El Gobierno impulsa la construcción de un penal de máxima seguridad en la isla El Frontón con un presupuesto de 500 millones de soles. La iniciativa ha generado críticas por sus elevados costos y por los informes oficiales que declararon la propuesta inviable.
Especialistas y exautoridades sostienen que la obra no solo demandaría una inversión millonaria, sino que también representaría un reto logístico permanente para garantizar el traslado de personal, alimentos y servicios básicos, en una zona sin condiciones adecuadas para sostener la operación diaria de un establecimiento penitenciario.
Estas son las razones de la inviabilidad
El reportaje difundido por Cuarto Poder mostró los restos del antiguo penal de El Frontón y advirtió que levantar allí un nuevo centro penitenciario resultaría inviable. El dominical recordó que documentos del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) indican que en un área de 5.000 metros cuadrados solo podrían albergarse 108 reclusos, pese a que el Gobierno asegura que tendrá capacidad para 2 mil internos.
El programa televisivo también expuso que la isla carece de servicios básicos como agua potable y energía eléctrica, lo que obligaría al Estado a transportar diariamente recursos, personal y alimentos en embarcaciones. Voces como la del exministro del Interior José Luis Pérez Guadalupe señalaron que la operación diaria sería imposible de sostener y que los costos superarían largamente lo anunciado por el Ejecutivo.
Impacto ambiental y afectación al turismo
La decana del Colegio de Arquitectos del Perú, Lourdes Giusti, recordó que la isla El Frontón está clasificada como “suelo de protección” en el Plan de Desarrollo Metropolitano Callao 2040, lo que restringe su uso a fines ecoturísticos y recreativos. Bajo esa condición, la instalación de un penal contradice la planificación urbana vigente.
El alcalde de La Punta, Ramón Garay, advirtió que la eventual edificación pondría en riesgo la tranquilidad del distrito y afectaría el turismo local, especialmente los recorridos hacia las islas Palomino y San Lorenzo, zonas que actualmente atraen visitantes por su biodiversidad y valor paisajístico.
Costos millonarios y cuestionamientos financieros
El Ejecutivo ha estimado una inversión de 500 millones de soles y anunció un compromiso privado por 174 millones de dólares. Sin embargo, especialistas en seguridad y exautoridades advirtieron que el gasto real superaría con creces esa cifra por las necesidades de transporte, mantenimiento y generación de servicios en un entorno aislado.
El dominical de América Televisión también recordó que informes del Ministerio de Justicia, el Ministerio de Economía y Finanzas, la Policía Nacional y el INPE, en distintas gestiones, ya habían declarado inviable la iniciativa. Los expertos resaltaron que los recursos públicos podrían destinarse a culminar los cinco penales inconclusos en regiones como Arequipa, Cajamarca, Chincha, Pucallpa e Ica, que en conjunto tendrían espacio para más de 14.000 internos.
Alternativas frente al hacinamiento penitenciario
El sistema carcelario peruano enfrenta un grave problema de sobrepoblación, pero la isla El Frontón no aparece como la mejor respuesta para solucionarlo. La propia Policía Nacional, en un informe de 2024, recomendó evaluar la construcción de un megapenal en tierra firme, con mayor capacidad y accesibilidad, o ampliar las instalaciones del penal de Challapalca.
Las obras penitenciarias inconclusas en distintas regiones del país han sido destacadas como la opción más inmediata y realista para atender la sobrepoblación. Estas estructuras, actualmente abandonadas, permitirían sumar más de 14.000 plazas, cifra que supera ampliamente la capacidad proyectada para El Frontón.
