
La cancelación repentina de los servicios ferroviarios en la ruta Machupicchu – Ollantaytambo ha dejado a miles de turistas varados luego de que manifestantes obstruyeran el paso del tren con piedras en el sector de Qoriwayrachina. En este contexto, las empresas Ferrocarril Trasandino y PeruRail informaron que activaron una operación excepcional para evacuar a los afectados, luego de obtener garantías de seguridad por parte de la Policía Nacional del Perú.
De acuerdo con RPP, al menos diez personas han resulta doheridas por enfrentamientos entre fuerzas de orden y manifestantes durante el intento de liberar la vía ferroviaria.
Las protestas comenzaron el 14 de septiembre con bloqueos que impidieron la circulación regular de los trenes en uno de los principales corredores turísticos de Cusco. Las autoridades priorizaron la evacuación de adultos mayores, niños, mujeres embarazadas y personas en situación vulnerable, quienes se encontraban sin posibilidad de abandonar la localidad de Machupicchu por vía terrestre o aérea. Los primeros trenes de emergencia salieron la noche del lunes 15 de septiembre, marcando el inicio de un operativo de traslado que incluyó a pasajeros con boletos previamente adquiridos.
De acuerdo con el Ferrocarril Trasandino, la autorización de estos viajes fue posible luego de que la Policía Nacional del Perú asegurara que la vía se encontraba despejada. “Habiendo la Policía Nacional del Perú garantizado la movilización de trenes de evacuación, procedemos a autorizar el tránsito de trenes de emergencia solo en la ruta Machupicchu – Ollantaytambo.
Esto es posible debido a que las autoridades nos han confirmado que la vía ha sido despejada, y que se han logrado las condiciones de seguridad necesarias para viabilizar la evacuación de emergencia de los turistas que se encuentran en Machupicchu”, detalló la empresa en un comunicado recogido por RPP.

Medida excepcional en la vía férrea de Cusco
La concesionaria Ferrocarril Trasandino subrayó que la habilitación de operaciones es “una medida excepcional” que no implica la reanudación de los servicios ferroviarios habituales, decisión que tomará únicamente cuando cesen los bloqueos y se confirmen condiciones óptimas de seguridad para pasajeros y personal. Por el momento, solo se autoriza el tránsito de trenes humanitarios para evacuar a quienes permanecen atrapados en el distrito de Machupicchu.
Por su parte, PeruRail comunicó el inicio de los traslados de emergencia la noche del 15 de septiembre a partir de las 19:30 horas. El enfoque principal estuvo en brindar atención prioritaria a las personas con condiciones especiales, respetando el orden de emisión de boletos y favoreciendo a los grupos más vulnerables. La evacuación de turistas hacia la estación de Ollantaytambo comenzó, apenas se confirmó que el trayecto era seguro.
Fuentes de RPP informaron que a las 22:45 horas arribó el primer tren humanitario a Ollantaytambo, procedente de Machupicchu, con alrededor de 308 personas a bordo. Los pasajeros continuaron su camino hacia la ciudad de Cusco en vehículos supervisados por las autoridades regionales. A esa hora, aún restaban otros dos trenes por completar el trayecto, uno operado por Inka Rail y el otro por PeruRail. El segundo tren trasladó cerca de 270 pasajeros.

Tensiones y balance tras la intervención policial
Los bloqueos de la vía férrea en el sector Qoriwayrachina generaron enfrentamientos entre manifestantes y efectivos policiales, con un saldo preliminar, según RPP; de al menos diez personas heridas, entre hombres y mujeres.
Testigos recogidos por el medio relataron que los incidentes ocurrieron cuando los efectivos de la Policía Nacional del Perú intentaron reabrir el paso ferroviario para permitir el tránsito de los trenes de emergencia. En videos difundidos desde el lugar se observa la presencia de comuneros enfrentando a las fuerzas de orden, que emplearon equipos de protección y formación de escudos para controlar el avance de los manifestantes.
Las protestas, de acuerdo con lo reportado por RPP, han impedido el traslado regular de unos 5.000 turistas que permanecen en la zona de Machupicchu aguardando que se normalice la circulación. El operativo de evacuación forma parte de los esfuerzos para reducir el impacto de las medidas de fuerza y restablecer la conectividad entre una de las principales atracciones turísticas del país y el resto de la región de Cusco.
El restablecimiento total del servicio de trenes en la ruta Machupicchu – Ollantaytambo depende de la evolución de las negociaciones y de la desactivación definitiva de los bloqueos establecidos por los manifestantes.


