El congresista Diego Bazán se pronunció sobre el reciente hackeo que afectó a la Dirección de Inteligencia (Dirin) de la Policía Nacional del Perú (PNP), cuestionando con firmeza la versión oficial que buscó minimizar la magnitud de la filtración. Según advirtió, se trata de un hecho que compromete la seguridad nacional y que evidencia la fragilidad institucional frente al avance del crimen organizado.
La polémica se generó luego de las declaraciones del comandante general de la PNP, Víctor Zanabria, quien negó que se tratara de un hackeo y aseguró que la información expuesta no era sensible. “Lo que hay es una divulgación de información que se obtiene con accesos autorizados. No es el sistema que aloja nuestras operaciones de inteligencia, todas en el marco de la ley. No hay ninguna información de reglajes en ninguno de los pantallazos. No hay ninguna información acerca de vigilancias a personas. No hay ninguna información sobre planes operativos y nuestros planes siguen estando en físico”, sostuvo.

Bazán rechazó categóricamente esa explicación. “Con toda la información que hemos podido tener acceso, no solo nosotros, sino también la población en general y cualquier delincuente hoy en el país que quiera saber los planes de operaciones, que quiera tener información de otros ciudadanos, y de incluso personalidades vinculadas a la política o la prensa en el país, yo creo que es no tener sangre en la cara para salir a decir que lo que ha habido no es un hackeo”, expresó.
El legislador precisó que el volumen de datos expuestos es inmenso y afecta directamente a los agentes de inteligencia. “Tengo información, obviamente no puedo revelar las fuentes, pero información acerca de quiénes son los oficiales o suboficiales que trabajan en inteligencia, lo cual vulnera su seguridad. Pueden ser víctimas de un atentado o incluso de coacción y amenaza para ponerse del lado de las organizaciones criminales”, alertó.
Asimismo, descartó que este ataque se trate de un acto aislado de hackers sin mayores propósitos. “Yo no creo que este tema sea un tema por diversión, como suelen hacer los hackers”, afirmó, sugiriendo que detrás estarían organizaciones criminales interesadas en debilitar a la PNP.
Pide salida del director de la Dirin
Bazán consideró que la situación amerita identificar responsables y cuestionó la permanencia del general Augusto Ríos Tiravanti como jefe de la Dirin. “Acá tienen que existir responsables. Lo sensato hoy hubiera sido de parte del comandante general pedirle que ponga su cargo a disposición al jefe de la Dirección de Inteligencia”, exhortó.
El congresista recordó que desde un inicio expresó reparos sobre el nombramiento de Ríos Tiravanti por presuntos vínculos con la minería ilegal. “Yo le advertí al señor Santiváñez en su momento. De que el señor Ríos Tiravanti había sido cesado de su cargo como jefe de la región policial La Libertad por aparentemente haber estado vinculado con temas de minería ilegal. Entonces, esto no lo hace apto para el cargo”, insistió.

Lo más grave, remarcó, es que el propio oficial lideró la compra del sistema de ciberseguridad recientemente vulnerado. “Hace algunos meses, precisamente, él lideró la compra de un nuevo sistema de ciberseguridad para su dirección de inteligencia. Y esto resulta muy grave porque precisamente es ese mismo sistema el que hoy se ha visto vulnerado”, subrayó.
El rol del ministro del Interior
La crisis también salpicó al ministro del Interior, Carlos Malaver, cuya ausencia en la conferencia de prensa de la PNP fue criticada. La falta de pronunciamiento del titular del sector incrementó las dudas sobre su continuidad en el cargo. Desde el Congreso, varias bancadas ya promueven una moción de censura en su contra, lo que vuelve incierta su permanencia en el Mininter.