
El defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez, presentó una demanda ante el Poder Judicial para que se declare nuevo el Contrato de Concesión del Proyecto Vías Nuevas de Lima, suscrito en 2013 entre la Municipalidad Metropolitana de Lima y la empresa Rutas de Lima, así como la adenda de 2014.
Según el expediente al que accedió Infobae, Gutiérrez exige la nulidad de dicho contrato por “contravenir normas de orden público, carecer de fin ilícito y haberse celebrado en un contexto de contratación estatal de manifiesta y continuada corrupción”.

El defensor afirmó que el contrato firmado por la gestión de Susana Villarán es nulo por “fin ilícito”, supuesto incumplimiento las leyes y por la sentencia del Tribunal Constitucional que suspendió los peajes en Puente Piedra.
En caso de que la pretensión principal no sea acogida, Josué Gutiérrez pide al Poder Judicial que anule las “ilícitas cláusulas vejatorias” del contrato de concesión que afectaron los derechos de la ciudadanía.
Al momento de calificar la demanda, el Decimocuarto Juzgado en lo Civil de Lima advirtió incongruencias, por lo que requirió al defensor del Pueblo que subsane. Esto efectivamente se hizo y el juzgado ya admitió a trámite la demanda.
Así, la jueza Marianella Leonardo dispuso que se notifique a la Procuraduría Pública de la Municipalidad Metropolitana de Lima y a Rutas de Lima para que respondan la demanda en un plazo máximo de 30 días.

Rutas de Lima dejó de operar
Tras el retiro de Rutas de Lima, el alcalde Renzo Reggiardo anunció la suspensión temporal del cobro de peajes en las autopistas afectadas, una medida que busca evitar un impacto inmediato en los usuarios mientras se evalúa el estado de la infraestructura y las condiciones en que la empresa abandonó la concesión. El funcionario explicó que la definición de un nuevo modelo de administración dependerá de la culminación de obras pendientes, como la implementación de vías alternas, indispensables para cualquier futura concesión.
“Estamos evaluando si de aquí en más, dependiendo lo que suceda también con alguna infraestructura que falta implementar, por ejemplo, las vías alternas. Si no tenemos vías alternas, ¿cómo podemos dar en concesión, eh, esta infraestructura o esta, o estos espacios de las cabinas de cobro de peaje?”, dijo.
El alcalde también informó que la municipalidad mantiene activos los recursos legales necesarios para evitar futuros inconvenientes con las vías recuperadas.
Desde el 4 de diciembre, fecha en que Rutas de Lima dejó de operar, la MML asumió el control directo de la maquinaria y la atención de emergencias en las autopistas. El alcalde calificó la salida de la empresa como un abandono y recordó las denuncias de presunta corrupción que pesaban sobre la concesionaria. “Recordemos que esta es una concesión que la Municipalidad Metropolitana de Lima le cedió a través de contratos, que ya se ha hablado también mucho al respecto, que estarían (voy a poner un condicional) plagados de actos de corrupción. Pero esta concesión dejó de operar ayer, como ha sido de público conocimiento”, afirmó Reggiardo.
Uno de los principales temores tras la ruptura con la empresa era la continuidad de los servicios básicos en la autopista, como limpieza, auxilio vial, seguridad, señalización y mantenimiento. Frente a ello, el alcalde aseguró que la MML dispone del equipamiento necesario para mantener el adecuado funcionamiento de las vías, una tarea crucial ante la inminente temporada de verano 2026, cuando se espera un aumento significativo del flujo vehicular.



