El papa León XIV ha convocado a un ayuno mundial para todos los católicos y católicas el próximo 22 de agosto. La invitación se dio a conocer a través de los canales oficiales del Vaticano, donde el pontífice instó a los fieles a dedicar la jornada a la oración y a la reflexión sobre la paz y la justicia global.
Mediante una publicación en sus redes sociales, León XIV expresó: “Invito a todos los fieles a vivir el día 22 de agosto en ayuno y oración, suplicando al Señor que nos conceda paz y justicia, y que seque las lágrimas de quienes sufren a causa de los conflictos armados en curso”. Además, el papa pidió la intercesión de María, Reina de la Paz, para que los pueblos puedan hallar caminos hacia la reconciliación y la concordia.
La convocatoria adquiere especial relevancia en el actual contexto internacional, marcado por crisis y enfrentamientos en diversas regiones. El llamado se dirige a la totalidad de la comunidad católica, que supera los 1.300 millones de personas en el mundo, así como a todas aquellas personas que deseen sumarse al gesto de solidaridad espiritual.
La petición hecha por el Sumo Pontífice involucra tanto ayuno como plegarias durante toda la jornada, con el objetivo de pedir una solución pacífica a los conflictos y aliviar el sufrimiento de millones de afectados.
El Vaticano no reportó acciones adicionales ni celebraciones masivas en la Plaza de San Pedro, y alentó a cada parroquia y comunidad a organizar actividades conforme a sus posibilidades. La Santa Sede mantendrá comunicación constante con las conferencias episcopales para acompañar el día de ayuno y reforzar el mensaje de unidad planteado por León XIV.
El ayuno mundial del 22 de agosto se suma a otras jornadas convocadas en el pasado por la Iglesia católica en busca de un compromiso global por la paz, recordando la influencia e impacto que estas iniciativas han tenido en la vida religiosa y social de distintos países.
Nuevo mensaje al Perú
El papa León XIV envió un mensaje especial a los participantes de la Semana Social 2025 en Perú, donde exhortó a los fieles a “no cansarse de hacer el bien”. El pontífice se refirió a la actual coyuntura nacional y ratificó el llamado a enfrentar las injusticias y exclusiones sociales a partir del ejemplo de la tradición católica peruana.
En su mensaje, divulgado desde el Vaticano, el papa destacó la historia de fe del país, al que definió como “una tierra marcada por un designio particular de la Providencia”. Recordó figuras emblemáticas como Santa Rosa de Lima, San Martín de Porres, San Juan Macías y Santo Toribio de Mogrovejo, a quienes consideró ejemplos de una fe viva al servicio de los más vulnerables. “Aquellas tierras han sido acompañadas por una densidad de santidad, profesada siempre en armonía con la atención a los más necesitados”, señaló en su mensaje enviado a Lima.
El pontífice subrayó que estos santos “no son adornos de un pasado barroco”, sino un llamado actual a construir un país más justo. Animó a los católicos peruanos a “ser santos de hoy”, uniendo fe y acción social frente a desafíos como la exclusión y la desigualdad. “El dolor por la injusticia y la exclusión que padecen tantos hermanos nos apremia a dar una respuesta que, como Iglesia, debe corresponder a los signos de los tiempos desde el Evangelio”, afirmó.
León XIV insistió en que cualquier acción social debe enfocarse en el anuncio del Evangelio, advirtiendo que “si no damos a Cristo íntegro, estaremos siempre dando extremadamente poco”. Cerró su mensaje alentando a la perseverancia: “No nos cansemos de hacer el bien, porque la cosecha llegará a su tiempo si no desfallecemos”.
La Semana Social 2025, que se realizó en Lima del 14 al 16 de agosto, reúne a obispos, líderes sociales y representantes de la sociedad civil para dialogar sobre exclusión, ecología integral y economía justa.
