‘Dirin Leaks’: Hackers que atacaron a la Dirección de Inteligencia de la PNP anuncian que su próxima víctima será Dina Boluarte

La base de datos de la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional del Perú quedó expuesta después de que el grupo ‘Deface Peru’ liberara más de dos gigabytes de documentos clasificados. “Investigaremos a toda la familia de Dina Boluarte”, advirtieron

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Parte del material filtrado sobre
Parte del material filtrado sobre las elecciones 2026. Foto: Andina / Andina

El sistema de inteligencia policial peruano fue víctima de uno de los ataques cibernéticos más graves de los últimos años. La base de datos de la Dirección de Inteligencia (DIRIN) quedó expuesta después de que el grupo 'Deface Peru’ liberara más de dos gigabytes de documentos clasificados. Así lo confirmaron los mismos piratas informáticos en diálogo con Hildebrandt en sus trece. Ahora, los hackers van por su próximo objetivo, la presidenta Dina Boluarte y su entorno.

“Investigaremos a toda la familia de Dina Boluarte”, advirtieron por medio de la plataforma Telegram, y adelantaron que su coartada apunta a funcionarios y estructuras estatales vinculadas a prácticas de corrupción.

En el comunicado indicaron que la información publicada se limita a “una parte de lo que obtuvieron” y afirmaron que la corrupción “no se esconde detrás de un firewall. Esto recién comienza”. Anunciaron también que los archivos más reservados no serán difundidos por el momento, para evitar una humillación mayor a la cúpula policial.

Como se sabe, los documentos expuestos incluyen reportes de inteligencia sobre protestas en ciudades como Cusco y actividades oficiales de la presidenta Dina Boluarte, así como concentraciones partidarias, reuniones gremiales y acciones simbólicas de organizaciones como Sendero Luminoso.

Esa información se acompaña con alertas sobre potenciales movilizaciones y recomendaciones para preparar acciones preventivas o de neutralización. Asimismo, se muestran nombres, cargos sensibles y funciones de la cúpula policial, con direcciones IP y teléfonos, lo que permite identificar movimientos.

El comandante general de la Policía Nacional, Víctor Zanabria, intentó reducir el impacto y sostuvo que el incidente respondía al “mal uso de accesos internos”. Pero, la magnitud y variedad de la información revelada desmienten esa interpretación, según revisó el semanario y otras publicaciones especializadas en seguridad digital.

(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

Operaciones secretas, vigilancia política y estructura interna al descubierto

Entre los datos liberados figuran los archivos ’DirinLeak1′ y ‘DirinLeak2′, que incluyen bases de datos internas, reportes clasificados, circulares, credenciales y comunicaciones reservadas. ‘Deface Peru’ logró acceder al sistema sin encontrar barreras técnicas y descargó el material antes de divulgarlo públicamente, un mes después del ataque, el 4 de septiembre.

Uno de los hallazgos más sensibles en los archivos es la exposición de miles de agentes de inteligencia, acompañados de fotografías, cargos y funciones, hecho que para la Policía Nacional supone un riesgo adicional en un periodo caracterizado por el auge de la violencia. También se hallaron registros que documentan los protocolos de seguimiento y vigilancia a organizaciones criminales e individuos bajo sospecha, así como el monitoreo de políticos, periodistas, magistrados y líderes sociales bajo diferentes etiquetas temáticas.

Una de las carpetas filtradas recopila información sobre procesos electorales recientes, precisando locales y aulas de votación de figuras públicas, incluidos exministros como María Antonieta Alva, Carlos Morán, Flor Pablo y Walter Martos, además de congresistas, magistrados y miembros del Tribunal Constitucional. Cada perfil detalla número de documento, función y ubicación para el sufragio, un registro que normalmente debería gestionar la Dirección de Seguridad del Estado y no una unidad de inteligencia.

Los archivos muestran una tendencia de la DIRIN a recabar información sobre usuarios en redes sociales. En el paquete rotulado “Auditoria Twitter” se identifican 9.725 cuentas de X (antes Twitter), vinculadas a políticos, periodistas, dirigentes sociales y ciudadanos, junto con correo electrónico y teléfono. El acceso a esta data permite reconstruir la red de actividades y vínculos públicos de cada individuo.

FILE PHOTO: A man holds
FILE PHOTO: A man holds a laptop computer as cyber code is projected on him in this illustration picture taken on May 13, 2017. REUTERS/Kacper Pempel/Illustration/File Photo

El “hacktivismo” como motivación y las advertencias de próximas filtraciones

En entrevistas con Hildebrandt en sus trece, así como con otros medios, con el hacker conocido como ‘InkaRoot’, quedó evidente el propósito del grupo. “No nos tomen como una amenaza, nuestro único propósito ha sido abrirles los ojos. De otra manera, habría sido imposible que reconociéramos expuestos que están sus sistemas”, expresó el integrante de ‘Deface Peru’. En su perfil, utiliza la fotografía de Vladimiro Montesinos, exjefe del Servicio de Inteligencia Nacional.

El hacker indicó que la operación nació para revelar la debilidad de los sistemas informáticos en las entidades estatales. “Resulta inconcebible que un Estado tenga sus plataformas en condiciones tan lamentables”, comentó al medio. Sobre la reacción oficial, agregó que “la Policía diga que nadie hackeó no sorprende”. “Es lo de siempre. La PNP oculta todo. Ya no es una institución en la que se pueda confiar. Prefieren tapar la verdad antes que admitir que sus sistemas son débiles”, acotó.

El paquete de archivos incluye un ‘módulo de geo inteligencia’, que contiene más de 7.300 registros con fechas, coordenadas geográficas y descripciones, una especie de tablero digital utilizado por la DIRIN para ubicar riesgos y consignar responsables. Otra tabla de 1.878 entradas clasifica provincias, distritos y zonas bajo códigos policiales, lo que permite cruzar en tiempo real información social, política y territorial.

En los documentos filtrados también resalta un archivo titulado “Inteligencia”, compuesto por 6.844 reportes sobre notas informativas, operativos, reuniones sociales, organizativas y gremiales, así como actividades de periodistas y parlamentarios como Harvey Colchado y Segundo Montoya. Gran parte de este material se encuentra distribuido entre sumillas, circulares oficiales y alertas internas, que revelan la amplitud de la vigilancia realizada por la DIRIN.