
La Contraloría General de la República encendió una nueva alerta en el norte del país tras descubrir presuntas irregularidades en las contrataciones realizadas por la Municipalidad Provincial de Piura durante el estado de emergencia declarado por las intensas lluvias del 2023. El órgano de control determinó que se generó un perjuicio económico superior a S/ 100 000, a raíz de pagos sin sustento, servicios inconclusos y obras de drenaje que nunca se culminaron.
El informe señala que 12 proveedores resultaron favorecidos con contrataciones por más de S/ 800 000 vinculadas al alquiler de cisternas y maquinaria pesada. Según la investigación, algunos de estos servicios fueron registrados en simultáneo en diferentes puntos de la ciudad, lo que hacía imposible su ejecución real. Además, se detectó que se emitieron conformidades a trabajos que no se realizaron, mientras que varias penalidades no llegaron a cobrarse.
Funcionarios y contratistas bajo la lupa de la Contraloría

Uno de los casos más graves detectados corresponde a la proveedora Carla Rázuri Santur, quien recibió la conformidad del servicio por el alquiler de un volquete y dos camionetas pese a que no concluyó con la totalidad de lo contratado. Este hecho generó un perjuicio de S/ 37 200. La misma persona aparece también como representante legal de la empresa Constructora Produtec, que tampoco acreditó la experiencia mínima requerida en los Términos de Referencia (TDR), presentando únicamente declaraciones juradas simples.
El documento de la Contraloría detalla que, en el caso de los 25 contratos para el alquiler de cisternas, la municipalidad desembolsó S/ 800 850 sin que los proveedores cumplieran con los requisitos establecidos. La situación fue avalada por funcionarios que otorgaron la conformidad, aun cuando los reportes mostraban que los vehículos prestaban servicio en varios lugares a la vez, lo que ocasionó un perjuicio adicional de S/ 22 329.
Otro punto crítico fue la ejecución de la ficha técnica del drenaje pluvial en la cuenca ciega El Golf. Según el informe, se aprobaron partidas que nunca fueron ejecutadas, lo que ocasionó pérdidas de S/ 47 201. A ello se suma que la municipalidad dejó de cobrar S/ 11 667 por penalidades de mora.
Frente a estos hallazgos, la Contraloría recomendó el inicio de acciones penales y administrativas contra siete funcionarios de la municipalidad: Ricardo Rivas, Yefraín Sánchez, Juan Echeandía, José Calderón, William Sosa, Ángel Espino y Christian Manrique. Todos ellos fueron señalados como responsables de emitir conformidades irregulares y de aprobar servicios sin la debida verificación.
2023 destructivo: Lluvias históricas en Piura dejaron más de 80 mil afectados y daños en la agricultura

Durante marzo de 2023, Piura enfrentó lluvias torrenciales de magnitud histórica, originadas por la influencia directa del ciclón Yaku y la activación de quebradas en varias provincias. El Gobierno declaró a la región en nivel de emergencia 5 tras constatar que más de 80.000 personas resultaron afectadas y que se habían identificado 103 puntos críticos de inundaciones en la ciudad y distritos aledaños. Calles principales como la avenida José de Lama quedaron anegadas, al igual que asentamientos como Nueve de Octubre, Santa Teresita y El Obrero.
La emergencia golpeó duramente al sector agrícola. Según dirigentes locales, se perdieron más de 1.000 hectáreas de mango, uno de los productos de exportación más importantes de la zona, además de extensas áreas de maíz, banano orgánico y plátano. Muchos cultivos se pudrieron debido al exceso de agua, dejando a cientos de familias campesinas sin sustento. En distritos como Tambogrande y Chulucanas, el desborde de quebradas y la crecida del río Yapatera aislaron a comunidades enteras.
El impacto también se reflejó en la salud pública. El Ministerio de Salud reportó 4.300 casos de dengue, atribuidos al agua empozada tras las precipitaciones. El Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) alertó que el río Piura alcanzó un caudal de 1.303 m³ por segundo, nivel que lo colocó en “alerta naranja”, generando riesgo alto para los distritos del Bajo Piura como Catacaos, La Arena y Cura Mori. A todo ello se sumaron inundaciones en más de diez sectores urbanos, con lluvias que en la estación Miraflores alcanzaron 94.5 litros por metro cuadrado, cifra superior incluso a la registrada durante el Niño Costero de 2017.


