
Mantener la cocina limpia no es solo una cuestión estética o de comodidad: es un pilar esencial para la salud de la familia. En el Perú, las entidades de salud pública advierten que una buena higiene de los alimentos y las superficies donde se preparan evita numerosas enfermedades. Según el Ministerio de Salud (Minsa), el correcto lavado de manos reduce más del 40 % de los casos de enfermedades diarreicas. Asimismo, el Seguro Social de Salud (EsSalud) ha señalado que la renovación frecuente de utensilios y esponjas en la cocina ayuda a prevenir intoxicaciones alimentarias o infecciones estomacales transmitidas por bacterias. En este contexto, además de los productos comerciales de limpieza, existen trucos caseros eficaces para mantener impecables una de las áreas más importantes: las hornillas de la cocina.
Cómo preparar este truco casero para limpiar las hornillas de la cocina

Las hornillas de la cocina acumulan grasa, restos de comida y bacterias que pueden convertirse en focos de contaminación. Este truco casero usa únicamente vinagre blanco, bicarbonato de sodio y agua caliente. Este es el paso a paso:
Ingredientes:
- 1 taza de vinagre blanco
- 2 cucharadas de bicarbonato de sodio
- Agua caliente (aproximadamente 1 litro)
Instrucciones:
- Retira las rejillas y tapas de las hornillas para poder limpiarlas con más facilidad.
- Vierte el vinagre blanco en un recipiente y sumerge las partes removibles durante unos 10-15 minutos. Esto permite disolver parte de la grasa adherida.
- Mientras tanto, introduce el bicarbonato de sodio dentro de las hornillas (con el gas apagado y completamente frío) y luego vierte agua caliente sobre ellas. Verás como se produce una efervescencia leve, lo que ayuda a desprender la suciedad.
- A continuación, frota las piezas con un cepillo de cerdas suaves o una esponja no abrasiva. Para las hornillas (sin rejillas) usa un paño humedecido en la mezcla de vinagre restante.
- Enjuaga bien con agua limpia, asegúrate de que no queden restos de bicarbonato ni vinagre, y seca completamente antes de volver a colocar las piezas y usar la cocina.
- Puedes finalizar con un poco más de vinagre blanco (en spray o atomizador) sobre la superficie exterior para desinfectar y dar brillo.
Consejos adicionales:
- Realiza esta limpieza profunda al menos una vez al mes.
- Entre limpiezas profundas, pasa un paño húmedo y usa un spray o atomizador ligero de vinagre diluido para mantener limpia la superficie.
- Si las hornillas tienen restos quemados muy adheridos, puedes dejar las piezas en vinagre caliente una hora antes de frotar.
Este método natural evita el uso de químicos agresivos, es económico y aprovecha la capacidad del vinagre ácido de actuar como agente desengrasante y antibacteriano.
Otras maneras de usar el vinagre blanco para la limpieza de la cocina

- Desengrasante de campanas y superficies metálicas: aplica vinagre puro sobre la campana extractora, deja actuar 5 minutos y luego frota con un paño suave.
- Limpieza de microondas: coloca un recipiente con agua y ½ taza de vinagre, calienta durante 3-5 minutos y luego limpia el interior con un paño. El vapor aflojará restos de comida quemada.
- Desinfección de tablas de cortar: rocía vinagre blanco sobre la tabla después de usarla, deja actuar 2-3 minutos y enjuaga. Esto ayuda a eliminar bacterias que podrían contaminar los alimentos.
- Aclarado de grifos y superficies cromadas: humedece un paño con vinagre y frota los grifos para eliminar depósitos de cal y dar brillo.
- Eliminación de malos olores: mezcla vinagre con agua en partes iguales y pulveriza sobre superficies sucias o malolientes (p. ej., dentro de los reposteros o debajo del fregadero). Deja actuar unos minutos y luego limpia.
Usar vinagre blanco con regularidad ayuda a mantener no solo las hornillas, sino toda la cocina, más higiénica, lo cual reduce la proliferación de microorganismos.



