
El Colegio de Odontólogos del Perú (COP) alertó sobre un reciente intento de hackeo a su sistema informático, perpetrado presuntamente por bandas criminales que buscan acceder a datos personales de los colegiados para ejecutar extorsiones. Este ataque —que fue detectado y bloqueado— forma parte de un patrón delictivo que viene creciendo desde 2024 y que combina ciberdelincuencia, amenazas directas y violencia armada contra cirujanos dentistas en diversas regiones del país.
El decano del COP, José Ricardo Rojas Rueda, indicó que el objetivo del ataque era obtener información sensible como nombres completos, direcciones, teléfonos y correos electrónicos de los colegiados. Con esos datos, las mafias buscan identificar y ubicar a sus víctimas para exigirles pagos extorsivos, con intimidación a ellos y a sus familias. Aunque el ingreso fue frustrado, el caso ha generado gran preocupación dentro del gremio, que sostiene que se trata de un modus operandi cada vez más sofisticado.
Este nuevo episodio se conoce días después de que el COP confirmó que, desde el 2024, al menos 15 odontólogos denunciaron ser víctimas de extorsiones. Las exigencias económicas oscilan entre S/ 10 mil y S/ 50 mil mensuales bajo la supuesta “protección”, mientras los delincuentes envían mensajes intimidatorios mostrando detalles de la vida personal de los profesionales. En algunos casos, los extorsionadores han dejado objetos explosivos en consultorios o domicilios para reforzar la amenaza.
Ataque armado en Independencia evidenció el nivel de riesgo
Entre los ataques más graves registrados se encuentra el atentado sufrido en un consultorio en el distrito de Independencia, donde un delincuente ingresó simulando ser paciente y disparó contra el odontólogo. La víctima sobrevivió, pero el hecho evidenció el nivel de vulnerabilidad de estos profesionales.
Asimismo, el COP confirmó que un cirujano dentista fue asesinado como consecuencia de estas extorsiones, mientras que otro permanece en estado crítico tras un ataque a balazos dentro de su centro de atención. La situación ha llevado a que varios profesionales cierren sus consultorios, se muden de región e incluso abandonen el país por temor a ser agredidos.

Cambios forzados en la práctica profesional
Como consecuencia del incremento de amenazas, los odontólogos han modificado la manera en que difunden sus servicios. Antes era común que incluyeran números personales, direcciones o fotos de sus consultorios en volantes y redes sociales; sin embargo, hoy muchos optan por restringir la información para evitar ser rastreados. El COP no cuenta con una cifra oficial de cuántos odontólogos han sido extorsionados a nivel nacional, pero reconoce que los casos han aumentado significativamente en los últimos cuatro años.
El decano del COP explicó que las investigaciones preliminares apuntan a que estas bandas estarían intentando hackear, vulnerar o comprar bases de datos de colegios profesionales para obtener información que luego comercializan en redes clandestinas, donde se planifican extorsiones contra profesionales de la salud y otros sectores.
“Los delincuentes están intentando acceder a las plataformas institucionales para robar datos sensibles. Esto ya no es solo extorsión; es crimen organizado con componente cibernético”, advirtió Rojas Rueda.

Ante esta nueva arremetida, el gremio reforzó su seguridad digital con la implementación de protocolos de protección, auditorías de sus sistemas y monitoreo permanente para evitar nuevas vulneraciones. También dispuso capacitaciones obligatorias en ciberseguridad para los colegiados e intensificó la coordinación con la Policía Nacional del Perú y el Ministerio Público para impulsar las investigaciones y el rastreo de los responsables.
COP exige acciones y refuerza seguridad digital
El COP recordó que la extorsión a profesionales de la salud no es un hecho aislado y que colegios profesionales de otras áreas también han sido blanco de ataques informáticos para la sustracción y venta de datos. Las bandas, según señala, operan a nivel nacional y han logrado infiltrar grupos por Telegram, donde se comercializa información privada que luego es usada para delitos.
El gremio pidió al Estado fortalecer la respuesta frente al avance del crimen organizado y consideró que los odontólogos, tradicionalmente ajenos a este tipo de ataques, hoy enfrentan un escenario crítico que pone en riesgo su seguridad y el acceso de la ciudadanía a servicios de salud oral.
“Todos los días en el Perú mueren personas por extorsión o sicariato. Ahora levantamos la voz porque esta amenaza se ha extendido al sector salud y debe frenarse antes de que deje más víctimas”, sostuvo el decano.

El COP insistió en que los profesionales denuncien cualquier intento de extorsión y adopten medidas de protección personal y digital, mientras se espera el avance de las investigaciones sobre el intento de hackeo y los ataques registrados. El gremio adelantó que solicitará la intervención de instituciones especializadas en delitos informáticos y medidas adicionales para garantizar la seguridad de sus colegiados a nivel nacional.


