
La capital peruana se prepara para recibir a cerca de 50.000 aficionados brasileños por la final de la Copa Libertadores 2025, duelo que medirá a Flamengo y Palmeiras el sábado 29 de noviembre en el Estadio Monumental.
Frente a una afluencia sin precedentes, la Superintendencia Nacional de Migraciones reforzó las acciones de control en los principales puntos de ingreso del país.
El plan contempla la disposición de más personal en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, donde se espera arriben numerosos vuelos comerciales procedentes de Brasil.
Además, el Grupo 8 de la Fuerza Aérea habilitó módulos de atención exclusivos para los cerca de cien vuelos chárter que trasladarán a las barras de ambos equipos.
Migraciones aclaró que estos operativos incluyen el Puesto de Control Fronterizo (PCF) de Iñapari y el Puesto de Verificación Migratoria (PVM) Planchón, rutas habituales para quienes cruzan desde la región Madre de Dios.
Las fronteras terrestres también reciben atención especial. Los pasos de Desaguadero en Puno y Santa Rosa en Tacna incrementaron sus dispositivos de control ante la expectativa de que miles de hinchas accedan al país por carretera.
Según explicó Armando García, superintendente nacional de Migraciones, el personal que participará en estos filtros fue previamente capacitado por especialistas de la Embajada de Brasil para identificar documentos falsificados y detectar irregularidades en el flujo migratorio, tarea crucial frente al gran volumen previsto.
Para esta ocasión, la experiencia previa resulta clave. En la final de 2019 albergada también en Lima, las autoridades gestionaron el ingreso de más de 40.000 turistas, experiencia que sirve como referencia para el nuevo despliegue.

Alerta social y gran movimiento turístico
Reportan inquietud entre los vecinos de la calle Berlín, en Miraflores, después de episodios recientes protagonizados por hinchas de ambos equipos.
Videos difundidos muestran enfrentamientos y lanzamiento de objetos en las inmediaciones de una discoteca local, evento que motivó a los residentes a solicitar mayor presencia policial ante el temor de repeticiones.
“Se necesita mayor seguridad porque esto va a ser tremendo”, afirmó un vecino sobre el sentir barrial tras la ausencia de patrullajes la noche de los incidentes.
La magnitud esperada de aficionados aporta un desafío de orden público, pero también ofrece una oportunidad para la economía local.
El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) estima un ingreso de 75 millones de dólares a raíz de la final, cifra que superaría los registros de 2019, cuando la ciudad recibió más de 62 millones de dólares por concepto de turismo vinculado a la final continental.
La ministra Teresa Mera señaló que el evento funciona como escaparate internacional de la infraestructura y logística operativa del país. Según Mera, los visitantes podrían extender sus estadías y motivar un desplazamiento hacia distintas regiones, lo que dinamizaría más de un sector económico.
Directivos de los clubes finalistas sostuvieron encuentros con las autoridades en la Embajada de Brasil, donde se trataron temas de seguridad y logística. Desde Migraciones y las fuerzas de seguridad comunican una visión coordinada, con especial énfasis en la prevención de incidentes y la protección tanto de extranjeros como de residentes locales.



