódicos, especialmente en mujeres con factores de riesgo o que han llegado a la menopausia. Minsa y EsSalud recomiendan no ignorar cambios en el sangrado vaginal y consultar de inmediato ante cualquier síntoma anormal. Si bien no existe una prueba de tamizaje universal para el cáncer de endometrio, la detección temprana basada en los síntomas permite iniciar tratamientos más efectivos.
El cáncer de endometrio suele dar señales claras en sus etapas iniciales. Reconocer sus principales síntomas, conocer los factores de riesgo y adoptar medidas preventivas puede salvar vidas. La atención médica oportuna y el autocuidado son pilares fundamentales para proteger la salud ginecológica de las mujeres peruanas.



