Fiscalía pide cadena perpetua para terrorista Víctor Polay Campos por caso ‘Las Gardenias’: ¿de qué se le acusa?

El terrorista Víctor Polay Campos podría incrementar su estadía en prisión. El Ministerio Público busca condenarlo por la masacre del caso ‘Las Gardenias’

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El Poder Judicial dictaminó 18
El Poder Judicial dictaminó 18 meses de prisión preventiva para Victor Polay Campos fue Foto: Poder Judicial

El Poder Judicial dictaminó 18 meses de prisión preventiva contra el terrorista Víctor Polay Campos, excabecilla del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). La investigación se centra en los presuntos delitos de homicidio calificado y terrorismo agravado por el caso ‘Las Gardenias’.

Durante la sesión, se sustentó que existen fundados y graves elementos de convicción y un alto riesgo de que se obstaculice el proceso, además de peligro de fuga. El Ministerio Público sostuvo que el entorno de amigos y familiares está en Argentina y Europa, por lo que habría la posibilidad de evadir a la justicia.

Víctor Polay Campos, apodado ‘Camarada Rolando’, lideró el MRTA, la organización subversiva ejecutó atentados, secuestros y asesinatos en varias regiones del país bajo su dirección. Fue capturado en 1989, pero logró escapar al año siguiente a través de un túnel excavado en el penal de Canto Grande, protagonizando una fuga masiva.

Víctor Polay Campos, fundador del
Víctor Polay Campos, fundador del MRTA, recibió una condena de 32 años de prisión, marcando un hito en la lucha contra el terrorismo en Perú. (Andina)

¿De qué trata el caso?

El 31 de mayo de 1989, seis integrantes del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) asesinaron a balazos a ocho personas de la comunidad LGBTIQ en el bar Las Gardenias, ubicado en la ciudad de Tarapoto, región San Martín. El periódico Cambio, órgano de difusión del MRTA, publicó que los responsables justificaron el crimen.

La Segunda Fiscalía Penal Supraprovincial Especializada en Derechos Humanos y contra el Terrorismo de Lima solicitó la pena de cadena perpetua por los delitos de homicidio calificado y terrorismo agravado.

Tres meses antes, el cadáver de un joven homosexual apareció en la misma ciudad. Según el Instituto de Democracia y Derechos Humanos de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCUP), estos crímenes expusieron la sistematicidad de la violencia hacia la diversidad sexual durante el conflicto armado, donde también se documentaron persecuciones, desapariciones y torturas por parte de grupos subversivos y fuerzas del Estado.

Crímenes de odio

El Movimiento Homosexual de Lima (MHOL) identificó diez casos de crímenes de odio cometidos tanto por organizaciones subversivas como por fuerzas militares, documentados en reportes oficiales y declaraciones de sobrevivientes. Uno de los primeros episodios ocurrió en Aucayacu, provincia de Leoncio Prado, departamento de Huánuco, el 6 de agosto de 1986. Sendero Luminoso secuestró y ejecutó a diez personas, entre las que se encontraban homosexuales y mujeres en situación de prostitución, bajo la acusación de ser “indeseables”.

El 12 de septiembre de 1988, en Pucallpa, Ucayali, Sendero Luminoso capturó a diez personas identificadas como homosexuales, prostitutas y drogadictos. Convocó a medios locales para exponer los asesinatos; los cuerpos fueron arrojados a una fosa común y no hubo denuncias ni investigaciones por parte de familiares. La Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) incluyó en sus informes episodios similares en los que las víctimas eran desechadas en ríos sin que la población buscara esclarecer su identidad.

Durante este periodo, los grupos armados impulsaron políticas de control y represión contra expresiones de diversidad sexual. Sendero Luminoso buscó instaurar la monogamia y el sexo reproductivo como normas, mientras que el MRTA articuló “cruzadas contra el vicio”, dirigidas a homosexuales y personas señaladas por infidelidad o trabajo sexual. “Debían enmendar sus vidas”.