Black Friday: ¿Por qué se llama así y desde cuándo Perú adoptó esta moda de Estados Unidos?

La transformación de esta fecha ocurrió cuando los comercios resignificaron el término, asociándolo con el momento en que sus cuentas pasaban de pérdidas a ganancias, convirtiendo así el día en una cita clave para el consumo y las ventas

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El Black Friday nació como
El Black Friday nació como un día de caos urbano en Filadelfia durante los años 60, caracterizado por el tráfico, las aglomeraciones y la presión tanto para policías como comerciantes después del Día de Acción de Gracias - Créditos: Freepik.

El Black Friday o ‘viernes negro’ es una fecha que, históricamente, comenzó como una jornada de caos urbano y ha terminado por transformarse en uno de los mayores símbolos globales del consumismo.

Este evento, conocido por sus descuentos y largas colas, tiene un origen que se remonta a la década de 1960 en la ciudad de Filadelfia en Estados Unidos. Por aquel entonces, no se trataba de compras masivas sino de un término utilizado por la policía local para describir el tumulto y las complicaciones derivadas del tráfico y las aglomeraciones posteriores al Día de Acción de Gracias.

La saturación de las calles, la presión sobre las fuerzas de seguridad y el incremento en la actividad comercial y los incidentes marcaron el comienzo de una denominación que con el tiempo sería resignificada.

El giro conceptual del Black Friday se produjo cuando los comerciantes vieron la oportunidad de canalizar el desorden en un evento positivo para el sector. Al advertir el potencial de la jornada, empezaron a promover la narrativa de que sus finanzas pasaban de estar en “números rojos” a “números negros” gracias al repunte de ventas, estableciendo el día como vital para sus balances anuales.

En la última década, la
En la última década, la tradición del Black Friday se expandió internacionalmente, llegando a Perú aproximadamente desde 2012 y fomentando la participación de comercios físicos y virtuales con promociones en diversas categorías, lo que promovió el auge del comercio electrónico - Créditos: Freepik.

Así, la idea de pérdida o caos quedó a un lado y dio paso a una visión de prosperidad, lo que ayudó a instaurar la costumbre de abrir las puertas con promociones inusuales.

Durante la década de 1980, el Black Friday se consolidó definitivamente en Estados Unidos. Las grandes cadenas minoristas tomaron la iniciativa de institucionalizar las rebajas, intensificando la competencia entre comercios por captar la atención de la mayor cantidad posible de clientes.

La magnitud de este fenómeno es tal que, en 2022, las ventas estadounidenses superaron los nueve mil millones de dólares solo durante ese día. Este dato muestra hasta qué punto la ocasión se ha convertido en un motor fundamental de la economía, además de marcar el inicio indiscutible de la temporada de compras navideñas.

A partir de la última década, la influencia del Black Friday ha cruzado las fronteras de América del Norte e inspirado a países de distintos continentes. América Latina, Europa y Asia han adaptado la tradición, modificando fechas y estrategias para ajustarse a las realidades de cada mercado.

El Black Friday ha trascendido
El Black Friday ha trascendido las fronteras estadounidenses en la última década, adaptándose a diversos continentes y consolidando su presencia en América Latina, donde Perú lo celebra aproximadamente desde 2012 cada último viernes de noviembre - Créditos: Freepik.

Perú no ha sido la excepción: aproximadamente desde 2012, el evento se celebra en territorio nacional cada último viernes de noviembre, siguiendo los pasos del calendario estadounidense. Tanto los comercios tradicionales como los virtuales participan ofreciendo rebajas en áreas tan diversas como tecnología, indumentaria, electrodomésticos y más, facilitando el avance del comercio electrónico peruano.

El gran atractivo de la jornada reside en la expectativa por acceder a productos con precios reducidos. Este entusiasmo lleva a que muchos consumidores planifiquen sus compras con semanas de anticipación, comparen ofertas y seleccionen estratégicamente los productos más deseados.

Actualmente, el fenómeno ha evolucionado: las plataformas digitales suelen adelantar promociones, expandiendo el alcance de la fecha y multiplicando las opciones para los usuarios, quienes ya no dependen exclusivamente de visitar tiendas físicas.

El crecimiento del comercio electrónico
El crecimiento del comercio electrónico y las ofertas en múltiples rubros han hecho que la expectativa por adquirir productos a precios bajos impulse la planificación de compras y el adelanto de promociones en plataformas digitales - Créditos: Freepik.

Pero la popularidad del Black Friday también ha atraído mayor escrutinio crítico. Diversos colectivos cuestionan el estímulo al consumo desmedido y los efectos negativos para el medio ambiente de esta “fiesta” de descuentos.

Asimismo, organizaciones defensoras de los derechos laborales han expuesto situaciones complicadas para los trabajadores de grandes tiendas, quienes deben enfrentar jornadas extenuantes durante los días de mayor demanda. Iniciativas como el “Día de No Comprar Nada” intentan contrarrestar el exceso a través de una invitación al consumo responsable.

En el caso peruano, las autoridades han intensificado la vigilancia durante el Black Friday y los alertan a los ciudadanos ante posibles fraudes o campañas engañosas en línea. Las recomendaciones habituales giran en torno a la importancia de revisar la legitimidad de las tiendas, verificar los términos de las promociones y consultar fuentes confiables antes de efectuar cualquier transacción. De este modo, se busca que el objetivo de aprovechar buenos precios no reste seguridad a la experiencia de compra.