
La presidenta de la República, Dina Boluarte, se trasladó este martes en helicóptero desde el patio de Palacio de Gobierno hasta el distrito de Lurigancho-Chosica. La mandataria viajó acompañada por el presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, poco antes del mediodía.
De acuerdo con Google Maps, el trayecto en automóvil entre Palacio y la zona del evento puede tomar alrededor de 26 minutos. Sin embargo, la jefa de Estado optó por un vuelo directo con el objetivo de evitar el tráfico limeño.
Inauguración de la Quebrada Huaycoloro
El motivo de la visita fue la inauguración del proyecto Quebrada Huaycoloro, una obra destinada a prevenir desbordes e inundaciones en la zona durante la temporada de lluvias, un problema recurrente que ha afectado a miles de familias en Lurigancho-Chosica.

En el acto participaron también el alcalde distrital, Hernán Vargas, y otras autoridades locales. Durante su discurso, Boluarte defendió su gestión asegurando que su gobierno ha ejecutado más infraestructura que administraciones anteriores, pese a llevar poco más de tres años en funciones.
“Estamos duplicando y triplicando las obras de infraestructura en todo el país, incluyendo puentes, carreteras, puertos, aeropuertos, hospitales y colegios modulares”, destacó la mandataria, añadiendo que el destrabe de proyectos atrasados responde a una decisión política que busca continuidad en la planificación estatal “más allá de cálculos mezquinos”.
Contexto político complicado
La actividad oficial coincidió con un momento de tensión para el gabinete. El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan José Santiváñez, se encuentra en el centro de cuestionamientos tras la difusión de audios en los que se le vincularía con coordinaciones para favorecer a un excliente suyo recluido en prisión.
Estos hechos han llevado a la oposición a exigir explicaciones y a promover acciones políticas en el Congreso, lo que ha incrementado la presión sobre el Ejecutivo.
Boluarte y el 0% de simpatía en encuestas
El acto oficial también coincidió con la difusión de los resultados de la más reciente encuesta de Ipsos sobre la simpatía que generan diversas figuras políticas en el Perú. Dina Boluarte quedó en el último lugar de la lista, con 0% de respaldo tanto en Lima, como en el interior urbano y en las zonas rurales.

El estudio incluyó a políticos actualmente inhabilitados, lo que generó un escenario distinto al de otros sondeos, pero mostró que al menos una docena de figuras, entre expresidentes, excandidatos, exreclusos e incluso comediantes, superan a la mandataria con al menos un punto porcentual de simpatía.
La decisión de no difundir oficialmente todos los resultados responde a un pedido de las autoridades electorales, aunque los datos circulan extraoficialmente entre analistas y medios.
Este 0% de simpatía refuerza la línea de otras encuestas recientes que evidencian una caída sostenida en la aprobación de la presidenta y un clima de desaprobación generalizada hacia el Ejecutivo peruano.