Durante una entrevista en el programa “Arriba mi gente”, Pamela López habló sin evasivas sobre el episodio que cambió el rumbo de su vida familiar: la relación entre su entonces esposo, Christian Cueva, y la cantante Pamela Franco.
La madre de los hijos del futbolista reconoció que, pese al tiempo transcurrido, sigue afrontando un proceso emocional complejo. Admitió que aún no ha podido cerrar del todo las heridas que dejó aquella historia mediática.
En conversación con los conductores, expresó que parte del dolor proviene de lo vivido por sus hijos y del modo en que se vio expuesta públicamente. También aseguró que, aunque intenta sanar, el perdón no llegará fácilmente.
A un año del escándalo, el dolor persiste

Pamela López recordó que, pese al paso de los meses, no logra dejar atrás lo ocurrido. “No, no lo supero en su totalidad. Honestamente, no lo he superado en su totalidad, porque creo que marcó mucho en mi vida y en la de mis niños”, dijo con voz firme. Explicó que el proceso de recuperación es lento y que aún se encuentra buscando equilibrio. “Siento que he superado muchas cosas, pero hay otras que todavía me va a tomar tiempo, no sé cuándo”, comentó al relatar cómo el impacto de la exposición pública afectó también su entorno familiar.
El testimonio de López refleja la dificultad de recomponer la estabilidad tras una ruptura mediática. La historia que protagonizó junto al futbolista Christian Cueva y la cantante Pamela Franco se convirtió en un tema de debate público, dejando huellas profundas. La empresaria indicó que recién ha pasado un año desde el escándalo y que el tiempo no ha sido suficiente para borrar el daño emocional.
Durante el diálogo con el conductor Fernando Díaz, este le comentó que, quizá, la experiencia le permitió liberarse de una relación que no le aportaba bienestar. Ella asintió: “Correcto, concuerdo contigo, Fernando. Quizás ya habíamos hablado detrás de con Micheille (Soifer). Imagínate, otra víctima más se suma a esta novela y de seguro saldrán más. Sí me hizo un favor, pero de mala manera. Creo que no fue el conducto correcto”.
Pamela López: “No soy Dios para perdonar”

A lo largo de la entrevista, la exesposa de Christian Cueva se mostró serena, pero firme en su posición frente a la posibilidad del perdón. Cuando el conductor Ricardo Rondón le preguntó si algún día podría perdonar a Pamela Franco, respondió con contundencia: “Bueno, no soy Dios para perdonar, pero creo que va a ser muy complicado”.
Explicó que el proceso de sanación no solo implica su propia recuperación emocional, sino también la de sus hijos, quienes estuvieron involucrados en momentos difíciles. “Va a tomar mucho tiempo poder sanar y superar muchas cosas, sobre todo porque involucran a mis niños”, dijo con evidente sensibilidad.
Su respuesta generó empatía entre los presentadores, quienes resaltaron la fortaleza con la que enfrenta una etapa marcada por la exposición mediática y la opinión pública. López remarcó que cada paso de su proceso está enfocado en reconstruir la tranquilidad de su familia y en preservar la estabilidad emocional de sus pequeños.

La declaración “no soy Dios para perdonar” condensó el sentimiento que atraviesa: un intento de seguir adelante sin negar el dolor. Aunque reconoció que la experiencia la hizo replantearse muchas cosas, también admitió que el camino hacia la sanación no es lineal. “Quizás ya había cosas que no estaban bien, pero nadie espera que la traición llegue así”, reflexionó.
La entrevista reveló que, más allá de la controversia, Pamela López intenta encontrar un sentido positivo en medio del daño. Aceptó que, de alguna forma, la situación le permitió ver aspectos de su relación que había pasado por alto. “Sí me hizo un favor, pero de mala manera”, reiteró, aludiendo a la forma en que los hechos salieron a la luz.



