Desde hace más de un año, José Castillo toca el violín en las calles del Cercado de Lima. No lo hace por pasión ni por espectáculo: lo hace por necesidad. Su hijo menor, Juan Pablo, de ocho años, padece epidermólisis bullosa, una enfermedad poco frecuente que compromete gravemente su piel y órganos internos. El tratamiento no solo es doloroso, también es costoso. Aunque el menor recibe atención en el Hospital del Niño, muchos de los medicamentos y suplementos deben ser comprados por su familia.
El gasto semanal bordea los 600 soles. Ante la falta de un empleo formal con beneficios, Castillo recurrió a su talento: la música. Salir con su violín a espacios públicos le permite conseguir el dinero necesario para alimentar a su hijo, adquirir cremas, gasas, leche de fórmula y costear las emergencias médicas. Sin embargo, su rutina se vio interrumpida recientemente. La Municipalidad Metropolitana de Lima le ha exigido un permiso para continuar trabajando en la vía pública y le advirtió que podría ser multado si no lo obtiene.
Vive de la música y del esfuerzo diario
José Castillo es egresado del Conservatorio Nacional de Música. Se ha formado en interpretación del violín y también en docencia. A pesar de su preparación, actualmente no cuenta con un empleo estable. Enseña música por horas en dos instituciones educativas, sin contrato ni beneficios laborales. Ese ingreso, aunque valioso, no alcanza para cubrir los gastos diarios que implica la enfermedad de su hijo menor.

Cada día que no puede salir a tocar, la situación en casa se vuelve más difícil. El tratamiento de Juan Pablo no se detiene. Requiere alimentación específica, medicamentos costosos y artículos médicos que el seguro integral de salud no siempre cubre. Incluso para atender emergencias, la familia debe asumir los costos. Un solo día puede significar un gasto de 500 soles o más si las heridas se infectan o si las ampollas internas requieren atención inmediata.
El permiso municipal aún no tiene respuesta
La semana pasada, personal de fiscalización le informó que no podía seguir tocando sin autorización. De no contar con ese documento, podría recibir una multa o incluso perder su instrumento. Ante ello, Castillo inició el trámite correspondiente en la mesa de partes de la Municipalidad de Lima. Fue derivado al área de Desarrollo Económico, donde le indicaron que la respuesta podría demorar entre 20 y 30 días.
En tanto, no puede volver a su espacio habitual. La espera no solo afecta sus ingresos, también compromete la salud de su hijo. Castillo señala que no busca ningún privilegio, sino una evaluación rápida de su solicitud. Pide que se considere su caso como urgente, ya que el dinero que reúne en la calle muchas veces es lo único con lo que puede contar para alimentar a su familia.
Juan Pablo necesita cuidados constantes

Juan Pablo fue diagnosticado al nacer. Las ampollas le afectan la piel y los órganos internos, principalmente el esófago. Esto le dificulta alimentarse y caminar. Tiene lesiones severas en los pies y en otras zonas del cuerpo que deben ser drenadas frecuentemente. Ese procedimiento provoca la pérdida de líquidos con nutrientes esenciales, por lo que necesita vitaminas, proteínas y una dieta controlada para recuperarse.
Además de los cuidados médicos, requiere artículos como pañales, gasas, pomadas especiales y suplementos. Todos esos insumos tienen un costo elevado y deben reponerse con frecuencia. Las carencias han llevado a la familia a momentos críticos. Castillo asegura que en los últimos días han tenido que priorizar entre comprar medicamentos o comida. Algunas veces, el alimento diario ni siquiera está garantizado.
Apoya enseñando y también acepta donaciones
El músico también ofrece clases particulares de violín y música general. Ha preparado a jóvenes para ingresar al Conservatorio y se encuentra disponible para talleres, colegios u organizaciones que requieran un profesor especializado. Quienes deseen contactarlo pueden hacerlo al número 986 540 330. Su esposa, Teresa Crespo, también recibe ayuda a través del número 977 859 450.
Ambos números aceptan transferencias vía Yape y Plin. Cualquier apoyo, ya sea económico o en especie, resulta fundamental. La familia necesita con urgencia leche de fórmula, pañales, cremas para la piel, gasas estériles, jarabes y otros productos médicos. Cada donación representa una ayuda directa para la recuperación de Juan Pablo.