La Municipalidad de Surco iniciará la próxima semana un proceso de recuperación de espacios públicos en la urbanización Los Álamos de Monterrico, donde más de 200 predios serán intervenidos para restituir áreas verdes identificadas por la autoridad edil como propiedad del Estado. El anuncio ha generado una fuerte controversia entre la comuna y los vecinos de la zona.
El primer caso que se evidenció involucra a la congresista María Acuña, cuyo predio se encuentra en la lista de los inmuebles notificados por la municipalidad en relación con el uso de áreas declaradas como públicas. Esto también ha alcanzado a sus vecinos, quienes muestran su desacuerdo.
Manuel Seña, abogado de los vecinos, argumentó que las áreas verdes en cuestión son privadas, en virtud de una resolución ministerial de 1973 que, según su interpretación, permitió redimir en dinero los aportes originalmente destinados para parques, por lo que serían “privados”.
“Nos sorprende la cacería de brujas que ha iniciado la municipalidad contra vecinos decentes de la urbanización Los Álamos de Monterrico. En el año 1973, la resolución ministerial del Ministerio de Vivienda 1336 estableció que los aportes de parques van a ser redimidos en dinero. Esto es, que se ha pagado para que estas áreas sean privadas”, mencionó a Panamericana.

Además, refiere que el Noveno Juzgado Permanente Contencioso-Administrativo admitió a trámite una demanda contenciosa presentada contra la Municipalidad de Surco, lo cual, bajo el marco de la Ley General del Procedimiento de Ejecución Coactiva, debería suspender la ejecución del procedimiento administrativo municipal mientras dure el proceso judicial.
“Solicitamos que el alcalde Carlos Bruce y la ejecutora coactiva detengan de inmediato la recuperación de espacios, bajo responsabilidad civil, penal y administrativa”, señaló el abogado en representación de los vecinos.
Los residentes denunciaron presuntos actos de hostigamiento, como sobrevuelos con drones y delimitaciones directas sobre sus terrenos, así como el corte de vegetación sin autorización, afirmando que estas acciones aumentaron el clima de tensión en la comunidad.
¿Qué sucedió en Álamos de Monterrico?
El caso de la congresista de Alianza para el Progreso reveló una problemática más amplia en la urbanización. Equipos técnicos de la Municipalidad de Surco identificaron ocupaciones irregulares en cerca de once parques del sector; la superficie involucrada ascendería a 40 mil m², equivalente en extensión al Estadio Nacional, según reveló Punto Final. Las autoridades municipales señalaron que durante los relevamientos de campo detectaron cercos, muros, vallas y construcciones anexas levantadas sobre espacio destinado a áreas verdes.
En el Parque 23, por ejemplo, los planos municipales consignan una extensión original de 7.978 m². Sin embargo, el sitio se redujo a un angosto pasaje de tierra tras la instalación de nuevos linderos, cercado y construcción de edificaciones, con algunas viviendas ocupando hasta quinientos m² del área pública. Una de las propietarias afirmó haber adquirido la casa con la división ya ejecutada y declaró que solo ocupa una parte del predio.

La situación se repite con variantes en otros parques. En el Parque 22, una residente fue notificada por la ocupación irregular de 705 metros cuadrados de espacio común.
Entre los argumentos de los vecinos figuran la falta de delimitación clara originada en periodos pasados, la compra o alquiler de propiedades ya divididas y el desconocimiento sobre la condición del terreno ocupado. Algunos residentes han iniciado gestiones para determinar los linderos oficiales y proceder con la devolución del espacio, pero otros expresaron su sorpresa tras ser notificados de la situación.