
En cumplimiento del estado de emergencia decretado para Lima Metropolitana y el Callao, personal del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ejecutó un operativo en el establecimiento penitenciario de mujeres de Chorrillos. La acción tuvo como propósito prevenir y erradicar posibles actividades ilícitas que pudieran originarse desde el interior del penal y afectar la seguridad pública.
La intervención fue ordenada por el presidente del INPE, Iván Paredes Yataco, y se realizó en el pabellón 3, segundo piso, con la participación de agentes de seguridad, el alcaide del recinto y la jefa del área de Seguridad. El procedimiento incluyó la inspección de celdas, pasadizos, servicios higiénicos y pertenencias de las internas, además de la revisión corporal de las reclusas bajo los protocolos establecidos para este tipo de operativos.
Objetos prohibidos y sustancia sospechosa
Durante la requisa, los agentes penitenciarios encontraron diversos artículos no autorizados dentro de las celdas. Entre los objetos incautados se reportaron encendedores, perfumes y una presunta sustancia ilícita que será sometida a peritaje para determinar su composición. También se retiraron conexiones eléctricas irregulares instaladas por algunas internas, las cuales representaban un riesgo para la seguridad del establecimiento.

El personal a cargo documentó cada hallazgo y elaboró los informes correspondientes para las investigaciones internas. La institución destacó que este tipo de objetos, aparentemente inofensivos, pueden emplearse con fines indebidos dentro del penal, por lo que su tenencia está expresamente prohibida.
Supervisión y control penitenciario
La revisión se desarrolló bajo estricta supervisión de las autoridades del penal y contó con medidas de seguridad destinadas a garantizar la integridad del personal y de las reclusas. Los agentes siguieron los protocolos del régimen penitenciario, que incluyen la verificación física de las áreas comunes y privadas, así como la confiscación de materiales que puedan alterar el orden interno.
El operativo se enmarca en las estrategias impulsadas por el INPE para reforzar el control en los centros de reclusión del país. Estas intervenciones permiten detectar conductas irregulares, neutralizar intentos de comunicación ilícita con el exterior y asegurar que las internas cumplan con las normas de convivencia impuestas por la institución.
Compromiso institucional del INPE

El Instituto Nacional Penitenciario reiteró su compromiso con el mantenimiento del orden y la disciplina en los establecimientos a su cargo. La entidad informó que los operativos de este tipo continuarán en distintas cárceles del país con el fin de fortalecer la autoridad penitenciaria y prevenir hechos que comprometan la seguridad ciudadana.
Asimismo, señaló que las acciones ejecutadas responden a un plan de trabajo orientado a erradicar la corrupción y a garantizar un sistema penitenciario seguro y transparente. El INPE precisó que las requisas forman parte de un esfuerzo conjunto para recuperar el control en todos los establecimientos penitenciarios y evitar que estos sean utilizados como centros de coordinación delictiva.



