La provincia de Pataz, en la región La Libertad, continúa bajo estado de emergencia; sin embargo, la violencia vinculada a la minería ilegal no se detiene. A pesar de las medidas excepcionales decretadas por el Gobierno, los grupos criminales que han tomado ilegalmente minas en la zona siguen operando, y los operativos de las Fuerzas Armadas no han logrado desalojarlos.
El caso más crítico es el de la mina Francés, de la empresa CATEOS, ocupada desde el 1 de septiembre. Los intentos de los miembros del Ejército y la PNP por recuperar el control han fracasado. El 3 de septiembre se ejecutó un operativo militar destinado a retomar el socavón, pero el saldo fue de tres miembros del Ejército heridos.
Inicialmente, se informó que la mina había sido liberada; sin embargo, los trabajadores fueron atacados violentamente al intentar ingresar, lo que obligó a planear una nueva intervención. Según reportes de la empresa, los invasores contaban con armamento de guerra, lo que dificultó la respuesta de las fuerzas del orden.

Recientemente, el presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, viajó a la región para verificar el trabajo que realiza el Comando Unificado de Pataz, con el fin de replicar estas acciones en otras zonas del país.
Por su parte, el ministro del Interior, Carlos Malaver, anunció que las operaciones conjuntas en esta provincia serán el inicio de una estrategia más amplia contra la minería ilegal.
Denuncian abandono del Ejecutivo
El representante legal de la empresa Cateos Alex, Carlos Cuneo, expresó públicamente la frustración de la compañía ante la falta de resultados en los operativos y denunció que la mina Francés sigue bajo el control de delincuentes armados. “Nos encontramos en un estado de indefensión total”, manifestó en declaraciones a RPP.
Cuneo relató que, tras el fallido operativo del 3 de septiembre, no se ha ejecutado ninguna nueva intervención militar. “Después de esta intervención, ya no ha habido otra intervención adicional y, por el contrario, nos encontramos en un estado de indefensión total, porque esperábamos que el Ejército, las Fuerzas Armadas, o el Estado, como tal, se haga cargo y recupere esta labor minera”, indicó.
La incertidumbre también se ha extendido entre los trabajadores y la comunidad local, ya que la última operación programada para el 6 de septiembre fue suspendida por decisión del fiscal Limber Mallqui. Desde entonces, no se ha coordinado ninguna acción concreta para recuperar la mina.
“Nosotros esperábamos que el Estado, al ver cómo estos delincuentes, utilizando armamento largo, no sé de dónde los han sacado, pensábamos que el Estado iba a intervenir con una mayor fuerza, con más personal, pero no, se replegaron y se quedaron los delincuentes al interior”, cuestionó el representante.

Para Cuneo, el repliegue de las fuerzas del orden ha dejado a la empresa en una situación crítica y ha transmitido un mensaje equivocado a los grupos criminales, que continúan operando con impunidad. “Todo ocurre a pesar del estado de emergencia decretado por el Gobierno, que faculta a las Fuerzas Armadas a tomar el control del orden interno en Pataz. La mina Francés; sin embargo, continúa en manos de delincuentes”, señaló en un pronunciamiento previo.