El caso de Sheyla Gutiérrez, ciudadana peruana de treinta años hallada muerta en Estados Unidos, continúa generando interrogantes y una investigación internacional. Gutiérrez, madre de tres niños, fue reportada como desaparecida en Perú y días después su cuerpo fue hallado sin vida en territorio estadounidense. La principal sospecha de su asesinato recae sobre su esposo, Josimar Cabrera, quien permanece en libertad en Perú mientras el proceso avanza en jurisdicción norteamericana.
El hallazgo del cuerpo de Sheyla Gutiérrez motivó la intervención inmediata de las autoridades estadounidenses, mientras en Perú la alerta crecía entre familiares y conocidos. Imágenes captadas por cámaras de seguridad del condominio donde residía la pareja en Estados Unidos muestran a un hombre arrastrando un bulto, escena que se investiga como parte central del caso. Según la defensa de Cabrera, aún no se ha comprobado legalmente la identidad de la persona del video y se ha solicitado una pericia que esclarezca la implicancia de su cliente.

Tras regresar a Perú, Josimar Cabrera fue retenido momentáneamente en el aeropuerto, aunque posteriormente recuperó su libertad debido a la ausencia de una orden de detención en su contra. Su abogado sostiene que Cabrera no enfrenta ninguna investigación formal en el país, pero su situación podría cambiar si Estados Unidos solicita formalmente su extradición. El proceso judicial, de acuerdo al letrado, continuará en Estados Unidos, puesto que el hallazgo del cuerpo y los principales elementos de prueba corresponden a la jurisdicción norteamericana.
Custodia de los menores
En relación a los hijos de Sheyla Gutiérrez, el abogado de Cabrera informó que los tres niños permanecen bajo la custodia de los abuelos maternos. No obstante, indicó que la familia paterna evalúa solicitar la tenencia, argumentando contar con las condiciones necesarias para su cuidado, incluida solvencia económica y ambientes adecuados. El letrado mencionó que los trámites se iniciarán conforme lo permita la normativa correspondiente. Mientras tanto, el Ministerio de la Mujer anunció que los menores serán sometidos a pericias psicológicas para determinar su situación emocional y cualquier antecedente de violencia en el entorno familiar.
El entorno familiar de Sheyla Gutiérrez no ha emitido declaraciones públicas tras confirmarse el fallecimiento, aunque se desconoce si han iniciado acciones legales adicionales. Desde el despacho de Panamericana Televisión se indicó que los menores se encuentran a buen recaudo bajo el cuidado de su familia materna, incluida la abuela de la víctima.

El caso ha captado la atención pública no solo por la gravedad del hecho, sino también por las circunstancias de la desaparición y el hallazgo del cuerpo. El video entregado por vecinos del condominio en Estados Unidos constituye un elemento relevante dentro de la investigación. Las autoridades estadounidenses deberán realizar diligencias para identificar a la persona captada en las imágenes y definir eventuales responsabilidades.
El proceso legal permanece abierto y, según especialistas, será clave la colaboración entre la justicia peruana y estadounidense para esclarecer los hechos. No se descartan nuevas disposiciones sobre la situación procesal de Josimar Cabrera y sobre la custodia definitiva de los menores, quienes continúan bajo resguardo mientras avanza la investigación.
La muerte de Sheyla Gutiérrez deja múltiples interrogantes y abre líneas de trabajo tanto judiciales como administrativas, en un contexto marcado por la preocupación por el bienestar de los menores y la búsqueda de justicia para la víctima.